Destiné à ne jamais mettre fin à cette

Capitulo 2

—Es hora de irnos _______—insistió Ethan por enésima vez.

—Una canción más, por favor—rogué.

—Está bien—accedió.

Seguimos bailando, mas de una canción a mi favor. 

En un momento de la noche Ethan metió su mano al bolsillo de su pantalón, sacando mi celular. 

—Es una llamada—susurro en un grito cerca de mi oído por la alta música que había a nuestro alrededor—creo que es Steffan. Vamos afuera para que puedas contestar.

Tomo mi mano y me arrastro hasta a salida del club nocturno. Afuera de este había una fila inmensa de personas que querían ingresar. Así que caminamos del lado contrario de la fila para estar en un lugar con menos ruido.

Pase mi dedo por la pantalla de mi celular para desbloquearlo y poder tomar la llamada.

—Hola. 

—¿______? ¿Eres tú?—preguntaron del otro lado de la línea

—Estas llamando a mi celular ¿cierto?

—A veces contesta Ethan.

—No creo que no puedas reconocer mi voz—espete—. ¿Qué está pasando?

—Lamento ser yo el que tenga que decirte esto. 

—Steffan habla de una vez—dije intranquila.

— _______ —lo escuche suspirar—han secuestrado a Justin— apreté mis ojos evitando soltar alguna lágrima.

Es ahí cuando mi calmado y pacifico mundo se viene abajo. Esto no estaba pasando, no era verdad. Me sentí decaer, me sentí triste y por primera vez después de mucho tiempo volvía a pensar en Justin y en como estaría. 

Palidecí. Lamí mis labios torpemente. Y comencé a temblar de los nervios. 

— ¿Estás bien ____?—Ethan se acerco a mí, sosteniéndome por la cintura, estaba a punto de caer al suelo— ¿Qué pasa? ¿Está todo bien en casa?

Negué.

Tomo el teléfono de mi mano y lo llevo a su oído.

— ¿Qué le has dicho Steffan? Se ha puesto mal, muy nerviosa—hablo Ethan por la bocina del teléfono. 

Suspiro y me apretó mas a él.

—En una semana…no…no lo sé…me asegurare que así sea, iré con ella si es necesario. Bien nos vemos—corto la llamada y guardo el teléfono en la bolsa de su pantalón—.Vamos a casa, necesitas descasar—ordeno. 

Me arrastro a la entrada del club, donde le entrego el boleto al ballet parking, a los cinco minutos el chico regreso estacionando el Audi enfrente de nosotros. Ethan abrió la puerta para mí y entre, rodeo el auto y luego lo hizo el. 

Iba nervioso, demasiado, se le veía. 

Creo que Ethan estaba mucho más nervioso que yo, y no sabía que es lo que mi hermano le había dicho cuando hablaron cortamente por el teléfono.

Conduzco a una velocidad un poco más rápida que de costumbre, llegamos a casa en un lapso menor de tiempo. Bajo del auto en cuanto apago el motor del auto. 

—Vamos, debes de entrar rápido a casa.

Me empujo rápidamente para que entrara a casa. ¿Qué pasa? Porque el actuaba así de nervioso. Ni siquiera me había dado el tiempo necesario para que yo procesara lo que Steffan me había dicho. 

Justin secuestrado.

¿Cómo mier*da lo secuestraron? ¿Por qué? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Nuevos enemigos?

Sacudí mi cabeza para despejar mi cabeza de todas esas preguntas que me estaban rondando.

—Espera—dije sentándome en el sofá quitándome mis tacones. Suspire— ¿Porque te comportas así de raro?—me miro fijo, como nervioso—. ¿Hay algo que debería de saber?

Suspiro, sentándose en el sofá individual enfrente de mí, colocando sus codos encima de sus rodillas, sus manos entrelazadas quedaban colgando entre el espacio de sus piernas. 

—Yo…yo no estoy tan fuera de tu mundo como tú crees—exhalo por su boca. 

Wow, sorpresa, ¿Cómo que no estaba tan fuera de mi mundo?

— ¡¿Qué?!—Dije sorprendida—Explícame esto, por favor.

—Tú papa me contrato para estar cerca de ti, para cuidarte mientras estabas aquí. El punto era solo estar cerca de ti, pero a…

—Habla 

—A Justin se le ocurrió la idea de que podía ser tu compañero de clase, así te cuidaría más de cerca. Pero todo termino de esto, siendo amigos.

—Mejores amigos —corregí en un susurro recargando por completo mi espalda en el respaldo del sofá.

—Yo no planeaba engañarte ________. —sonaba arrepentido

—Pero de alguna manera, lo hiciste. 

Me quede pensativa, no lo veía como engaño, si no una manera de protegerme, me sorprendió que la idea viniese de Justin después de como me trato antes de salir de su vida. 

— ¿Qué es lo que le dijiste a Steffan en el teléfono?—pregunte después de varios minutos en los que ambos nos quedamos en silencio.

—Que te llevaría a casa después de la graduación. Ellos no quieren que te pierdas esto en tu vida.

—Es mucho tiempo, le pueden hacer daño a…Justin—pase saliva, como dolorosamente. 

—Tu papa arreglara las cosas para que se adelante la graduación.—explico 

Al día siguiente, estaba con Ethan en el aeropuerto esperando el vuelo que me llevaría de vuelta a casa, con mis hermanos. A salvar a Justin.