III -3

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Un sonido extremadamente estridente resonó en la pequeña habitación dónde dos jóvenes estudiantes dormían.

Salvo que uno de ellos era una persona poco interesada en los estudios y detestaba a muerte ese ruido ensordecedor que le despertaba de su placentero sueño.

El más bajo de los dos revolvió uno de sus brazos entre su pila de mantas con el objetivo de intentar lograr apagar el sonido del despertador que se encontraba en su mesilla de noche.
Cuando finalmente logró apagar el ruido infernal, salió de su cama a regañadientes y se dispuso a iniciar su rutina de mañana cuando recordó que debía hacer algo antes de meterse en la ducha.

'Cierto... Minho hyung me dijo que lo despertara.'

Diez puntos para el pobre niño acordarse de algo nada más levantarse, yo soy incapaz.

Un todavía muy dormido Jisung se acercó a la cama de su compañero de cuarto intentando no tropezar con sus propios pasos debido al sueño del cual aún no se había deshecho.

Pese a que el día anterior hubieran acabado peleando, Minho desquitó su mal humor despotricando delante de Hyunjin y el compañero de cuarto del rubio, antes que seguir su calificada como absurda discusión con Jisung.

A Minho realmente le molestaba la manera de pensar del más bajo, podría decirse que le ponía furioso incluso.
¿Si él realmente no tenía un problema con la homosexualidad de los demás porque debía sentir que era algo incorrecto?
Pese a que sus padres le hubieran lavado la cabeza toda la vida, él era su propio individuo y no tenía por qué pensar de la misma manera que sus progenitores.

Minho sabía muy bien lo que era no pensar igual que sus padres.

"Minho hyung... Minho hyung." Susurró Jisung mientras comenzaba a zarandear al más mayor, emprendiendo la misión de despertarlo.

"No, déjame dormir..." La voz de Minho era casi inaudible por la mezcla del sueño y las mantas que rodeaban su cuerpo.

"Hyung hoy tienes que ir a clase... Sinó te expulsarán."

"Pues que me expulsen." Dijo Minho en una queja pensando que ser expulsado, pero poder dormir más valdría la pena en ese momento.

"Noooo, sabes perfectamente que no quieres eso."

"Cinco minutos más..." Pidió Minho a la vez que se giraba en la cama para no estar frente al castaño.

"¡Hyung tienes que ir a clase!"

Jisung solo mantenía un ojo abierto mientras zarandeaba a Minho para que este se levantara de una vez y se preparara para asistir sus clases.

"Te duchas por las mañanas, ¿cierto?" Recordó Minho, con la esperanza de encontrar algo que le hiciera ganar minutos de sueño.

"¿Eh? Sí..."

"Dúchate y despiértame después." Se dio la vuelta dándole la espalda a Jisung y se volvió a dormir.

Finalmente, el menor se resignó a hacer caso a las palabras del moreno y se marchó a realizar su rutina diaria.

Jisung se duchó, se visitó con el uniforme escolar y peinó su desalborotado pelo.
Después de esto, Jisung regresó a su tarea asignada. La cual no sería finalizada hasta que Minho se levantara de la cama de una vez por todas.

"¡Minho hyung! Levanta de una vez por favor." Pidió el menor suavemente.

Finalmente Minho se levantó de la cama a regañadientes y comenzó a vestirse en lo que Jisung recogía sus libros, cuadernos y otros útiles y los metía ordenadamente en su mochila.

ʙᴀᴅ ᴀɴɢᴇʟ (ᴍɪɴꜱᴜɴɢ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora