Me desperté porque escuché algunos ruidos en la habitación y cuando abrí los ojos Evan estaba terminando de abrochar sus pantalones. Lo observé por unos segundos y no pude evitar morderme el labio, él me miró y me regaló una sonrisa.
- buen día-
Dijo y se acercó a mí para besarme.
- buen día-
Susurré en sus labios cuando se separó un poco de mí. Cuando volvió a pararse extendí mí mano y acaricié su abdomen hasta llegar a su entrepierna. Evan largo una carcajada.
- te levantas caliente-
Afirmó, el me conocía más que nadie. Asentí llevando uno de mis dedos a mí boca y lo mordí suave mientras lo miraba con cara de que quería sexo. Evan mordió su labio con una sonrisa y negó con la cabeza.
- sabes que me tengo que ir, no me hagas eso-
Le puse cara triste y me corrí un poco dejándole espacio para que se siente a mí lado. Extendí mí brazo y lo abrace dejando mí cara en su abdomen. Evan acaricio mí pelo.
- que pasa?-
Pregunto y levanté mí vista para verlo.
- nada, solo que eres tan sexi por dios-
Dije y él volvió a sonreír.
- si intentas retrasarme sabes que no lo vas a lograr. Me gusta ser puntual ______-
Me levanté un poco para ponerme sobre él y lo acorrale entre mis brazos. Evan me miraba con una sonrisa y yo a él.
- hablas mucho ya me podrías haber follado-
Dije en chiste y me tomo de las muñecas con fuerza mostrándome que él era el que mandaba ahora.
- te voy a follar cuando vuela, ahora tengo que trabajar-
Dijo y beso mis labios con fuerza, levanté un poco mis caderas porque se notaba que ya estaba duro y negó con la cabeza.
- por favor-
Susurré en sus labios
- no _______-
Dijo con autoridad y libere uno de mis brazos para tomar su mano y llevarla hasta mí bragas ya húmedas. Evan me acarició con suavidad mientras me miraba.
-te lo perdono porque se que no te gusta llegar tarde al trabajo, nada más. Pero cuando vuelvas tendrás que compensarlo-
Le dije haciéndome la chica ruda, pero Evan largo una carcajada.
- eres tan tierna-
Dijo molestándome y beso mí frente unos segundos.
-evan, me estoy haciendo la sexi, la que domina aquí y tu me dices que soy tierna maldición-
Lo regañe y me tomo del mentón para dejar sus labios muy cerca de los míos.
- si sabes que él que manda aquí soy yo nena-
Susurro
- y ahora vamos, arriba me tengo que ir-
Ordenó y me volvía a sentar en la cama. Evan tomo su remera y se la puso.
- te veo en la noche-
Me avisó y volvió a inclinarse a mí para besar mí frente otra vez.
-te amo-
Dijo y se quedó mirándome hasta que conteste.
- yo a ti-
Evan me regaló una sonrisa y se giró para irse por la puerta. Me acomode contra el respaldo de la cama y suspiré abrumada. Me había quedado tan caliente, con tantas ganas de él. Negué con la cabeza rápidamente y me levanté para meterme en el cuarto de Ross. Cuando abría la puerta lentamente visualice a Ross durmiendo de espaldas. Me metí en silencio y me acosté a su lado abrazándolo por la espalda. Ross largo un gruñido en forma de protesta y se giró para quedar frente a mí.
-_______?-
Pregunto medio dormido y sonreí.
- obvio, quien más se metería a tu cama?-
Pregunte en chiste y él sonrió. Dejé un suave beso sobre sus labios y abrió un poco los ojos.
- que pasa que te andas metiendo a mí cama?-
Pregunto con la voz algo ronca y mordí mí labio.
- Evan se fue y vine por mí ratito de dormir contigo-
Susurré en sus labios, Ross me beso suavemente y volvió a girarse para dormir. Rodee mis ojos algo molesta, que los dos van a estar ignorandome hoy? Pensé. Ross volvió su mirada a mí y miro mí cara de enfado y se echó a reír.
- de que te ríes?-
Pregunte y sonrió.
- en serio que estás súper pegajosa últimamente-
Suspiré
- porque les molesta tanto?-
Largué recordando a Evan que también me lo dice últimamente.
-no me molesta, solo que es raro porque no eres tan tierna-
Contestó y lo tome de la barbilla.
- si que lo soy-
Ross negó con la cabeza y cuando vió que me enfade más, me tomo por la cintura y me abrazo con fuerza mientras me daba uno de esos besos lindo que siempre me da.
- no te enojes linda, ven vamos a dormir un rato más-
Dijo acomodándose en mí pecho y cerrando los ojos. Acaricie un poco su pelo y largo unos pequeños gruñidos de satisfacción.
Nos quedamos un rato acostados con Ross hasta que recordamos que teníamos que ir al médico para hacerme los estudios de embarazo.
Desayunamos algo y fuimos a la clínica en su auto. En el camino Ross iba muy entusiasmado con la situación, era tanto que hasta me dijo los nombres que le podría a sus hijos. Lo miraba atenta mientras manejaba, con mí mano en su pierna, era tan dulce. Pero no sé si era buena idea estar embaraza de Ross en estos momentos. Lo quiero si, pasamos momentos lindo y todo, pero Evan es mí todo, es quien elegí para pasar toda mí vida, todo esto y resulta que lo estoy viviendo con Ross, por ahora.
Al llegar a la clínica Ross se estacionó en el estacionamiento y largo un suspiro.- estiró nervioso-
Dijo entre risitas y acaricie su mejilla .
- tranquilo Ross, vas a ver qué no estoy embarazada y que solo era el calor-
Contesté para tranquilizarlo, el asintio y alboroto un poco su pelo. Bajamos del auto y entramos en la clínica. Ross llamo a uno de sus primos, el cual trabajaba acá para que nos ayude a qué todo sea más rápido. Cuando apareció se presentó y nos llevo a un consultorio para sacarme sangre y rápidamente llevarlo al laboratorio.