Siempre Tú #1

Maria y Pilar

Nick, con su personalidad manipuladora y controladora, comenzó a absorberme poco a poco. Me alejó de mi familia y amigos, haciéndome creer que solo él me entendía y me quería.

Al principio, no me di cuenta del daño que me estaba haciendo. Me sentía sola y vulnerable, y se presentó como mi salvador. Me hacía sentir que era la única persona que me importaba, que era mi único amigo, mi compañero de vida.

Me prohibía ver a mis amigos, me decía que mi familia no me entendía, y me hacía creer que solo él podía protegerme.

Me sentía atrapada en esta relación sin saber cómo escapar. Nick me había absorbido por completo, y yo había perdido mi identidad, mi autonomía y mi libertad.

Mi familia no sabía lo que estaba sucediendo porque yo nunca les contaba nada. Siempre fui una persona reservada, introvertida y no me gustaba compartir mis problemas con ellos. Además, tenía miedo de su reacción, porque eran muy exigentes y críticos conmigo.

Recuerdo que siempre me decían que debía ser perfecta, que no podía cometer errores, y que debía cumplir con sus expectativas en todo. Por eso, cuando empecé a salir con Nick. Sabía que no aprobarían nuestra relación, ya que él no tenía estudios universitarios, ni proyectos de vida. Solo pensaba en vivir el día a día.

cuando el empezó a controlarme y manipularme, me sentía atrapada. No sabía cómo escapar de la situación y tenía miedo de que mi familia me regañara o me castigara si se enteraban tan solo tenían 17 años cuando empecé a salir con él. Mi familia jamás se imaginó todo lo que sucedía en nuestra relación ya que yo era una persona muy encerrada en mis pensamientos y emociones.

Me sentía atrapada, sin saber cómo escapar. Nick me había convencido de que todo era normal, que las cosas que sucedían en nuestra relación eran parte de ser una pareja. Me decía que mis amigos no me querían, que querían hacerme daño, y que solo él me entendía y me protegía.

Acabe sola y aislada, sin saber a quién recurrir. Nick se enojaba conmigo cada vez que intentaba salir con mis amigos, me decía que no los aceptaba, que eran una mala influencia. Y para empeorar las cosas, empezó a jugar juegos violentos con ellos, como si fuera una forma de demostrar su poder y control sobre mí.

Recuerdo que una vez, mi amiga María intentó hablar conmigo sobre mi relación, me dijo que se preocupaba por mí, que no parecía feliz. Pero Nick se enteró y se enfureció, me dijo que María era un enemigo, que quería destruir nuestra relación, que tenía celos de él y nuestra relación. Y yo, cegada por el amor y el miedo, creí en él.

La noche que me alejé de mis amigas fue como si algo se hubiera roto dentro de mí. Las conocía desde los diez años, habíamos compartido tantos momentos, risas y secretos. Pero en ese momento, bajo la influencia de Nick, les dije cosas horribles.

Recuerdo las palabras que salieron de mi boca como si fueran un veneno: "Solo te importan los hombres", "tienes celos de mi relación", "solo me usas para verte con los chicos con los que estás". Me duele recordar cómo lastimé a María, cómo la hice sentir que no era importante para mí.

Después de esa noche, todo cambió. Dejamos de hablarnos, de vernos. Pasaron años sin que supiera de ellas, sin que ellas supieran de mí. Me sentía vacía, sola, sin mis amigas a mi lado.

Pero con el tiempo, me di cuenta del daño que había hecho. Me di cuenta de que Nick me había manipulado, de que me había hecho creer que mis amigas no me querían. Y empecé a buscarlas, a pedirles disculpas, a tratar de arreglar las cosas.

Y aunque pasaron años, finalmente pude volver a verlas, a abrazarlas, a pedirles perdón. Y aunque las heridas no se borran fácilmente, estamos tratando de reconstruir nuestra amistad, de hacer que las cosas vuelvan a ser como antes. O al menos, de hacer que sean mejores de lo que fueron antes.

Así que seguí en la relación, atrapada en un ciclo de abuso y manipulación. No sabía cómo pedir ayuda, no sabía cómo escapar. Pero ahora veo que era una víctima de abuso, que Nick me estaba controlando y manipulando. Y me doy cuenta de que debí haber pedido ayuda, debí haber hablado con alguien. Pero en ese momento, no sabía qué hacer.

Pero ahora veo que mi familia no sabía lo que estaba sucediendo porque yo no les dije nada. Y si les hubiera contado, tal vez podrían haberme ayudado a salir de esa situación tóxica. Pero en ese momento, mi miedo y mi vergüenza me impidieron buscar su ayuda.

Mi hermana intentó advertirme, intentó hacerme ver el daño que Nick me estaba haciendo, pero yo no los escuchaba. Estaba cegada por el amor que sentía por él, y no podía ver la realidad.

Pero un día, algo cambió. Comencé a ver a Nick de otra manera, comencé a ver el daño que me había hecho, y comencé a luchar por mi libertad. Fue un proceso difícil, pero finalmente pude escapar de su control y reconstruir mi vida.

Me alejo también de pilar mi otra mejor amiga la conocía desde los 14 años.

Pilar.

Entiendo, siento que no me prestabas atención, que no me escuchabas, ya ml éramos cercanas como antes. Me doy cuenta de que te sentías sola, que te sentías como si no pudieras confiar en mí.

No te querías acercar a mí porque temías que Nick se enojara contigo, que se pusiera celoso. Me duele saber que te sentías así, que te sentías atrapada en esa situación.

Me daba rabia que yo no podía hacer nada.

Quiero que sepas que te escucho ahora, que te presto atención, que quiero ser parte de tu vida. Que podamos hablar todos los días, que podamos compartir nuestros problemas y nuestras alegrías. Podemos ser cercanas de nuevo, que podamos ser amigas de verdad