MI EGOCÉNTRICO FAVORITO

CAPÍTULO 10

Era tarde cuando llegamos a un gran portón, Carson lo abrió por medio de un control, entramos, había un jardín gigante y hermoso, la casa estaba más dentro, era preciosa, Carson estacionó la camioneta en frente de la casa, se bajó, abrió mi puerta, me bajé y ayudé a los niños a bajar de la camioneta, después bajamos todas nuestras cosas, Carson abrió la puerta de la casa, metimos todas nuestras cosas a la casa, las dejamos en la entrada, la casa era de dos pisos, los niños corrieron estando adentro para ver la casa, Carson nos dio el recorrido de la casa, como el había dicho era grande, era preciosa, los muebles eran lindos, la cocina, la sala, los baños, las habitaciones, todo era precioso.

–¿Qué les parece la casa?

–¡Está preciosa Carson!

–¡Sí papi! – dijeron los niños al unisono.

–Me alegra que les guste, niños ¿quieren escoger su habitación?

–¡Claro papi! – dijo Jess.

–¡Sí papi! – dijo Jason.

Salieron corriendo hacia el piso de arriba, fuimos detrás de ellos, cada uno escogió su habitación, las habitaciones estarían juntas.

–¡Está es la mía!

–¡Esta es la mía!

–Muy bien, entonces hay que acomodar nuestras cosas.

–¡Sí mami! – dijeron los niños al mismo tiempo.

Cargamos nuestras cosas a las habitaciones, Carson y yo fuimos a nuestra habitación, era preciosa, tenía su baño privado y una habitación como armario, en el armario ya estaba acomodada la ropa de Carson, comencé a acomodar la mía, Carson había salido para meter la camioneta a la cochera, después de un poco más de una hora había terminado, salí de la habitación, fui a la habitación de Jason, cuando entré no estaba, después fui a la de Jess, ella estaba acomodando sus cosas, toqué la puerta.

–¿Puedo pasar cariño?

–¡Claro que si mami! – entré a la habitación, me acerqué a Jess y le di un beso.

–¿Has visto a Jason?

–Si, fue con mi papi a la sala, dijo que acomodó sus cosas, pero no creo.

–Lo mismo pienso, ¿quieres que te ayude?

–Si tu quieres.

–¡Claro que sí!

–¡Gracias mami!

–No hay de que.

Le ayudé a terminar de acomodar toda su ropa, cuando ya habíamos terminado bajamos a la sala, Carson y Jason estaban sentados en el sillón.

–Jason.

–¿Si mami?

–Acomodaste tus cosas.

–Es que quería ver la televisión con papi.

–Es que nada, vaya a acomodar sus cosas.

–Pero…

–Pero nada.

–Papi, dile a mami que lo puedo hacer más tarde.

Volteé a ver a Carson y le levanté una ceja, en ese momento el levantó las manos como forma de rendirse.

–Jason debes hacer lo que mamá te está diciendo, porque si se enoja no creo que nos vaya bien ni a ti, ni a Jess ni a mí.

–Jason. – dije con los brazos cruzados .