madres || jenlisa [G!P]

→ Tailandia

Jennie fue la primera que se despertó al sentir como su pequeña Ella tiraba de su pijama

— Mami...— susurró con vergüenza la pequeña mientras su mirada se dirigía directo al suelo

Jennie frotó sus ojos y luego se volteó observando que Lisa aún seguía durmiendo, así que con cuidado se levantó y ahí fue cuando se dió cuenta de algo muy importante

— Lo siento...— susurró Ella mientras en sus labios se formaban un puchero triste

— Ven amor, no pasa nada

Jennie trató de tranquilizar a su hija al ver que su pijama estaba mojada; sí, al parecer no pudo controlar aquello.

Jennie la levantó y le quitó su ropa para luego llevarla a la ducha y darle un corto baño, ya que era muy temprano y podría resfriarse si se demoraba.

— Lo siento, mami — volvió a repetir la pequeña recibiendo negaciones por parte de su madre

— Es normal, amor, tranquilízate

Le sonrió pero aún pudo ver un deje de preocupación en el rostro de su pequeña hija.

Y es que Ella siempre era así.

Cada vez que hacía algo malo, o creía era malo, se terminaba disculpando repetidas veces hasta que se sintiera satisfecha con ella misma

— Vamos para que desayunes, ¿de acuerdo?

Ella asintió y se dejó cargar por Jennie para que luego la mayor le colocara su ropa y ambas bajaran encontrándose con sus suegros

— Buenos días — saludó la madre de Lisa con alegría al ver que su nuera y nieta llegaban

— Buenos días — respondió Jennie mientras dejaba a Ella en el suelo para que caminara — ¿Qué quieres que prepare? — le preguntó a su hija

— Oh, no es necesario Jennie, ya les tenemos el desayuno listo — avisó Yuri haciendo que Ella sonriera y Jennie se mostrara un tanto confundida

— ¡Mira mami! — exclamó Ella señalando varios de los platillos servidos — Ese le gusta a mamá Lisa

— Sí, es su favorito

— Por cierto, ¿sabes si Lisa pudo dormir anoche?

La pregunta de Yuri desconcertó a la coreana la cual no entendía el por qué de la pregunta

— Lo digo porque sé cómo es mi hija y cuando pasan cosas como las de ayer — habló refiriéndose a la entrevista — No puede dormir en toda la noche. Por eso me preocupa que no haya descansado lo suficiente

Jennie llevaba cerca de diez años con Lisa, pero no se había enterado de aquello hasta ahora

— Yo...n-no lo sé

— Ve a verla, Ella y yo iremos a visitar a mi hermana, quiere pasar tiempo con ella — sonrió

Jennie asintió y sin dudarlo regresó a la habitación en donde se estaban quedando ella y Lisa

Abrió la puerta y se dió cuenta de que Lisa seguía en la misma posición que cuando ella se levantó.

Se acercó con cuidado de no despertarla y se acostó de tal manera que pudo tener una privilegiada vista de las facciones contrarias

Acomodó un mechón detrás de su oreja y luego se dedicó a darle unas pequeñas y leves caricias en su rostro; ¿como alguien tan perfecto podía existir?