Park Chanyeol, ex-soldado, vivió y cometió los peores crímenes que pudieron haber cruzado por la mente humana. Luego de dos años de inactividad es arrancado del pozo del retiro para atrapar a un asesino que no tiene nombre y, mucho menos, rostro. Deberá cazar una bestia sanguinaria, sigilosa y astuta que no reconoce autoridad alguna, ni miedo.