first love [yoonmin]

18

"Joder... Con lo que habíais avanzado..." Hoseok negó con la cabeza, y Jimin reprimió un sollozo.

"Hoseok, no estás ayudando." masculló Taehyung, viendo los ojos tristes de su amigo.

"Joder, ya no se puede ni hablar..." murmuró el castaño con indignación. El peliazul le dedicó una mirada asesina ¿Es que acaso no tenía tacto ninguno?

"A ver, Minnie ¿Entonces no tienes ni idea de por qué Yoongi se puso así?" preguntó el peliazul, observándolo fijamente. Era imposible que su amigo fuese tan inocente.

"No..." murmuró, con sus ojos de cachorrito.

Taehyung suspiró. Tener como casi novio a Jeon Jungkook tenía algunas ventajas "¿Entonces no sabes por qué Taemin y Yoongi se odian?" cuestionó, viendo al rubio negar de nuevo. El peliazul suspiró de nuevo, empezando a perder la paciencia "Yoongi tenía una novia, Soljin. Fue un poco antes de que tú llegases al instituto según me contó Jungkook. Min la quería muchísimo. Durante meses la chica lo estuvo engañando con Taemin. Yoongi los pilló en la cama en su aniversario." relató, viendo a Park abrir mucho los ojos ¿Quién en su sano juicio le harías eso a Yoongi?

"Eso es horrible..." murmuró, buscando los ojos del pelimenta en la cafetería. Min no le devolvió la mirada "¿Pero qué tiene que ver eso conmigo?" preguntó sin entender a dónde quería llegar Taehyung.

"Pues que tiene miedo. Tiene miedo de que te vayas con Taemin como hizo Soljin. Estuvo ciego durante mucho tiempo mientras ellos estaban juntos y seguramente ahora piensa que te gusta Lee y estás jugando con él." explicó, viendo a Hoseok asentir respaldándolo.

"Pero... Él y yo no somos nada..." murmuró, visiblemente triste ante la respuesta.

"Pero le gustas." replicó Hoseok, y Jimin se sonrojó.

"Claro que no." jugó con sus dedos con la mirada triste.

"Sigue negándolo y lo único que vas a conseguir es alejarlo definitivamente." le dijo el castaño, y Jimin se mordió el labio.

Hoseok tenía razón. Lo único que estaba haciendo era alejar a Yoongi de él. Sus inseguridades estaban construyendo un muro entre ellos. Y si Yoongi no lo quería, si hacía el ridículo delante de él, le importaba una mierda. Ya no tenía nada que perder.

Jimin pasó el  resto de horas hasta el momento del ensayo pensando en qué le diría a Yoongi. Por un momento se le pasó por la cabeza que el pelimenta ni siquiera pareciese en la sala, pero en el fondo sabía que Min no era así. Cuando Min Yoongi hacía una promesa cumplía hasta el final.

Las manos le temblaron al momento en que abrió la puerta de la estancia. Yoongi estaba allí, sentado al piano mientras revisaba algunas partituras. Parecía concentrado, y Park se permitió observarlo durante un segundo más antes de romper el silencio.

"Hola, hyung." murmuró, con una pequeña sonrisa.

"Hola." Min ni siquiera lo miró al momento de responder, dejando un pequeño vacío en su estómago con el gesto.

Durante todo el ensayo Min se dedicó a responder con monosílabos, apenas mirándolo mientras bailaba. Dolía, dolía como el puto infierno apartarle la mirada, pero más le dolía verlo. Porque cada vez que lo miraba veía a Soljin. La veía mirándole con sus ojos tiernos, llenos de un amor que no era para él.

Después de haber estado ensayando durante una hora Jimin se sentó en el banco de madera, dándole un trago a su botella de agua. Aquella era la señal, el ensayo había acabado. Yoongi se dispuso a recoger sus cosas, y Jimin se apuró a detenerlo.

"Espera. Quédate cinco minutos." pidió con su voz dulce, y Yoongi tragó saliva, guardando algunos papeles.

"Tengo que irme." murmuró, queriendo salir corriendo hasta la puerta, pero Jimin lo detuvo, agarrándole del brazo e impidiéndole moverse.

"Yoon, por favor." murmuró, y el pelimenta se quedó estático, todavía sin mirarlo "Solo cinco minutos. Podrás irte después, lo prometo." insistió, con sus ojos brillantes.

Yoongi asintió, porque era débil. Y porque si cuando acabasen los ensayos no iba a volver a cruzar palabra con el rubio al menos quería verlo de cerca una última vez.

"Escúchame. No sé qué está pasando por tu cabeza, pero yo tengo absolutamente nada con Taemin. Cuando él estaba en el instituto lo admiraba muchísimo, me uní al club de baile por él. Pero jamás, jamás lo he visto ni lo veré como algo más que un modelo a seguir. No soy Soljin, hyung. No voy a irme absolutamente ningún lado. Voy a estar aquí." murmuró, dándole una de sus pequeñas sonrisas. Min se tensó ante el nombramiento de la chica, apretando la mandíbula "Tae me lo contó." aclaró el rubio, rascándose la nuca con nerviosismo "No quiero nada con Taemin, porque quien me gusta eres tú." susurró, y Min no habría sido capaz de escucharlo de no ser por la cercanía que sus cuerpos mantenían.

Min tragó saliva "Repite eso." pidió, y Jimin bajó la mirada con vergüenza "Repítelo, Park." exigió de nuevo, y el menor levantó la cabeza.

"Me gustas, hyung." aseguró, mirándolo a los ojos "Me has gustado incluso desde antes de todo esto, cuando no sabías ni que existía." susurró, con una pequeña sonrisa.

Min permaneció en silencio, mirando sus ojos como si se tratasen de dos estrellas. Park comenzó a angustiarse ¿Y si la había cagado?

Pero entonces Min lo acercó más a él, pegando sus frentes juntas "Yo siempre he sabido que existías, Minnie. Llamaste mi atención desde la primera vez que te vi sobre el escenario. Cuando te veía por los pasillos solo quería lanzarme a morderte las mejillas por lo adorable que eras. Cuando la Señora Lee me dijo que necesitaba que tocase el piano para uno de los chicos del club  estuve apunto de negarme, y entonces dijo tu nombre y estuve dispuesto  hasta a suplicarle de rodillas para hacerlo." suspiró, con una pequeña risa mientras su manos hacían círculos en las caderas contrarias. "Jodida mierda, me estoy muriendo por besarte."

"Hazlo." susurró el rubio, empuñando la camiseta del pelimenta. El contrario sonrió, pero obedeció, pegando sus labios con los del más bajo con seguridad.

Y wow, la realidad superaba a la ficción. Besar a Yoongi era mil veces mejor de lo que había imaginado. Sus labios eran suaves y dulces, sus manos lo acariciaban con delicadeza, como si fuese a romperse de un momento a otro, y su flequillo menta le rozaba la frente, haciéndole cosquillas.

"Gracias por conseguirme el mejor beso de mi vida, Taemin." pensó, justo antes de que Yoongi se separase sonriendo.