El cantar de las aves comenzó junto con un nuevo día, Sans abrazaba cariñosamente a su almohada. El ambiente era tranquilo, solo se escuchaba el cantar de las aves.... Hasta que de pronto...
-¡¡Sans, despierta ya!!- Gaster entró gritando a la habitación del menor provocando que este se despertara asustado y lanzando su almohada. -El desayuno está listo, no tardes o te dejaré-
Sans no entendía nada, miró su celular "5:30 A.M", frotó sus ojos y se estiró. Sin pensarlo dos veces fue directo a la ducha para tomar un baño. Minutos después volvió a su habitación para vestirse.
No quería ir a trabajar, había dormido muy poco, pero no tenía opción. Al terminar de vestirse, bajó para desayunar. En su mente solo vagaba la idea de volver a dormir y a causa de eso, Sans bostezaba continuamente. Al llegar al comedor, se encontró con Gaster quien ya estaba bebiendo su café mientras comía sus Hot cakes mañaneros. El desayuno fue preparado por su padre, así que era de esperar que Sans también comería hot cakes al igual que él.
-No te quedes ahí parado y comienza a desayunar.- Dijo Gaster antes de meter un bocado a su boca. Sans solo asintió.
En silencio, tomaron su desayuno, el único sonido que se escuchaba era el de los cubiertos al chocar con los platos.
-¿Por qué no llevas puestos tus lentes?- preguntó Gaster.
-No me gusta llevarlos puestos todo el rato- contestó el menor.
-Tu miopía no ha mejorado y lo sabes, por lo tanto debes usarlos siempre. Ponte tus lentes- Dijo El mayor con voz autoritaria.
Sans sabía que su padre tenía razón, pero no le agradaba usar sus lentes, él creía que lo hacia ver como un nerd, y ¿Cómo no? Sans era un flojo pero era un genio, poseía un gran conocimiento sobre astronomía, por un tiempo fue ayudante de laboratorio, fue ayudante de su propio padre, un científico reconocido. Si todo eso no era material suficiente para que Sans fuera llamado nerd, entonces el so de sus lentes lo era.
-No lo repetiré de nuevo, Sans-
Y sin rechistar, Sans sacó de su bolsillo sus lentes y se los colocó. Realmente no entendía por qué de pronto Gaster se comportaba así, no era raro en él, pero eran muy escazas esas veces que sucedía. Continuaron comiendo, Sans fue quien terminó de desayunar primero, y como de costumbre, levantó su plato y lo llevo al lavaplatos.
-Lávalo- Dijo Gaster sin voltear a verlo.
-...¿Eh?- Fue lo único que salió de Sans.
-He dicho que lo laves, Papyrus no está aquí para limpiar tus desastres- Terminó su café y lo llevó con Sans -También lava esto, te esperaré en el auto, tienes 10 minutos. Si tardas más, te dejaré y no permitiré tu entrada en la institución.- Sin más que decir, Gaster se retiró de ahí.
Sans no dijo nada, no entendía nada, y solo comenzó a lavar los trastes. No le llevó mucho tiempo, así que al terminar de acomodarlos , tomó sus cosas y salió de su casa. Y ahí estaba, Gaster con su semblante serio, esperando al amante de la ketchup. Cerró la puerta detrás de él y se dirigió al auto y subió a el. Sin decir palabra alguna, Gaster encendió el auto y comenzó su trayecto hacia la universidad.
El silencio comenzaba a incomodar, Sans prefirió mirar hacia afuera por su ventana, mientras tanto Gaster se dedicaba a conducir.
-¿Cuál es tu plan de hoy?- Preguntó Gaster rompiendo el silencio.
-¿Mi plan?- Sans no comprendía. --¿Qué esta pasando?-- pensó.
-Si ¿Qué harás hoy?- Dijo el mayor manteniendo su típico semblante. El menor miró al frente y comenzó a pensar en qué haría durante el día.
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Mi profesor
Random___ una chica universitaria la cual conoce aun hombre que le hace la vida imposible, le complica las clases y hace cualquier cosas para fastidiarla. ¿De quién se tratará? y ¿En qué problemas se metieran ellos dos?