MI FANÁTICA.[LYANNO]. |COMPLETA|

131.

Miré la cicatriz que dejó la bala al rozarme,tuve algunas molestias durante la noche y comenzaba a preocuparme que fuera algo más grave,salí del baño y sonreí al ver a Ghosty acostado junto a Lyanno,había pasado la primera semana desde que salió del hospital y la verdad no sabría decir si estaba mejorando o no.

—Papi,mira.—Lyanny apareció con un vaso.—Tómatelo,te hará súper bien,tio Jeimax me ayudó a prepararlo.—sonreí con ternura.

—Gracias.—dijo en voz baja.

—¿No te lo vas a tomar?.

—Lyanny,déjame solo,¿si?.—la pequeña me miró.

—Ven,amor.—la cargué.—Tú pai quiere estar solo pues solo lo vamos a dejar.—cuando pasamos por su lado sentí como me agarraba por la cintura.—Suéltame,quieres estar solo.

—Lyanny,ve a jugar afuera.

—Con cuidado,¿si?.—pedí viéndola alejándose.—¿Puedo saber porque te estás comportando como una porqueria?.

—¿A que mierda te refieres?,me trajo eso y le agradecí después le dije que se marchara porque quería estar solo,¿es un delito?.—me crucé de brazos.—Tú dime.

—No lo es.—dije molesta.—Pero es una nena chiquita,vino con toda su ilusión a traerte algo que cree que va a hacerte sentir mejor y le respondes pidiéndole que se vaya,no soy así y tú tampoco lo eras así que no tengo idea de porqué te comportas así.—me miró con atención.—Mis papás no me celebraron nada,jamás y de mis hermanos celebraban todo,yo no voy a hacer eso con mis hijos no permitiré que t...

—Shh....—se levantó.—Yo no estoy haciendo nada de eso,no lo haría nunca,no la quería aquí porque no me siento yo ahora mismo,mira nada más en que tono tengo que hablar pa no morir del dolor.—entrelazó nuestras manos.—Y sabes que a nuestros nenes les gusta parlotear y no puedo hacerlo como solía hacerlo,no puedo regañarlos cuando hacen las cosas mal,no puedo siquiera reírme fuerte porque me duele.

—Díselo,lo entenderán.

—¿Les digo también que fue una ex novia la que me rajó la garganta,les digo que perdí mucha sangre?.

—Edgardo.—bajó la mirada.—¿Sabes?,haz lo que te plazca,estoy cansada.

—Puede que jamás vuelva a cantar,¿por qué no me has preguntado por eso?.

—Porque eso no es siquiera una posibilidad.—tensó la mandíbula.—Vas a ponerte bien en unos días y volverás a tu vida normal.

—No puedo hablar alto,no puedo...—soltó bastante frustrado,me quedé en silencio observando como se ahogaba en un vaso de agua.

—¿Qué es lo que quieres que haga?.—pregunté mirándolo.—No puedo hacer nada.—se quedó en silencio.—¿Por que fuiste?.

—Porque estabais en peligro.

—Ya pero se supone que ibas a quedarte conmigo,que íbamos a encontrar la manera de arreglar todo,en mitad de la noche te fuiste y podría haber sido la última noche que nos viéramos,tanto por Corina como por Roa.—relamí mis labios.—Mandar a los nenes a PR tampoco lo hablaste conmigo...

—¿Por que me echas eso en cara ahora?.

—Solo te estoy comentando lo que pasó al otro lado,apuntaron a Leo con un arma,a Chris le dieron,a mi me rozaron y a ti te rajaron el cuello,siento que deberías estar agradecido porque estamos todos bien,deberías sentirte orgulloso porque tu sacrificio tuvo sentido,en vez de estar preocupándote por si podrás cantar.

—Ivy,estoy agradecido pero es mi sueño,siempre quise vivir de esto,cantar pa los fanáticos es lo que me llena.

—Okay.—sonreí antes de irme.

