MI FANÁTICA.[LYANNO]. |COMPLETA|

128.(Maratón 2/3)

Me miré al espejo,apenas se notaba el embarazo,solté un suspiro cuando Jefnier entró a la habitación.

—Sé que solo van a firmar pero llegó el gran día.—sonrió.—Finalmente unirán sus vidas para siempre,bueno,lo hicieron el día que se conocieron porque ya todos sabíamos que ahí había más que bellaquera.

—¿Estás feliz?.

—Tú lo estás así que si,Ivy.—suspiró.—He tenido la suerte de conocer a Lyanno antes,su evolución fue...increíble,un tipo que disfrutaba brincando de nena en nena,igual que tú con los tipos,que cosas tiene la vida que terminaron poniéndose pa lo serio dos personas así,siempre suele ser una de las dos partes inocente así lo lleva por el buen camino pero..—me senté en la cama.—Ahora son papás,y están por casarse.

—¿lo hubiera creído si le dijeran?.—chasqué la lengua—Yo no,ni tampoco que nuestra relación sobreviviría a todo lo que hemos pasado,no la pusimos fácil para el otro nunca,eso es un fallo que los dos tenemos.

—Se aman y eso es lo que los mantiene juntos,fuertes,pueden tratar de golpearlos,normal si es que quieren seguir guerriando pero ustedes tienen un amor tan fuerte,tan real...ese muro no se cae,¿oiste?.—me abracé a mi misma.—Y tienen el respaldo del de arriba,¿contra él quien puede?,nadie.

—¿Tú crees,que de verdad nos cuida tanto?.—miré al cielo.—Yo cada día agradezco porque nos deje ver un día más a cualquiera de nosotros,desde el derrumbamiento yo andaba con miedo de que les pasara algo,yo postrada en esa cama nada más que rezaba y rezaba,nos echó la mano,nos cuidó.

—Vamos a resolver esto.—besó mi frente.—apero prométeme que donde vayan a meterse se van a cuidar porque donde te pase algo,Ivy,yo me muero.—negué con mi cabeza.—Sí.—sus ojos se aguaron.—Cuando estabas desaparecida,todo ese tiempo yo estaba caminando sin vida,y cuando apareciste recuperé la ilusión,no me querían dejar entrar,y a mi sin cojones,iba a entrar como fuera te tenía que ver,te tenía que abrazar,aunque peleemos,aunque hablemos todos los días no importa qué,yo necesito saber que estás,poder abrazarte,molestarte,el día que no estés se apaga mi mundo,¿oíste?.

—También el mío.—miré la puerta.—No sé,tendría que ser fuerte por los nenes pero..—negó con su cabeza.—Te me vas y pierdo todo,Ivy,y delante de tu hermano lo digo,no ha existido ni existirá una mujer que me haya hecho sentir como tú,ninguna que me haya dado tantos dolores de cabeza ni que e tenga dispuesto a sufrirlos de nuevo,te volvería a escoger mil vidas más,no sé qué fue lo que me hiciste o qué me diste pero yo sin ti..no soy.

—Que bonito,diablo.—dijo mi hermano antes de abrazarlo.—Sendo cabrón,estás pero bien enchulado.—Y no eres el único.—dijo murándome.

—¿Vamos?.—pregunté agarrando mi bolsa.

—Vamos.

Narra Roa.

—¿Tienes la más mínima idea de cual será su próximo movimiento?.

—No,Chris.—respondí frustrado.—Supongo que atacaran la casa,la tendrán vigilada continuamente,necesitarán saber cuando hay alguien para explotarla y mandarla al carajo.

—¿Sigues creyendo que son los padres de Ivy?.

—Pues está bien rato su visita pero no creo que tengan que ver además Giana está actuando muy extraño,muy torpe,es una aficionada que no podría matar a nadie.

—¿Entonces nadie la envió?.—miré a Rauw.

—Esa tipa opera sola o eso o trabaja con otra incompetente igual a ella porque ese ataque a la hija con la mamá al lado es una provocación de aficionado,sin armas,sin protección,fue un impulso de ella,por Lyanno,eso es lo que Ivy tiene y ella ansía.

—¿Y que hacemos?.—dijeron a la vez.

—Lyanno será el cebo.

—Tiene su propio plan.—replicó Chris.

—¿Y en qué consiste?.

—Buscarla.

—Es un pésimo plan.

Narra Lyanno.

Besé nuevamente a Ivy,tenía algo de miedo,esta noche saldría a buscar a Giana,no quería que Ivy supiera porque se opondría,no quería que los chamaquitos estuvieran acá para que ella pudiera escabullirse rápidamente.

Regresó por mi culpa y yo iba a parar con el problema.

Observé el dedo con el anillo de casada de mi mujer,ella pareció notar que estaba preocupado por algo,lo podía leer en sus ojos igual que ella debió leerlo en los míos,dejé un beso en su vientre.Voy a volver bebé,y te cuidaré y mimaré tanto como a tus hermanos.

—Ivy.

—Mmm.

—Te amo.

—También te amo,me lo dijiste como mil veces en la ultima hora.

—Es para que no lo olvides.—me besó.

—No sé que tramas pero será mejor que lo pienses,no tienes que resolver solo,somos muchos los que tenemos el mismo propósito.

—No tramo nada baby.—sentí como me abrazaba con fuerza.

—¿Me lo prometes?.—preguntó con los ojos aguados,no me haga eso mami que me derrumba.

—Sí,está todo bien,¿qué tal si duermes un poco?

—Unos minutitos nada más.

(...)

Narra Ivy.

Volví del aeropuerto con los ánimos más bajos de lo que esperaba,sabía que me pondría triste pero no esperaba que me fuera a golpear así.

—Lyanno,volví.—no había rastro de él.

Comencé a buscarlo por el resto de las habitaciones pero no encontré nada.

—¿Donde mierda se metió?

Fui a la habitación que nos pertenecía y agarré la nota que había.

Quiero que mis últimas palabras sean TE AMO,hoy y siempre,sigue iluminado me el camino para cuando regrese y perdóname pero no me habrías dejado.

Te amo,a cualquier hora que leas esto.

Att: el señor Osorio,para la señora Cuevas,¿no?.

—Lo prometiste.—dije abrazándome a mi misma cuando las lágrimas comenzaron a caer.—Debí imaginarlo,maldita sea.—mi teléfono comenzó a sonar.

—Ivy.—fruncí el ceño al identificadla voz de Chris.—¿Estás bien?.

—Sí,¿por qué?.

—Tus papás.

—¿Qué pasó con ellos?.

—Se accidentaron.

—¿Qué fue lo que dijiste?.

—Sí.—se quedó en silencio.—Jeimax iba manejando.

—No no no no...—grité.—Es mentira,Chris,dime que etas mintiendo,no...

—Ivy,no puedes ponerte así,le hace mal al bebé.

—Lyanno ha ido a enfrentarse a Giana.

—¿Solo?.

—Sí,todo se derrumba Chris.—reí sin ganas.—¿Que sentido tiene la vida?.—pregunté abriendo la ventana.

Que tentador.

••••
¿A Ivy puede salirle mal alguna otra cosa más?.