Una nueva oportunidad

Capitulo 13: Entre risas y miedos

Bajo la luz de las estrellas y la calidez de la fogata pasaron esa velada con tranquilidad. El manto de la noche, acompañado del sonido de las ramas siendo movidas por el viento daban la sensación de paz. Sin embargo, cuando el frío comenzó a hacerse más extenso supieron que era hora de entrar a la cabaña a descansar.

Sasha comenzó a mover con su dedo índice a Armin, que en medio de todo se había quedado dormido sobre las piernas de ella.— Armin, hey Armin — Decía en un intento por hacerlo despertar, no fue hasta unos segundos después que abrió los ojos lentamente.— ¡Sigue vivo!

— ¿Qué sucede? — Preguntó mientras rascaba sus ojos con sus puños para poder tener mejor visión.

— Me llenaste de saliva la ropa. — Se quejó Sasha poniéndose de pie.

— Ya es tarde — Dijo Hanji mirando su reloj para luego dirigir sus ojos chocolates al contrario—. Levi, lleva a los pequeños a dormir, los demás nos quedaremos un rato más a apagar la fogata y recoger algunas cosas.

Levi simplemente asintió, y con cuidado tomo a Armin de las axilas para cargarlo sobre su pecho mientras él aún estaba luchando contra las ganas de dormir en el pasto.— Historia, Sasha. — llamó viendo a ambas niñas, la más pequeña seguía despierta pero lucía cansada, así que rápidamente se levantó del suelo dispuesta a ir a dormír, mientras por otro lado Sasha se negó.

— ¿Por qué yo? Connie y los demás se van a quedar despiertos más tiempo, además — Señaló el lago— ¡Yo quiero nadar!

— Aún entras con los niños. Además, ellos se quedarán a recoger y a estás horas los cocodrilos salen del lago.— Mintió con su típica expresión de seriedad, cosa que hizo a Sasha creerle.

— ¿Hay cocodrilos? — Preguntó visiblemente asustada.

— No hay cocodrilos, Sasha. Ahora vayan a dormir, mañana podrán nadar todo el tiempo que quieran.— Dijo Hanji con optimismo.

Sasha finalmente cedió, sin perder la idea de los cocodrilos en el lago. Poco después de que los más jóvenes del grupo y Levi se fueran, Hanji se acercó a los demás chicos.

— Eren, Connie necesito su ayuda con algunas cosas en la cabaña, ¿Vienen? — Ambos estuvieron de acuerdo y entraron a la cabaña dejando a los 3 restantes afuera. Mikasa y Jean estaban por entrar Igualmente, pero la de lentes detuvo al chico antes de que se fuera.— ¿A dónde vas? Esta es una buena oportunidad para hablar con ella.

— ¿Hablar? — Repitió con una expresión confundida— ¿Qué se supone que le diga?

— Discúlpate con ella por las peleas con Eren, e intenta ganar su amistad demostrando tu apoyo ¿Comprendes?

Él desvió la mirada hacia la chica que estaba caminando a la cabaña, con nervios asintió.— Está bien, lo haré ...

— No tarden mucho, hace frío afuera.

Hanji apresuró su paso para alcanzar a Mikasa, colocó su mano derecha sobre el hombro de la más joven.— Mikasa, ¿Podrías ayudar a Jean a recoger las mantas que quedaron afuera? — Comentó refiriéndose a las mantas recién lavadas por Levi hace rato. La chica sólo miró hacia el tendedero y accedió, Hanji le pidió no tardar mucho a ambos y finalmente entro a la cabaña dejándolos solos.

Cuando Jean vió a Mikasa acercarse al lugar sintió un leve cosquilleo en su estómago, a penas ella comenzó a recoger las mantas él imitó la acción con temor a que ella pensará que le había dejado todo el trabajo.

— Jean — Lo llamó haciéndolo salir de su trance, él aparto la mirada del suelo cuando esos ojos oscuros se cruzaron con los suyos. Entre sus manos llevaba varias mantas blancas ligeramente húmedas por el viento—. ¿Te vas a quedar aquí?