Subí las escaleras para meterme en el cuarto,quería tumbarme en la cama pero sentía que tenía el estómago algo revuelto,me metí en el baño y cerré con seguro.

Me arrodillé frente al retrete y vomité,me pareció bien extraño porque no había comido nada desde anoche pero pues ya nada me sorprende.

Me lavé los dientes y cuando terminé me tomé un rato para mirarme al espejo,estaba cambiada,no era la misma que cuando nos conocimos,él tampoco,habíamos crecido,habíamos madurado,juntos.

Habíamos pasado por tantas cosas...

Escuché unos toques en la puerta,al abrir vi a mis tres nenes sonriéndome.

—Nos falta uno para jugar,¿juegas?.

—Vamos.—respondí.—Ghosty,vamos.—se bajó de la cama y me siguió.

Cuando llegamos al jardín vi que ya habían colocado las porterías,Lyanny comenzó a correr.

—¿Con quien voy yo?.—pregunté confundida,con tanto pensamiento ni siquiera me acorde de que no me lo habían dicho.

—Conmigo,respondió Leah.

Narra Lyanno.

—¡Papi!.—miré a Lyanny.

—¿Qué pasó?.—pregunté levantándome bruscamente al verla llorando.

—Es mami.—salí al jardín.

—Estábamos jugando y ella se cayó de repente.

—Okay.—dije cargándola,la llevé a la sala y la tumbé.—Ivy..—la moví un poco.—Ivy.—nada.—Iv..

—Despertó.

—Sí,fue un desmayo.—dije mirándola.—¿Has comido algo en todo el día?.—no respondió.—Y nada más a ti se te ocurre jugar fútbol así,estás embarazada.

—Lo sé,no tuve hambre y ya.

—¿Estás bien?.—preguntó Lyanny agarrando sus mejillas con sus pequeñas manitas,Ivy asintió.—¿Seguro?.—unió sus frentes.—Te amo mucho,mami.

—Y yo.—dijeron sus hermanos.

—¿Quieres comer?,puedo compartirte un poco de mi chocolate.—comentó Leah.—Bueno,un muchito para que el bebé no te lo quite todo,voy a buscarlo.—sonreí de lado.

—Yo también quiero buscar algo.—susurró Leo antes de salir corriendo detrás de sus hermanas.

—Les has dado un buen susto.

—Lo siento.—dijo mirando a un punto fijo.—Le diré a mi cuerpo que no se desmaye la próxima vez.

—He estado pensando.

—¿En que?.

—En todo.—acaricié su vientre.—No quiero pelear contigo.

—Estábamos hablando,no discutiendo.

—Me llamaste Edgardo.

—Bueno,mi intención no era discutir.

—Tampoco la mía pero sé que también te diste cuenta de que no estoy al cien,no soy yo,no soy Lyanno,ni como cantante ni como papá ni como marido.—tiré un poco de ella para acercarla a mi,apartó la mano que tenía apoyada en mi muslo y se sentó.—Ahora que se terminó la pesadilla quiero poder amarte al cien y disfrutar de todo esto que tantas lagrimas nos costó tener y mantener,pero necesito saber que estarás,me pongo mal solo de pensar que un día vas a decidir irte.

—Lyanno,estoy,estaba y estaré siempre.—me abrazó.—No me voy para ningún lado y si en un futuro Lyanny se rompe seguiré estando,yo no necesito que llevemos un título pa serte leal,hasta la muerte,hicimos un pacto,¿no?.—sonreí.—Te has grabado tanto en mí que no hay nada ni nadie que pueda borrarte.

—Te amo.—dije cerca de sus labios a lo qhe ella respondió besándome,le seguí el beso porque es imposible resistirse a sus labios,cuando nos alejamos me aferré a ella,es mi polo a tierra,lo es,lo era y lo será siempre.
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Necesito esa boda YA.

Edgardo recupera tus decibelios por favor JAJAJAJAAJA.