madres || jenlisa [G!P]

→ Ultimos meses de embarazo (4-9)

— ¿No crees que estás exagerando?
—comentó riendo jennie hacia lisa la cual se encontraba nerviosa porque le habían informado que en menos de un mes ya podría tener a su pequeña bebé en brazos.

Durante los últimos meses, con ayuda de la doctora, jennie pudo observar cómo su pequeña princesa iba creciendo en su vientre de manera sana y agradable.

Sería mentirles si les dijera que jennie no estaba nerviosa, claro que lo estaba y mucho, pero comparada con Lalisa manoban, había mucha diferencia.

La más alta estaba demasiado intranquila con la llegada de su hija. Sentía que debía estar con jennie en el momento que su hija deseara salir y por eso no se apartaba mucho de su novia.

— Claro que no jennie— contestó acariciando la mejilla de la Coreana.

— Sí lo es lisa. ¿Como vas a dejar a Jeongyeon a cargo de todo? Por dios, eres demasiado protectora — Respondió jennie logrando que lisa riera — ¿Que es tan gracioso?

—jennie , no estoy siendo exagerada como tú piensas. Si he decidido encargarle a Jeongyeon la empresa es porque quiero estar en el momento que Ella llegue al mundo — Se levantó y se apoyó en su brazo para observar mejor a jennie—Tu y Ella son mi prioridad jennie. Por favor entiéndelo. Sé que por lo del embarazo tus hormonas están alteradas y-...¡Auch! — Se quejó en el momento que recibió un leve golpe de parte de jennie

— Seguiré pensando que exageras Lalisa manoban. Y no cambiarás eso — jennie se giró para apagar la luz de la lámpara que era su única iluminación en aquella noche.

Lisa suspiró riendo y se acostó junto a jennie by mirando hacia el techo de su habitación.

— ¿Sabes? Nunca pensé que tendría un bebé a mis 23 años de edad. Eso no estaba en mis planes — confesó lisa logrando que jennie, aunque no la estuviera viendo frente a frente, posara toda su atención en la tailandesa —Pero, hace unos meses cuando me dijiste que estábamos esperando un bebé yo...yo me emocioné demasiado — sonrió al recordarlo — Siempre pensé que odiaría ese momento, pero por el simple hecho de que eres tú quien me ha dado tal sorpresa, todo se vuelve...hermoso. Es algo que nunca llegaré a entender; como tú puedes cambiar mis planes por completo volviéndolos tan sencillamente perfectos — jennie también sonrió pero no se volteó a ver a Lisa. Sentía que la tailandesa aún tenía muchas cosas que decir — Te digo todo esto para que entiendas, jennie kim, que pase lo que pase siempre, pero siempre, te voy a amar porque es algo que tengo muy en claro. Tal vez ya te dormiste, o tal vez soy yo la que quería desahogarse y ser sincera consigo misma. Pero no podía dejar de pensar en que tú creías o crees que solo estoy contigo por compromiso o por Ella. Momo me dijo que estabas insegura de lo que realmente sentía por ti — jennie seguía escuchando todo sin decir nada — Por eso quería que supieras lo que significas en mi vida y ahora lo que Ella también — Lisa suspiró —Estoy segura de que si alguna de ustedes decide dejarme yo...yo no lo soportaría jennie, simplemente no podría hacerlo

Jennie supo que era momento de reaccionar así que se giró quedando su rostro cerca al de la tailandesa. Acarició su mejilla y luego habló

— Yo no dudo de ti lisa...S-Solo que aún me es difícil creer que tú te hayas fijado en mí — Agachó su cabeza. Lisa no era la única que se preocupaba

— Pues que no lo sea. Porque yo realmente te amo, y mucho mi gatita — aclaró acercando su rostro al de la Coreana — Y perdón si alguna vez hice algo para que tú dudaras de la verdad

— Esta bien, mejor olvidémoslo ¿si? —propuso jennie y lisa asintió, la verdad no quería preocuparse por cosas inexistentes —, duerme, es tarde

Jennie dejó un corto beso en los labios de la tailandesa para luego ambas quedarse dormidas

Una semana después

— R-Respira jennie. Falta poco para llegar — pidió Momo quien conducía hacia el hospital más cercano desde la casa de jennie.

La japonesa había llegado a visitar a su amiga hace algunos minutos. Pero lo que ella no sabía era de que ese mismo día, aquel 08 de setiembre de ese mismo año, Ella manoban llegaría al mundo para complementar la vida de sus dos madres.

— Respira

Volvió a pedir Momo en el momento que estacionó el auto frente al hospital.

Bajó rápido y ayudó a jennie a hacer lo mismo. Con la jennie quejándose de dolor, Momo ingresó al hospital pidiendo ayuda a las enfermeras que estaban rondando cerca

— Está teniendo contracciones, creo —habló con duda ya que no tenía ni la más mínima idea de lo que esa palabra significaba, simplemente escuchó a su madre decirle eso a su hermana

— Esta bien. Espere aquí por favor — Pidió la enfermera dejando a Momo con los nervios de punta esperando en aquella sala de hospital sin tener información exacta de lo que ocurría allí dentro

Apenas jennie ingresó a la sala, Momo decidió tomar su teléfono y llamar a lisa

Buscó entre sus contactos pero debido a la desesperación no podía encontrar el nombre de la tailandesa. Así que luego de unos minutos recién pudo encontrarla y le marcó

— ¿Momo? — Preguntó lisa en el momento que contestó aquella llamada

— ¡El bebé! ¡El bebé! — Gritó logrando que todos los sentido de Lisa se pusieran alerta

— ¿Que pasa con el bebé? ¿Ocurrió algo? ¿Donde está jennie? ¿Ella está bien? — Se apresuró a preguntar lisa

— ¡Ya viene! ¡Ya va a nacer Ella!

— Oh por dios Momo, voy para allá

— ¡Espera! ¡Ni siquiera sabes que hospital es!

Pero Lisa colgó. Debía llegar lo antes posible.

Ya iba a tener a su primera hija en brazos.

Ya iba a nacer su pequeña princesa: Ella manoban.
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