MI FANÁTICA.[LYANNO]. |COMPLETA|

090.(Maratón 5/5)

-Buenos días.-dijo Ly,se quedó mirándome preocupado,y ya podía imaginarme porqué,anoche no alcancé a dormir ni una hora así que mi aspecto hoy debía estar delatándome.-¿Todo bien,amor?.

-Sí,¿como estás tú?.

-Mejor.-forzó una sonrisa.

-Anoche tuviste pesadillas.-hice una pausa.-Al principio solo sentía que te removías mucho y me extrañó,porque siempre duermes acariciando mi pancita pero ayer estabas inquieto.-le di un sorbo a mi té.-Así que me quedé vigilando que lo que fuera que te estuviera acechando anoche,no te impidiera descansar.

-¿Te quedaste despierta por si seguía teniendo pesadillas?.

-Te dije que ibas a estar bien,y que te iba a cuidar,¿no?.

-Pero tú necesitas descansar.

-Anoche lo necesitabas tú,además nuestros nenes nos tendrán noches y noches en vela así que esto le sirve de base a mi cerebro para que se mentalice de todo lo que se nos acerca.

-Ven.-señaló el sofá para que me tumbara,él se tumbó a mi lado en el borde del sofá para cuidar que no me cayera al girar.-Vas a dormir un poco antes de que vayamos a la consulta con el doctor.

(...)

Me habían practicado algunos exámenes y cualquiera con visión podía darse cuenta de que Lyanno estaba nervioso que un recién licenciado el primer día en su nuevo trabajo,en cambio yo estaba ahí sentada,recordando lo sucedido ayer.

¿como pudo cargar con un dolor así por tanto tiempo sin decirle a nadie?,me impresionaba su fortaleza y su capacidad para seguir luchando,cuando Jhay y yo dejamos de estar juntos me entregué a la perdí y sin cojones me tenían las consecuencias,salí pero no sané.

Su mirada me recordó a la de un chamaquito que hizo algo malo y estaba preparado para que la mai lo regañara,se veía tan aterrorizado,¿como alguien puede infringir tanto dolor en una persona a la cual dice que ama?.

Quizá si me hubiera negado a que trajeran a Mía o de haber buscado cualquier otra opción podríamos haber evitado que pasara por eso otra vez,me sentía bien culpable,quería ayudarlo,quería abrazarlo y susurrarle que todo iba a estar bien,que iba a estar a su lado siempre pero no creo que las palabras sean la mitad de eficaces que los gestos y por ahora,los abrazos se habían convertido en la mayor muestra de afecto entre nosotros.

-Todavía faltan algunos exámenes pero vi que siguió mis recomendaciones,podemos disminuirle la toma de las vitaminas porque al parecer alteran un poco a los nenes.-me comentó mientras tecleaba en su ordenador.-Pero la prohibición de trabajar sigue siendo la misma,por lo que a mi respecta,solo puedes componer.

-Está bien.-respondí desganada,no tenía caso discutir con el doctor y después llegar a la casa para tener la misma difusión con Ly.

-Gracias.-comentó Lyanno mientras se levantaba,Mía abrió la puerta para que pasáramos.

-¿A donde iremos ahora?.-preguntó curiosa.

-A casa,Ivy necesita descansar.

-Podéis ir a divertiros,no quiero que se queden aburridos en la casa solo porque yo no pueda hacer cosas divertidas.

-Pero yo quiero pasar tiempo con ustedes juntos,los extrañaba así que por mi no hay problema,podemos ir a la casa.-abrió los ojos de forma exagerada.-Podrían adoptar un perro,así cuidará de la casa y de los bebés.

-¿Que opinas?.-me preguntó mi jevo.-Siempre quise tener una mascota,ya tenemos la casa,la orejita de nenes,solo nos falta la mascota.

-Está bien.-ambos comenzaron a saltar de alegría,salimos del hospital comentando la raza que prefería cada uno,en las cosas que necesitaría para cuidarlo y en otros detalles importantes.

Llegamos a una protectora que varios personajes públicos recomendaban,tuve ganas de adoptarlos a todos pero pues eso no podía ser,estuvimos dando par de vueltas hasta que di con un cachorro de color marrón oscuro y blanco,con los ojos de distinto color,sonreí de lado.

-¿Por que no te adoptaron aún?.-sollozó,mi corazón se encogió cuando me miro a los ojos.-Amor.-Lyanno me miró.-Creo que este esta hermoso.

-Me gusta.-respondió Mía con una sonrisa.-Que hermosos ojos tiene.

-Sí.-respondí yo.

Narra Lyanno.

Por fin habíamos terminado de montar la casa de madera que pondríamos en el jardín,Mía había decidido encargarse del cuarto que quedaba libre en el piso de abajo para colocar todas las cosas de Ghosty,decidimos ponerle así por su ojito claro.

Ivy apoyó sus manos en la silla para no caerse,dejé lo que estaba en mis manos para cargarla antes de que cayera al suelo,nos metimos en la casa y la acosté en el sofá,fui hasta la cocina a buscar agua para que lo tomara.

-Fue solo un mareo,tranquilo.

-Bueno,se acabo el bricolaje por hoy.

El cachorro se acercó mirando la escena,Ivy comenzó a reír cuando me ladró mientras me perseguía por la sala,genial,ahora mi propio hijo cachorro estaba en mi contra,cuando se aseguró de que estaba lejos de Ivy se tumbó colocando su cabeza sobre la pancita de ella,tomé una foto para recordar el momento.

-Creo que no le caiste bien.

-Me tiene envidia porque yo llevo tiempo acariciando tu pancita y él no.

-De seguro.-me hizo una señal para que me acercara,besé sus labios con necesidad,pero cambié el ritmo al recordar que no estaba bien sana pa hacerle lo que estaba deseando en ese momento,volvió a atraerme hacia ella cuando intenté separarme.-Ya estoy mejor.

-No vamos a chingar.

-Peeeeeeeeero papi....-dijo haciendo berrinche.

-A la única que le voy a soportar los berrinches va a sea a Leah.

-¿Leah?.

-Sí,nuestra nena.-la vi sonreír.-Queda duro.

-No se parece a ninguno de los que propusimos en su día.

-Yo sé.-dejé algunos besos por toda su cara.-Pero estuve pensándolo mucho y ese me gustó.

-Leah...me gusta.-susurró antes de besarme de nuevo.-Ahora sí,más vale que le des a la baby lo que está pidiendo porque sino la cosa va a ponerse bien fea en esta sala.
•••