One Shots ShunxJune

Dios soy yo de nuevo

Ok ok, este capítulo estará un poco raro así que ya advertí :D

Los caballeros de Bronce habían regresado heridos después de su reciente batalla contra el dios Apolo. Si bien ninguno de los bandos ganó casi secuestran a la diosa Athena, lo cual desmostraba lo poderoso que era el enemigo, por lo que debían de prepararse para el próximo combate. No había pasado mucho más de dos  meses  desde que Hades ataco y otro dios amenazaba con asesinar a Athena para reinar la tierra.

El santo de Andrómeda había mencionado algo sobre un libro que tenía las debilidades de cada dios. Por lo que contó se lo había heredado su maestro mucho antes de morir.
Sus compañeros se enojaron al enterarse de que hasta ahora el joven revelaba dicha información, este se defendió diciendo que no estaba seguro si la información era certera, ya que no podía decirles con cierta seguridad si el contenido era verdadero o falso.

Los santos prácticamente lo obligaron a qué le mostraran dicho libro. Sin opción ninguna el santo accedió, pero no contaban que Shun lo tenía en su departamento, esto último los impresionó a todos.

-¿Tienes un departamento? -Preguntó un incrédulo Seiya.

-Si. ¿Por qué les impresiona?

-Pues no pensé que tendrías un trabajo.

-Aparte que no muchos chicos de nuestra edad tienen un departamento y se independizan tan temprano -Añadio el dragón.

-Bueno pues lo rento en junto con... -El caballero prefirió cerrar la boca. Ninguno de ellos conocían a su actual novia, por lo que prefirió callar al conocer lo sobreprotector que era el fénix.

-¿Con? -Preguntó dudoso su hermano, Ikki.

-Oigan tenemos el tiempo en juego, no sabemos en qué momento el enemigo volverá a atacar a Saori, por lo que posiblemente no estemos preparados para este momento ¿Quieren el libro o no?

-Tampoco nos tienes que contestar de esa manera, sabes que soy sensible -Respondió el ruso.

El joven Andrómeda resopló ante la situación, al cabo de un rato estaban en la limosina de Saori rumbo a su departamento. Los nervios se intensificaban, podía jurar que prácticamente sus manos estaban sudando por la situación. Rezó para que June no se encontrará en el departamento, conocía muy bien que a la rubia le gustaba darle sorpresas y justamente no eran tan apropiadas para que sus amigos vieran.

Los minutos habían pasado tan rápido que no se dió cuenta en qué momento ya estaban en el elevador de el edificio.

-¿Te sientes bien Shun? -Cuestionó el castaño.

-Eh si jeje -Rio nervioso- solo que recuerdo que no he limpiado el departamento por lo que está muy sucio.

La puerta del elevador se abrió y inmediatamente el peliverde corrió a la puerta de su hogar para abrirla y entrar con suma velocidad que ni ellos  distinguieron en que momento había  cerrado la puerta dejando a sus amigos con más que dudas.

-No entiendo porque tan nervioso, yo a veces no limpio mi casa y no me da pena qque la vean -Añadio el pegaso.

-Seiya eres un puerco, no todos llevamos tus malos hábitos de limpieza -Le dijo el ruso.

-Hey eso es un insulto para mí!!!

-¿Ustedes no notan algo raro a Shun? Parecía que estaba ocultando algo -Habló Shiryu.

-¿Mi hermano? Bah, ¿Qué puede ocultar el inocente de Shun? -Concluyó el fénix.

Mientras que el inocente de Shun se dedicaba a esconder cada una de las prendas que se encontraba en el piso, ya que cierta Amazona se las ponía cuando el no estaba, para aunque sea oler su fragancia. A el esto no le molestaba lo único problemático es que ella se dedicaba a satisfacerse a si sola cuando vestía estás. La chica desde que salía con Shun se había acostumbrado a una vida sexual muy activa. No tenerlo cerca la volvía loca.