MI FANÁTICA.[LYANNO]. |COMPLETA|

112.

-Ghosty,no.-escuché el grito de Lyanno,mi hijo perruno tenía en su boca el mando de la consola de su pai quien no hacía más que lloriquear para que no se moviera,el animal me miró antes de comenzar a correr arrastrando el mando,la consola y los costosos auriculares que usaba para jugar,me tapé la boca sorprendida,ahora sí Lyanno se iba a enloquecer.

-¿Qué fue lo que te dije?.-dijo gritando,Ghosty comenzó a replicarle.-No me diga na cuando lo estoy regañando,animal del diablo.-solté una carcajada,Ly giró para verme.-¿Viste lo que ese animal hizo?,me quebró la consola.

-Ly ya estás grande,que Leo llore porque se quedó sin su juguete favorito está bueno pero tú ya eres grande papi.-miró a Ghosty de nuevo,estaba tumbado con la pancita hacia arriba para que lo acariciara.-Se está disculpando.

-Me importa un carajo.-dijo molesto.

-¿Le hablarías así a los trillizos?.-negó con su cabeza.-Pues respeto papi que está hablando con su primogénito.

-Jamás debimos firmar la adopción.-dijo en bajo,Ghosty comenzó a llorar.Me agaché y comencé a acariciarlo,después de un rato se sentó y colocó sus patas delanteras sobre mis hombros,sonreí antes de abrazarlo.-Genial,róbeme la mujer también,quítenmelo todo,condenado.

-Ay ya.-dije aburrida,el timbre comenzó a sonar,fui a abrir porque sabía quien llamaba.-Llegaron los nenes.

Abrí la puerta y los tres entraron corriendo.-Tus hijos son el diablo.-pegué un brinco del susto cuando uno de los cojines aterrizó en la cara de Lenny.

-Maldito huelebicho a mis hijos no les dices que son el diablo más nunca ah.-cerré la puerta.

-Que humor.

-¿Que humor?.-se levantó.-Mira..-señaló el desastre de la consola.

-¡Papi,rompiste la consola!.-comenzó a gritar Leo.-¿Como voy a jugar?.-Lyanno suspiró.-Siempre dices que seamos cuidados y mira,lo quebraste.

-Yo no fui.

-Lo hiciste.-sollozó.

-Fue Ghosty.

-¡Mientes!.-dijo acariciando al perro.-Mamiii.-dijo con la voz entrecortada,alzó sus brazos para que lo cargara.-Papi rompió la consola y ..y ..yo...nosotro...

-Nene,ya fue.-dije tranquilizándolo.-Vente,vamos a lavarnos las manos,¿si?,mientras su abuelo Lenny pone la mesa.

-¿Cual abuelo y por qué tengo que ponerla yo?.-se quejó.

-Tengo un hijo llorando en mis brazos,¿me quiere discutir ahora?.-negó con su cabeza varías veces.

Caminamos hasta el baño y le ayudé a lavar sus manos,cuando llegaron mis niñas repetí el mismo procedimiento.

-¿Vamos a comprar otra consola?.

-Sí,su papá irá a comprarles una a ustedes porque él no sabe cuidar la suya.-Lyanno me miró mal.-Vamos a que les quite el uniforme.

Subieron las escaleras rápido,cuando llegamos a su habitación les quité los uniformes y les puse algo mucho más cómodo con lo que pudieran jugar y pudiera manchar sin problema.

-¿Como les fue hoy?.-preguntó Lyanno cuando volvimos a la sala.

-Bien pero,¿que crees?,mi papá rompió mi consola.-comencé a reírme.

-La pasamos bien.

-¿Quieren que les recoja Rauw mañana o Lenny?.

A pesar de las señas que hizo Tavarez señalándose para que lo eligieran eso no pasó.

-Rauw.-dijeron a la vez.

-¿Por qué?.

-Porque tú te pusiste a coquetear con la profesora.-soltó Lyanny antes de cruzarse de brazos.

-Pero ella está linda.

-Pero tienes novia.

-¿Y tú cómo sabes?.

-Porque la conocemos.-dijo Leah con obviedad.-Y mi papá dice que hay que respetar a la persona que tienes al lado y no los respetaste.

Comencé a reír por la inocencia que se cargaban estos tres.-Con eso me refería a su jevo o jeva.-explicó Lyanno.

-De seguro la novia de Lenny no le rompió la consola.

-Si me rompe la consola de va pa la calle.-Leo miró a su pai.

-Mami.-me llamó.-¿Podemos echar a papi hasta que traiga una consola nueva?.

-Leo soy tu papá,no puedes echarme de la casa,un respeto pues.

-Por eso le digo a mami.

-Tú mami tampoco puede echarme.

-Pero cuando mami te dice algo tú no pones quejas.-sonrió.-Mami...

-Hijo,iremos por la consola y ya,tú pai no se va para ningún lado.

-No lo dejan ser feliz a uno.-Lenny rió.

El celular de Lyanno comenzó a sonar.

-Es una mujer.-gritó Leah antes de taparse la boca con sus manos,miré a Lyanno.-Papi,¿con quien tú hablas,es mi mamá,estás hablando con tu mujer?.-dijo haciendo énfasis en "mujer".

No pude parar de reírme,pero estos chamaquitos de donde salieron,no de seguro que con ellos no íbamos a tener secretos nunca más porque ellos todo lo gritan.

-¿Quien eres?.-preguntó cuando Ly puso el teléfono en su oreja.-Ahhh,¿y trabajas con mi papá?.

Me miró.-¿Como así que es tu hijo?,es mi papá.-gritó frunciendo el ceño.-Ah,mami,es mi abuela,¿quieres hablar con ella?,me aburrí.

Lenny comenzó a reírse,le eché una mala mirada pa que entendiera que si se reía la chamaquita iba a pensar que hacía bien.

-Tú nena es bien habladora.-sonreí.-Hasta tienes detector,mi hijo si va a tener que ser discreto si te las quiere pegar.-bromeó.-No solo él,de seguro te vigilan también.

-Son bien curiosos y habladores,carajo,desde que comenzaron no le para si tú vieras las discusiones que tienen siempre con el papá.-sonreí.-Y a ustedes,¿les va bien por allá?.

-Sí.

-¿Ya pensaron en lo que les propuse?.

-Sí hija,pero tú sabes tengo el trabajo acá y no puedo irme y ya,a Mía tampoco puedo enviarla porque están aprendiendo todavía,tienen tres nenes que necesitan toda la atención de sus papás,no necesitan más responsabilidades,ella puede quedarse par de días cuando coja vacaciones.

-Okay...-dije algo apenada.-Las puertas siempre están abiertas.

-Gracias.

(...)

Narra Lyanno.

Observé a Ghosty por un buen rato,la consola nueva ya estaba colocada y la puse en alto protegiendo los cables pero el perro del demonio ya andaba mordiendo.

-Mami,vamos a ponerle verja.

-¿Como así?.

-Sí,justo en las escaleras y en la puerta del jardín,castigado.-dije firme.

-Por eso te odia.

-Sin cojones me tiene.-se sentó sobre mi.-¿Que quieres,chingar?.

-No.-besó mis labios.-Llamaron del hospital.

-¿Que dijeron?.

-Lyanny está rechazando el tratamiento.-se abrazó a mi.-Tengo miedo,Ly.
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