Dicen que después de la tormenta siempre sale el sol. Hundida en la oscuridad de mi alma, en las penumbras de mi ser, sin esperanzas, sumergida en el peor de los infiernos. sentia en lo más profundo de mi corazón que estaba muerta en vida y como un un rayo de luz en medio de tanto caoz apareciste tu... Siempre fuiste tú o eso es lo que crei cuando mi mundo estaba prendido fuego. apareciste para salvarme.. Con tus ojos color café, tu sonrisa encantadora, tu cabello castaño apenas tocando tu rostro, tus rojas mejillas al sonreír... simplemente maravilloso... Me enseñaste que aún valía la pena seguir luchando, la vida es hermosa pero más aún si la comparto contigo.....