❛ DAMNED ❜ - sk

012

Jisung había ido hacia su departamento donde se había encerrado llenando de sospechas a todos por la repentina desaparición de la joven adolescente y haciendo que Eun-yeok ideara una búsqueda de la chica. Sin embargo Jisung había perdido los estribos que le había esforzado crear para estar bien.

Mientras que recargaba su arma, lo que fuera que vivía con Jisung había comenzado a merodear por el edificio hasta llegar a las duchas donde un hombre con arma estaba apuntándole a una mujer. Desapareciendo de aquella escena de dirigió hasta el departamento donde habitaba en el cuerpo de la chica.

— ¿Que estás diciendo?¿Armas? ¿Sangre? — a Kim la cabeza le comenzaba a doler a más no poder mientras sus visiones no la hacía consciente de lo que en realidad estaba a su alrededor. Algo estaba mal y Jisung podría detenerlo antes de una masacre empezara.

Tomó su M4A1, pistolas, cuchillos y demás armas que ocultó fácilmente en su cuerpo. Hyun-su no era una preocupación, sino los niños. Aquella bebé, la madre de esta, el señor Du-sik incluso la señora Cha.

— ¿Que cambió tu parecer? — el espejo reflejaba una figura femenina, cubierta de pintura negra con detalles dorados, que parecía ser su reflejo. — Si uno de ellos muere, tú sufres y yo sufro contigo. Evitemos que si yo muero, tú mueras.

La chica tomó sus armas y partió camino hacia la recepción, solo pensaba que los niños tal vez estaban peligrando o que los adultos estaban desconocidos de la situación que estaba pasando.

Sin embargo lo que la joven no sabía es que los adultos estaban disfrutando de una noche de charlas, anécdotas y demás.

— Oye. ¿Sabes que debes despejarte de tu compañero? Vine porque la mía está muy enferma. — Lee Eun-Yu le hacía compañía a Hyun-su mientras los adultos disfrutaban de su noche.

— ¿Tienes miedo?

— ¿Qué?

— Creciste mucho.

— Siempre fui alto.

— Claro. — los intentos de la chica por acercarse más a Hyun-su fueron inválidos, conociendo a Hyun-su el no sabría cuándo una chica les estuviera dando un alago porque ninguna chica se le acercaba cuando estaba en la escuela. — Caminas bien.

— ¿Qué?

— Creí que te dolían los pies.

— Por eso deje el ballet, fuiste mi ultimo publico. Considéralo un honor.

Mientras que los dos adolescentes pasaban un buen momento, las cosas comenzaban a salirse de control. Más intrusos comenzaban a irrumpir en el edificio. Eun-yu trataba de enseñarle cosas nuevas en el momento que tenían ambos.

— Cuando alguien se mete contigo... ¡PA! ¡PA! ¡PA! ¡PA!

— Haz esto al menos, Inténtalo. — la chica comenzó a mover sus dedos rápidos. Hyun-su trato de seguir los pasos de Eun-yu sin embargo no pudo seguir. — Oye, olvídalo. ¡Cielos! — una carcajada salió de los labios de la chica. — Te falta talento. Bien, mira.