¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Has sido llevada al lado oscuro quiero ser tu mano izquierda
Te amo cuando cantas esa canción y tengo un nudo en la garganta
Porque vas a cantar mal las palabras
Hay una película que creo que te gustara
Este chico decide renunciar a su trabajo y dirigirse a la ciudad de Nuevo York
Este vaquero huye de sí mismo
Y ella ha estado viviendo en el estante más alto
....
Solo quiero saber si vas a aquedarte"- Riptide, Vance Joy
Liana despierta debido a un dolor punzante en su cabeza, suspira acurrucándose más contra la cama cuando siente un perfume inconfundible que la hace sentarse rápidamente en la cama, mira alrededor buscando al hombre que pertenece ese perfume, se siente un poco decepcionada de no ver a Bill.
Se maldice, no recuerda la última vez que estuvo ebria, quizás es por eso por lo que tuvo sexo con un completo desconocido, sin duda alguna estaba fuera de control, suspira.
Ve que está en un departamento que no conoce, con grandes ventanales, mira su cuerpo dándose cuenta de que esta vestida así que quizás no tuvo sexo salvaje con un desconocido. Se levanta rápidamente poniéndose sus zapatos y abrigos, tenía que salir de allí. Su cabeza le palpita, pero agradece no tener las nauseas salvajes que siempre tenia luego de beber, solo tenia unas ganas enormes de beber una fuente de agua.
Sale de la habitación en silencio, busca la salida con la mirada y mientras camina por la sala siente la voz inconfundible de Bill.
- Ya despertaste- señala el vestido con un suéter y pantalones oscuros- pensé que dormirías más.
- ¿Qué lugar es este?
- Mi casa- sonrie- me mude hace poco, ¿Por qué no te sientas y comes algo? Pareces perdida
- Pensé que tuve sexo salvaje con un desconocido- suspira.
La chica escucha su risa, Liana lo mira a los ojos dándose cuenta de que esta un poco más delgado.
- Anoche ¿paso algo?
- No... estabas demasiado ebria y no me aprovecharía de tu estado. Dormí en el sofá, por tu culpa me duele el cuello