Cuando las estrellas forman constelaciones [Serie escrito en las Estrellas #3]

Las estrellas en el cielo se han apagado

El número siete se lo considera el número favorito de Dios, se sabe que, en la biblia, dicho número se llega a citar 737 veces. Es por eso que, en la cultura hebrea, el Menorá, tiene siete brazos, pero no solo en eso podemos ver las referencias de este número, también lo vemos en el apocalipsis, donde hay siete copas, siete sellos, siete trompetas, en la Palabra de Dios nos dan a conocer los 7 Espíritus de Dios. Recordemos también que son siete los pecados capitales y como si eso no fuera suficiente, el siete es la perfección sobre la perfección, o así fue designada por Dios, ya que según la biblia y muchos otros libros religiosos, Dios marcó este número como numero de plenitud. En la numerología—sí, eso realmente existe—el número siete significa protección y seguridad. Mi historia favorita sobre este número, es sin lugar a dudas sobre las pléyades, que en la mitología eran del titán Atlas y la ninfa marina Pleyone, aquellas ninfas eran Mérope, Maya, Celeno, Alcíone, Electra, Estérope, Táigete. Tras ser Atlas obligado a cargar sobre sus hombros con el mundo, Orión persiguió durante siete años a las Pléyades, y Zeus terminó por transformarlas primero en palomas y luego, después de apiadarse de ellas, las convirtió en estrellas y ellas forman aquel hermoso cumulo de estrellas en el cielo conocido con dicho nombre, Pléyades o las siete hermanas, en aquel cumulo solo seis de las estrellas brillan intensamente, algunos dicen que la séptima estrella que no brilla es Electra, en señal de luto tras la caída y el saqueo de Troya. Aquel número tiene un sinfín de significados, en lo religioso, en lo espiritual, en la astrología, pero ¿Qué significado tiene para mí? Para mí, el siete tiene un único significado, pero no por eso es menos importante. Siete son las semanas que faltan para que Simón y Jessica, se divorcien, tan solo siete semanas.

Así que es momento de empezar el conteo regresivo.

Primera semana

Alcíone, es la estrella más brillante que se encuentra en pléyades, y se encuentra situada a una distancia de unos 440 años luz, esta estrella es casi 1000 veces más luminosa que el Sol y alrededor de unas 10 veces más grande. Anoto aquella constelación en mi calendario porque esa es mi manera de empezar este conteo, con las estrellas principales de este cumulo de estrellas.

—Una semana menos, quedan seis. 

El inicio del año trae consigo una nueva lista mental para mí con propósitos para el año que tal vez nunca llegue a cumplir, pero que nos hace bien tener, además ¿Hay alguien que cumpla todos los propósitos que tiene? Porque si existe alguien así, yo lo admiro mucho. Yo, desde que soy pequeña tengo la manía de hacer listas mentales, pero nunca las escribía en papel, siempre las dejaba solo en mi mente. Tenía listas, tras listas mentales de diferentes cosas que quería hacer y tener. Recuerdo que la mayoría de mis listas para los propósitos de fin de año consistían en lo mismo, quería ser feliz, una familia y no estar sola. Todos los años eran los mismos deseos y propósitos, escribirlos los hacia real y si no los llegaba a cumplir, la decepción sería aun más grande y yo en el fondo de mi mente sabía que aquellos deseos de fin de año no eran posibles, así que jamás los escribía. Los dejaba solo en mi mente y así, cuando finalizara el año y no se llegan a cumplir, la decepción sería menor o eso creía yo.

Segunda semana

Electra, es la tercera estrella en orden de brillo, que se encuentra en Pléyades, está situada a una distancia de 440 años de distancia. Y así es como empieza mi segunda semana, marcando en un calendario cuando me despierto y mirando los días que faltan antes de irme a dormir. Porque la segunda semana se me pasa en un extraño borrón, casi no me doy cuenta que ha llegado a su fin, porque estado ocupada con el trabajo y la propuesta que le hice a Nicole sobre mejorar el programa de becas que tienen los laboratorios, a Nicole le encantó mi propuesta, ella al igual que yo, sabe lo difícil que es estudiar cuando no tienes los recursos para hacerlo, aunque ella al final, tuvo a sus abuelos. —a veces olvido que también son mis abuelos. —para financiar su educación, yo no tuve a nadie, fue difícil acceder a una buena beca en los programas de ciencia que ofrecían las universidades. Entonces creo, que si los laboratorios tienen el poder económico de ayudar a futuros científicos ¿Por qué no hacerlo? A Nicole y Gabriel les encantó la idea de marcar la diferencia de esa manera, de ayudar y cambiar la vida de alguien.