CAPÍTULO 5

28 3 0
                                    

Bzzzz... bzzzz... mi teléfono vibra, deben de ser las 4 de la mañana.

—¿Hola?— respondo a la llamada dormida.

—Kat, necesito que vengas a por mi— me suplica una voz ebria que me resulta familiar.

—¿Justin?— pregunto incorporándome en la cama.

—Por favor Kat, la grúa se ha llevado mi furgoneta y no tengo como volver—

Suspiro y antes de colgar le pido que me mande su ubicación.

Estamos a finales de febrero y hace un frío increíble. Me pongo unos pantalones de chándal y mi chaqueta junto con mis botas de la moto. Bajo sigilosamente las escaleras, cojo las llaves, el casco y salgo de casa. Pongo el casco de mi hermano debajo del asiento de mi moto y voy a buscarle.

Es increíble que con cuatro años menos tenga que ir a buscarle a sus fiestas de universitarios. Está claro que si papá nos pilla la bronca no solo se la llevará él.

•••

Treinta minutos después aparco en frente de una casa gigante cuyas ventanas están iluminadas por luces de colores de la fiesta. Llamo a Justin y no me lo coge.

Vamos, vamos, cógemelo Justinpienso en mi cabeza.

No puedo creer que me haga entrar en esa fiesta de completos desconocidos a buscarle.

Esta va a ser la primera y única vez que me toca a mi, la próxima que llame a papá o que se quede a dormir en algún lado.

Entro en la casa y hay una cantidad de gente importante. Miro a todos lados y nada. Huele a maría y a cerveza. Decido subirme a las escaleras que dan a los dormitorios para ver mejor. Y al fin le encuentro, en un sofá rojo junto con una rubia tipo Barbie que lo único que hace es sobarle con sus uñas rojas postizas. Me dirijo hasta allí y le miro con desaprobación.

—Justin vámonos— le digo levantándolo con cuidado.

La chica me mira con el ceño fruncido.

—¿Y tú quién eres?— me pregunta borde levantándose.

Tiene una voz chillona horrible, no estoy de humor, me han despertado de mi plácido sueño, son las cinco de la mañana y en un par de horas tengo clase. Como me vuelva a hablar juro que la quito la tontería en dos segundos.

Cojo a mi hermano por debajo del brazo y le saco fuera de la mansión.

—¡Te he preguntado que quién eres niñata!— me grita la chica.

Dejo a mi hermano apoyado en una fuente en el césped. Y le susurro un "ahora vuelvo". Me asiente medio inconsciente y hace una mueca que parece ser una sonrisa.

—Verás bonita, lo primero a mi no me llamas niñata ¿Te queda claro? Y lo segundo como te vuelva a ver manosear a mi hermano con esas uñas de niña rica te las rompo una a una— la digo sacando mi carácter a la luz.

La chica se ofende y se mete en la casa llamando a alguien. En fin, me da bastante igual, yo solo quiero llegar a casa y dormir. No me lo va a impedir una chica por sacarme a saber cuantos años más.

He traído un par de botellas de agua para que se le baje el pedo a Justin y así poder llevármelo en moto. Todavía no tengo el carnet de coche así que me tengo que apañar con mi bebé.

Después de unos cuarenta minutos mi hermano se ha ido a mear a unos arbustos unas tres veces. Me dice que ya está mejor y le subo a la moto, claramente conduzco yo, debería de estar muy mal como para fiarme ahora de mi hermano.

•••

Llegamos a casa a cosa de las seis y media, meto a mi hermano en la cama y me voy yo a la mía, de ahí no me muevo hasta que suena mi despertador treinta minutos después.

————————————————————————
vota y comenta! <3

KATIA   *(Horas De La Eternidad #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora