♠ Sweet Dreams ♠ [Corazón de melón] (Yaoi)

Capítulo 5

Adhara recogió todos los papeles ella misma e hizo algo muy grande.

Los altavoces sonaron.

“¡Muy buenas alumnos! Aquí Adhara. Supongo que todos sabréis quién soy. Vengo a hablaros de algo que ha sucedido esta mañana. Hoy, como todos sabréis, se han colgado un montón de carteles contando mentiras sobre alguien de este instituto.

Por el momento quedáis todos avisados de que a la mínima que escuche a alguien hablar sobre este altercado no saldrá muy bien parado. Y ahora hablo directamente a las personas que se han atrevido a hacer semejante cosa. No me cansaré hasta dar con vosotros, porque habéis cometido el error de dejar más que claro que sois más de uno, y por supuesto, ya que os habéis molestado en hacerle la vida imposible a mi amigo, voy a dejar claro que a mí no me importará haceros la pasar muy mal.

Gracias por escucharme y quedáis avisados.

Por cierto, antes de que se me olvide, señora directora, recomiendo que no deje la llave maestra fuera de su vista. Cualquiera podría hacer copias.”

Dicho eso se apagaron los megáfonos.

Aunque nadie dijo nada, todos se me quedaron mirando. Estaba seguro de que algunos no seguirían las indicaciones, más bien amenazas, de Adhara.

Pasaron 2 meses, sí. 2 MESES, durante todo ese tiempo estuve sufriendo. Kentin no había vuelto y uno de los premios de Armin era ir a Japón, así que no le dije nada de lo ocurrido, estaba muy contento.

Adhara fue expulsada tres días por lo del megáfono, 3 días que fueron una completa tortura para mí.  Y sumando, fue expulsada en total 2 semanas, por cada vez que había hecho daño a alguien que me trataba mal. Yo fui expulsado solo 2 días, me había vengado de unos tíos, que me insultaban porque me gustaban los chicos, encerrándolos en los vestuarios por unas cuantas horas.

Kentin me llamó durante las primeras semanas para hablar conmigo, y no dejó de hacerlo, una por día. Pero al segundo mes no respondía sus llamadas, no podía soportar el escuchar su voz.

Durante algunas tardes no volvía a casa, me quedaba hasta tarde en el instituto para que los alumnos no me siguieran ni me hicieran nada malo. Casi siempre me quedaba con Nathaniel.

Adhara siempre me esperaba, no le importaba todo lo que tardase, ella me esperaba. A veces con algunos amigos, como Allison, Louis, Eloise, Gwendolyn o Kenneth. Normalmente intentaban subirme el ánimo hablándome de otras cosas, pero nunca funcionaba.

Una tarde ella no me llevó hasta mi casa, nos fuimos a la suya, porque sus padres no estaban así que pensábamos ver una película juntos.

Ella abrió la puerta y los dos pasamos dentro, salió corriendo para el salón y agarró el teléfono fijo que se había puesto a sonar.

-¿Hola?- Hizo una pausa.- ¡Sí! Está aquí. Deja, que te lo paso.

Me tendió el teléfono.

-¿Quién és?- le pregunté. Pero ella solo me sonrió.

 Me acerqué el teléfono a la oreja, curioso.

-¿Hola?

-¡Hola!

Era él. Kentin. ¿Hacía cuanto que no escuchaba su voz? Pero no había llegado a olvidar lo dulce que era.

-Alexy. No sabes cuánto os extraño a todos. Tengo tantas ganas de volver.

Se me agolparon las lágrimas en los ojos, dejándolos rojos y haciendo mi visión borrosa.

-Yo…Nosotros también te extrañamos. ¿Cuándo vas a volver?