Desde que somos muy pequeños, tenemos sueños por cumplir, ya sea que crezcamos más rápido, de querer un juguete muy deseado o de ser como alguien más, cuando crecemos nuestros sueños se incrementan mucho más, ya soñamos otras cosas, como tener un tr...
Me desperté muy temprano esta mañana, fui directo en busca de mi desayuno y luego trote un poco por las calles de la bella ciudad de New York. Generalmente cuando salgo a trotar, escucho las noticias, pero esta semana es imposible, la ciudad está revolucionada con un nuevo grupo musical que viene por primera vez a USA, entonces, prefiero escuchar música. Pensaba trotar dos horas, pero mi madre me necesita en casa muy temprano, así que voy de camino a casa con mi café en mano, el cual compre en la cafetería que queda de camino.
Ingreso a la calidez de mi hogar, cuando escucho la voz ruidosa de mi madre. Olviden lo de calidez.
¿Quien demonios es el encargado de la seguridad de los chicos?, que irresponsable - dice mi madre enojada por el telefono - nosotros nos encargaremos una vez estén en el aeropuerto.
Me dirijo a mi habitación y me doy una ducha rápida, para luego bajar y encontrarme con mi madre.
Estas un poco estresada, toma un respiro - dije mientras servía un poco de jugo de naranja.
Qué más quisiera, pero esto es un poco importante ¿Acaso no escuchaste las noticias estos días? - me pregunta como algo obvio.
Aunque no las escuche por voluntad propia, igual las escucho en la calle, no hablan de mas nada que de eso - dije demostrando un poco de indiferencia al tema.
Lo se, es tanta presión - dice mi madre tirándose de espaldas al sofá - debes tener cuidado cuando salgas de casa.
Mi madre es un poco perfeccionista con todo lo referente a su trabajo, por eso es muy buena en lo que hace y eso le genera estrés constante.
Señora, la señorita Andrea se encuentra en la puerta - dice la ama de llaves.
Muchas gracias Marta - dije colocandome de pies.
Me dirijo a la puerta y la abro con toda la tranquilidad del mundo.
¿Está tu madre ? - dice Andrea ingresando a mi casa con la energía más grande.
Buenos dias para ti también - dije cerrando la puerta.
Andrea es mi mejor amiga desde muy pequeña, a diferencia de mi, es fanática del trabajo de mi mama, y tambien es la culpable de que vaya a todos esos conciertos pocos de mi gusto.
Después de dos horas me encontraba en un restaurante cerca de casa almorzando.
No puedo creer que tu madre no me quiso llevar - dice Andrea jugando con las pastas en su plato.
Es su trabajo, si te llevara estaria incomodando a los artistas - dije mientras miraba por la ventana - ya te regaló unas entradas, no te quejes.
Es cierto, esas entradas no eran muy fáciles de conseguir - dice ella viendome - hablando de eso, no podemos llegar tarde, te quiero a las 7:00 pm fuera de tu casa esperando me.
Si, me lo dijiste toda la semana - dije mientras tomaba de mi jugo.
La ciudad estaba bastante sola, resulta que hoy llegaban el grupo musical del que tanto hablan, es decir que, una gran parte de la ciudad está en el aeropuerto recibiendolos y la otra parte están en el hotel donde se alojarán.
Esto es tan cruel - dije viendo la pantalla de mi celular.
¿Que cosa? - pregunta Andrea curiosa.
Esto - le muestro el contenido de mi celular - literal tanta gente esperando verlos, para que ellos se bajen asi.
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Lo se, es cruel - dice Andrea haciendo un gesto triste.
