El sonido del televisor era el único que se escuchaba en la sala de estar, Gaster y Sans permanecían en silencio, recordando la época del underground.
Durante esa poca, Gaster tuvo que dejar a sus dos queridos hijos solos, mientras estaba en proceso la investigación de como romper la barrera y lograr salir de ese horrible lugar. En aquel tiempo, Sans solo tenia 15 años de edad y era el único que cuidaba de su hermano menor y de si mismo, cuando Sans había cumplido los 18 fue cuando lograron romper la barrera y salir gracias a un pequeño niño con una gran determinación. De ese suceso han pasado 7 años, pero a pesar de eso, al amante de la ketchup nunca se le olvidará aquel abandono.
-Welp, es lindo recordar viejos tiempos. Me agradó bastante este tiempo que compartimos como padre e hijo- Sin decir más, Sans se levantó.
-Sans, se que aun estás molesto por eso... Pero sabes que lo hice por el bien de todos... Por el bien de ustedes... -Gaster también se puso de pie.
-Han pasado 10 años de aquel abandono. Y... Sinceramente, creo que Papyrus y yo estábamos mejor sin ti- Sans no volteó a ver a su padre.
Aquellas palabras realmente hirieron a Gaster.
-Voy a salir, no salgas ni hagas más estupideces- Gaster no dijo más y salió.
En aquella enorme casa reinaba el silencio, ni siquiera el "tic tac" del reloj se escuchaba, Sans se encontraba tumbado sobre su colchón, su mirada estaba fija en el techo. Los recuerdos de aquella época invadían su mente. Imágenes de aquellas líneas alternas, sintió un escalofrió y un gran enojo al recordar esa cruel y desgarradora escena... Aquel momento en el que su hermano fue asesinado.
Se sentó velozmente, su ojo izquierdo brillaba con intensidad, suspiro pesadamente e intento calmarse.
-Eso no volverá a pasar... Ya no- dijo para si mismo.
Un sonido logró sacarlo de sus recuerdos, había recibido un mensaje de texto a su celular. Dudoso lo tomó, sonrió al leer el mensaje.
"Hey ¿Cómo estás?"
Su sonrisa permanecía, sus dedos tecleaban en su celular.
"Heya, bruh. Me encuentro bien, un poco nostálgico, pero bien"
Leyó su propio mensaje y lo envió.
-Grillby es un buen amigo...- Se estiró y volvió a acostarse. En cuestión de segundos, Sans cayó dormido.
El tiempo había pasado, Sans abrió los ojos, la oscuridad lo rodeaba, un delicioso aroma atrajo su atención, miró hacia su costado y se encontró con una hamburguesa con papas y una botella de Ketchup. Tomó la hamburguesa y le dio un mordisco.
-Heh, es de Grillby's- Dijo para sí mismo y siguió comiendo.
Al finalizar con su alimento, procedió a beber la botella de ketchup y se levantó de su colchón, sabía que Papyrus no había traído todo eso, ya que él no se encontraba en casa. Hizo una mueca de disgusto ya que tenia que agradecer a Gaster por la comida. En silencio salió de su habitación, se dispuso a buscar a su padre.
Buscó desde la sala de estar y la cocina, hasta el primer piso de la casa, buscó en la biblioteca y en el salón de reuniones. A pesar de que ya habían pasado años desde que se mudaron a esa casa, Sans no lograba acostumbrarse a su enorme tamaño. A veces no entendía el por qué vivian en esa enorme casa si solo era ellos tres, esa pequeña mansión estaría perfecta para una familia numerosa, o al menos, eso era lo que Sans pensaba.
-Que cansancio...- Dijo antes de subir las escaleras hacia el segundo piso.
Su búsqueda continuó, de habitación en habitación. Al llegar a las siguientes escaleras hacia el tercer piso, Sans dudó en continuar.
--¿En serio es necesario agradecer ahora? Podría hacer lo mañana por la mañana-- Pensó y sacó su celular para ver la hora, "2:24 A.M." --Debe estar dormido...-
Sin más que pensar ni decir, Sans comenzó a caminar con dirección a su habitación, el silencio estaba presento, pero al pasar frente una de las habitaciones, un ruido llamó su atención, observó por un momento la puerta de aquella habitación, esperando a que alguien saliera o solo abriera la puerta, pero solo se escuchaban susurros. Con delicadeza y en silencio, Sans acercó su rostro para escuchar.
-No... Ya dije que no- Se escuchó al otro lado de la habitación.
-¿Dadster?- Preguntó en susurro el de sudadera azul.
No se escuchó más la voz de Gaster, el silencio era ensordecedor, de pronto se escucharon unos pasos, Sans se apartó de la puerta y entró en pánico, los nervios eran tantos que sin querer invocó un Gaster-blaster. De pronto la puerta fue abierta dejando ver a Gaster.
-¿San? Creí que estabas dormido... ¿Qué hace un Gaster-blaster aquí?- Gaster miró a su hijo y dirigió su mirada al Gaster-blaster que se encontraba flotando ahí.
-Solo... Ya desperté, heh heh, quería agradecerte por la comida... y el blaster... Estábamos jugando... un poco...- Contestó el de menor tamaño.
Gaster lo observaba con atención, se acercó al blaster y lo acarició.
-No agradezcas, es mi deber como padre. Y ya es muy tarde para que estés jugando- Sonrió al blaster- Vaya, que bien luces... Ya puedes regresarlo, Sans.
-¿Eh? Ah, si...- Y con un chasquido el Gaster-blaster desapareció.
-Ya iré a dormir, al parecer Papy no llegará esta noche. También ve a dormir, Sans- Y dicho eso, Gaster se dirigió a las escaleras que daban hacia el tercer piso.
Sans se quedó solo en el pasillo, pensando sobre lo que había escuchado. Dio un ultimo vistazo a la habitación y se fue.
___ aun pensaba sobre aquella desaparición de Sans frente a ella, su mente trataba de encontrar una respuesta lógica, pero no la encontraba y gracias a ello, la joven enfrentaba un insomnio. "No creo que sea necesario seguir manteniéndolo en secreto" esa frase daba vueltas en su mente, seguido de el resplandor azul.
-No entiendo nada... Creo que debo dejar eso a un lado y pensar en la supuesta "Trampa" hacia Sans... No creo que alguien lo hiciera realmente, quizá solo quiere evadir la estupidez que hizo y seguir cogiendo conmigo... Claro, no me quejo, lo hace bien, pero eso no le quita lo idiota e infantil que es.- Suspiró y abrazó su almohada.
>> Debo admitir que Gaster no se le iguala, debe ser por los años de experiencia que tiene... Que suerte tiene su esposa... Un momento ¿Eso quiere decir que le ha sido infiel?¿Conmigo?-
___ Se sentía avergonzada por aquel pensamiento.
-Espera... Él no lleva ningún anillo de matrimonio, así que no debe estar casado- Se calmó un poco. -Pero... ¿Si es de esos hombres que ocultan su anillo junto con su matrimonio?
Y de nuevo ese sentimiento de culpa la inundó. La noche entera estuvo torturándose con esos pensamientos. Fue una noche muy larga para ___.
ESTÁS LEYENDO
Mi profesor
Random___ una chica universitaria la cual conoce aun hombre que le hace la vida imposible, le complica las clases y hace cualquier cosas para fastidiarla. ¿De quién se tratará? y ¿En qué problemas se metieran ellos dos?