- Por la reputa madre, Derek.
- Vamos, bebé. Tu puedes, no es tanto.
- ¿¡Que no es t-tanto!? Tiene que ser una broma. O-Oh joder, m-me voy a morir.
- Pero cariño, si ya hemos hecho esto antes...
- ¡Arg!¡Te romperé la maldita cara cuando terminemos con esta mierda!
Solté una carcajada ante el rostro rojo y fatigado de Stiles mientras sostenía la pesa sobre sus hombros, el sudor cubriendo maravillosamente los músculos que ahora tenía luego de semanas entrenando conmigo.
- Dame tres más y dejaremos las pesas, ¿Te parece?- murmuré entre risas, mis manos debajo de las pesas por si Stiles perdía la fuerza en cualquier momento- Seguiremos con un poco de cardio y estaremos listos por hoy.
Stiles gruño, pero termino asintiendo, flexionando sus brazos con algo de dificultad para terminar la serie.
Sonreí orgulloso cuando termino, tome la pesa por él dejándola fácilmente a un lado de nosotros en el piso, levantándome luego y observando fijamente el cuerpo transpirado de Stiles mientras se estiraba.
Mordí mi labio inferior.
Lucía condenadamente caliente.
- Lo hiciste perfecto, precioso- ronronee contra su cuello luego de tomarlo por la cintura, pegando su cuerpo contra el mío en un brusco movimiento- Y te ves muy bien sudando así, pero sería genial que la razón fuese distinta, si sabes a lo que me refiero.
Stiles rodo los ojos y negó con diversión.
- Iré a hacer cardio.
Forme un puchero falso y lo observe caminar con aires de grandeza y un ligero contoneo de caderas hacia las maquinas de trotar.
Bufé cuando ni siquiera me dio una segunda mirada, por lo que me apoye un momento en la pared mientras lo veía colocarse los audífonos.
Habían pasado cuatro meses o más desde la última vez que habíamos tenido sexo o algún toqueteo más íntimo, al principio por obvias razones, debido a la situación, pero ahora no estaba muy seguro qué nos impedía hacerlo ya que todo estaba bien, habían pasado semanas desde su última recaída, o que haya estado con el ánimo bajo, las sesiones con Morrell disminuyeron a una cada dos semanas por lo feliz que se encontraba mi castaño, y las sesiones en el centro ya habían acabado. Obviamente no quería presionarlo a hacerlo si no quería, pero quería saber por qué.
- Pareces un idiota mirándolo así, Derek.
- Déjame en paz, es mío.
- Es una persona, no un objeto para que te apropies de él.
- Es malditamente mío y punto. Vete a molestar a otro lado, Lahey,
Isaac me golpeo el hombro, sorprendiéndome y así logrando que perdiera el equilibrio y me tambaleara hacia un lado.
- ¡¿Qué te pasa?!
- Estas comportándome como un niño, Derek, tenía que hacer algo al respecto- dijo con simpleza, secando su rostro sudado con una toalla que tenía en mano.
Fruncí el ceño y me acaricié el hombro.
- Vaya, ya quiero ver como trataras a los pequeños infantes que tendrás que cuidar cuando empieces a trabajar.
- ¿Al final irán en la noche a celebrar con nosotros?- pregunto mientras saltaba al fierro sobre nosotros y empezaba a hacer flexionar sus brazos, ignorando completamente lo que le dije. Reí y asentí.
- Sí, Scott merece todo nuestro apoyo. Te llamaré cuando estemos llegando al restaurante, ¿Bueno?
Scott había terminado su carrera de periodismo hace un par de días, y obtuvo inmediatamente un importante trabajo en el periódico donde tendría una sección solo para él debido a los logros que tuvo en la universidad, así que en la noche iríamos a comer y beber algo para felicitarlo como corresponde.
Me despedí de Isaac luego de conversar un poco más y me acerqué lentamente a mi chico, quien mantenía una expresión concentrada mientras tarareaba en voz baja.
Stiles me miro de reojo y frunció el ceño a los segundos, por lo que finalmente paro la máquina y se quitó los audífonos.
- ¿Todo bien, Sourwolf?- susurró con cautela, colando su mano sobre mi mejilla. Sonreí suavemente y asentí, amando su tacto sobre mí- Te ves... no lo sé, ¿Sucede algo? Recuerda que puedes decirme cualquier cosa, no secretos- me regaño.
Ladee la cabeza y lo ayude a bajarse de la caminadora, pensando un momento antes de decirle lo que me tenía tan intrigado.
- ¿Por qué no nos hemos acostado en todo este tiempo, bebé?
- ¿Ah?
- Quiero saber porqué no hemos tenido sexo, Stiles. Esta perfectamente bien si no quieres, pero me gustaría saber por qué no lo deseas.
Stiles me miro estupefacto, sus pestañas resaltando lo grande que tenía sus ojos fijos en mí mientras que su boca se habría repetidas veces sin emitir sonido alguno.
- N-No... ¿Qué? Creí que tú no querías... es decir, por ejemplo, cuando salgo de la regadera desnudo, tu me ayudas a vestirme.... No lo sé.
Ay dios.
Me pateé mentalmente.
Tosí.
- Solo intentaba respetarse por todo lo que ha pasado... quería que tu dieras el primer paso- respondí con la garganta seca, sintiendo el corazón a mil.
- Yo estaba esperando que tú lo hicieras.
- Oh.
- Sí...
Nos miramos fijamente unos segundos en silencio hasta que Stiles salto a mis brazos y enredo sus piernas a mis caderas, besando salvajemente mi boca y tirar mi pelo entre sus dedos mientras que yo le respondía de la misma forma, mordiendo y chupando sus labios con desesperación y excitación al tiempo que lo forzaba rudamente contra el espejo más cercano, moviendo ansiosamente mis manos por todo su cuerpo y presionando sus pezones, glúteos y entrada.
- Nos iremos jodidamente ahora a la casa y te follaré todo el día, caramelo- gruñí ásperamente mientras miraba sus ojos dilatados.
- ¡Derek! Oh d-dios, por favor no pares ahora...- gimió hermosamente mientras se arqueaba en mis brazos, restregándose desvergonzadamente contra mi pene ya erecto sin siquiera importarle que aún estuviéramos en público- Al baño, vamos al maldito baño.
Sonreí maliciosamente y lo cargué a los vestidores, ignorando por completo la mirada de todos en el gimnasio.
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Tú Puedes, Amor [STEREK]
Novela JuvenilDerek esta profundamente enamorado de su novio. Stiles esta teniendo síntomas extraños, pero no quiere hacer nada al respecto. Derek Hale: 23 años. Stiles Stilinski: 21 años.