Apretaba el sobrante de sus mangas rojas algo nervioso.
Su estómago se revolvía a medida que caminaba por los pasillos y se acercaba a la sala de juntas, no tendría forma de perder los nervios porque su distracción -sus hermanos- habían tenido cosas que hacer, incluso tuvieron que avisarle a ONU para poder faltar.No había nadie a su lado, solo a la lejanía, y eran algunos centroamericanos y sudamericanos.
Ladeó sus labios al ver que el peruano y Bolivia estaban algo lejos de él, Jamaica, Cuba y Brasil hablaban entre ellos, Belice estaba sentada a lado de Bolivia, conversando igual con ambos.
Mientras él tendría que estar a un lado de USA, sin nadie a su lado derecho.
Aunque ahora que lo pensaba no era como si le gustara la idea de hablar con alguien teniendo el estomago revuelto y queriendo vomitar, tambien tenía un ligero mareo y cansancio por no haber dormido la noche anterior.
Finalmente llego a su asiento y agradeció que ni Estados Unidos ni Canadá hubiesen llegado aún.
Se sentó y comenzó a revisar sus redes sociales, ni los típicos chistes que aparecían en su inicio lo aliviaban, seguía tomando agua de la botella, algo fresca, no tanto para congelarlo.
Aunque eso quiso cuando escuchó pasos detrás, sabía que la cercanía era de quienes menos quería ver.
-- Hello, Méx! --Canadá le sonrió, mirándolo mientras se sentaba.
-- Eeh, holis, maple --sonrió algo forzado, por fortuna, el canadiense no lo notó.
Claro, por mirar a Estados Unidos y hablarle un poco.
Pudo ver también como USA parecía haber mejorado, estaba hablando con su pareja, y eso ya era bastante en comparación a que siempre estuviera quieto sin decir nada.
Sí, ahora está bien, pero ahora es México quien se siente realmente mal.
Pestañeó varias veces y volvió a su teléfono, sería duro pero intentaría no hablarles, más por las ganas de vomitar que le regresaban en cuanto siquiera pensaba en él.Por momentos sintió que sudaba frío, aunque luego solo fueran gotas imaginarias que se burlaban de él, de su nerviosismo, de toda su situación.
Tal vez hacerlo parte de mi vida y quererlo tanto fue mi error, algo que debo y voy a arreglar.
Pensaba en un intento de reprimir todo.
Pero sabía que simplemente reprimirlo le haría pensar más, por lo que en su lugar utilizó toda la reunión para pensar en eso, y precisamente eso lo tranquilizaba más que tratar de ignorar el tema.
Pensar qué decir, cómo actuar, aún sabiendo que estaría bastante nervioso, tal vez lloraría, solo se jura que no se romperá frente a él, menos sabiendo que tal vez con él esté Estados Unidos.
Volvió a estremecerse en cuento escuchó que la reunión había terminado, no sentía que el momento fuera real, parecía ser que solo era un sueño.
Pero fuese real o no, haría lo que planeó, lo que no le dejó dormir, sufrir no habrá sido en vano.
Se mordió la mejilla interior, no sabía si era buena idea, incluso un vaivén le aclamaba que mejor dejara las cosas así, que mejor se fuera.
Por fortuna, pudo ver como ambos caminaban hacia Francia y UK, y estos hablaban con USA algo animados.
USA solo hablaba por pequeños momentos, pero al menos interactuaba con ellos.Tomó aire, agarró su maletín y comenzó a caminar para acercarse a los cuatro, que aun no lo notaban.
Fue cuando llegó que Canadá detuvo su hablar, el resto de los tres seguían conversando entre ellos.
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La Carta Que Lo Destrozó Todo
Hayran KurguSegunda parte de "La Carta Que Lo Cambió Todo." Hermosa portada hecha por @Elizagamer318 ^^