El principio del Fin, el Retorno del fuego

Extraños enemigos

Se despidió de manera momentánea de la Maestra Cris para ir a casa de Rubi, comenzó a caminar, era una tarde fresca, la brisa del aire movía las hojas de los árboles, algunos niños pasaron corriendo a un lado de él, uno de ellos se tropezó y cayó al suelo, se abrió una herida en su rodilla, el niño soltó en llanto, mientras sus amigos acudieron rápidamente, otro niño se ríoal ver como se cayó, Battu se acercó al niño y con la palma de su mano toco su rodilla, el niño casi de inmediato dejo de llorar, al retirar su mano, ya había dejado de sangrar y la herida había cicatrizado, aquellos niños se quedaron asombrados, sus ojos se abrieron gigantescamente, uno de ellos, se acercó a Battu, tenía el cabello rojizo y con un par de pecas en el rostro, lo llamo "mago", de repente los demás niños le comenzaron a pedir que hiciera más trucos, otro niño se acercó, ese niño no estaba con los demás, él estuvo sentado debajo de un árbol, en aquel árbol se encontraba un par de mantas y cartón, tenía el rostro manchado con un poco de suciedad y sumamente delgado de aproximadamente 8 años de edad, agarro la mano derecha de Battu y se la llevo a su estómago, aquel niño vivía en la calle, aparentemente no tenía padres ni familia alguna, quizás se había escapado de su hogar, su historia era incierta para Battu, pero logro entender el mensaje del niño. 

El niño tenía hambre, al presenciar como Battu hizo desaparecer la herida del otro niño y los otros comenzaron a llamarle "mago", pensó que podría ayudarle a desaparecer el hambre que tenia o podía crearle algo para que pueda comer. Battu llevo metió su mano izquierda en su bolsa y saco las galletas que se había llevado de casa de Cris, se las dio al niño, quien estaba maravillado, no podía ocultar la felicidad que sentía, sus ojos se llenaron de alegría, agarro las galletas y se alejó corriendo, Battu lo siguió con la irada, vio como aquel endeble niño se detuvo frente a una niña, sumamente delgada igual que el niño, de aproximadamente 6 años de edad, parecía ser su hermana pequeña, le dio la galleta y ambos comenzaron a comerla desesperadamente, un joven de cabello rizado y con una mochila en la espalda, también vio la reacción de aquellos niños, tomo su mano y la metió en su bolsillo, tenía un par de monedas, y fue a la tienda, ahí compro una botella de agua y dos panes, caminó directamente hacia los hermanos pequeños y se las dio, Battu presencio un acto de bondad pura, el altruismo de un hombre y el sentido de la hermandad. Los seres humanos lo sorprendían cada vez más con sus actitudes.

Permaneció por unos momentos más junto con los niños, los pequeños hermanos se acercaron, la pequeña estaba un tanto temerosa, mientras que el otro niño estaba entusiasmado, Battu creo una pequeña pelota de fuego, parecida a una pelota de ping-pong, todos los niños presentes estaban deslumbrados y no precisamente por el fuego, sino porque para ellos era algo mágico, algo que jamás habían visto, comenzó a crear una tras otra pelota de fuego, manejándolas entre sus manos, lanzándolas el cielo para luego caer como luciérnagas encima de las cabezas de los niños, hizo figuras de fuego que se movían, a la pequeña niña le obsequio un girasol de fuego, el fuego que creo no quemaba ni calentaba, para ellos era algo asombroso, inclusive algunas personas adultas se quedaron al ver el espectáculo que hacia Battu, para ellos se trataba de un acto de ilusión, magia total, permanecieron atentos por varios minutos.

La noche cayó y el espectáculo era más impresionante, sin darse cuenta, se encontraba rodeado de muchas personas, adultas y niños, todas las personas presentes estaban sombrados por sus trucos y actos, habían visto cosas parecidas en la televisión, para todos Battu era un excelente mago. Luego de una hora Battu les agradeció y las personas comenzaron a retirarse poco a poco, no sin antes dejar un par de monedas a un costado de él, tomo las monedas y se las dio al pequeño para que comprase algo de comer para él y su hermana, el niño tomo las monedas y corriendo con una enorme sonrisa en el rostro que hasta ojos le había iluminado, y su sonrisa era enorme, llego corriendo a una panadería, su hermanita estaba con él, una vez dentro de la tienda, Battu se alejo para ir hacia casa de Rubí.