𝘋𝘢𝘥𝘥𝘺 𝘐𝘴𝘴𝘶𝘦𝘴 ✔️

Cap.XIV

~𝐀𝐩𝐨𝐜𝐚𝐥𝐲𝐩𝐬𝐞~

Richie's point of view.

Oía las sirenas de la ambulancia cada vez más cerca.

Los faros de los coche eran las únicas luces de la calle, mis lágrimas que poco a poco se perdían con la lluvia, dificultaban la visibilidad.

Los llamados de mis amigos se quedaron en el olvido cuando llegué al lugar de los hechos.

Sentí mi garganta desgarrarse mientras gritaba su nombre.

Mi cuerpo no respondía. Perdí el equilibrio cayendo al asfalto húmedo.

Un pitido comenzó a sonar en mis oídos. Eddie y Stan se tiraron frente a mí.

Veía sus bocas moverse pero no emitían ningún sonido.

Entonces algo golpeó mi hombro devolviéndome a la realidad.

Me encontraba tendido en la acera, Bill a mi lado.
Acababa de sacarme de la carretera.

Ambos respirabamos agitadamente.

Sentía el frío colarse entre mis huesos y las llamativas luces de la ambulancia me cegaban.

Entonces la vi.

Tendida en una camilla, con los ojos cerrados y su hermoso pelo rubio teñido con su propia sangre.

Intenté levantarme pero no me lo permitieron.

Eddie se colocó frente a mi, evitando que viese a Michelle así.

Entonces Beverly llegó junto a un adulto.
Me pusieron en pie y comenzó a hablarme, pero no podía oír nada.

Una auto se detuvo a nuestro lado. Me obligaron a entrar en él.

Stan a mi lado y Eddie en el asiento del copiloto.

Seguía estático.
El viaje se me hizo eterno.

Sólo podía pensar en aquella cinta.
Si no la hubiese dejado... Si Le hubiese hecho caso...

Abrieron la puerta del coche sacandome de él.

Entramos en el hospital, me sentaron en una cama y comenzaron a hablarme.

Vi a mamá entrar preocupada.

Pero nadie llegaba a por Michelle.
¿Por qué su madre no estaba aquí?

Cerré los ojos cuando una luz blanca me deslumbró.

-Vamos a darle un tranquilizante, señora- oía las voces lejanas.

Sentí un pinchazo y poco a poco mi cuerpo se relajó.

Parpadeé varias veces observando el techo blanco de la habitación.

Tenía el cuerpo frío y adolorido.
Ya había amanecido.

Observé la aguja enterrada en mi brazo.

Michelle.

Me levanté de golpe sacándome la vía y salí de la cama.

Corrí hasta la puerta y la abrí encontrándome con los chicos esperando en el suelo.

Parecían cansados.

Eddie me miró señalando el espacio que había entre él y Stan.

Me senté temblando.

Un viejo médico salió de la sala contigua.
Nos miró con pena y se acercó a nuestros padres.

Estábamos todos sentados alrededor de su cama.

Yo tomaba una de sus manos mientras que Eddie y Stan tomaban la otra.

Nadie hablaba, no sabíamos que hacer.

Tres toques sonaron en la puerta.
La madre de Bill se asomó por ella.

-Chicos, os quedan diez minutos- nos dijo tristemente.

Ben susurró algo para después levantarse, el resto lo imitaron.

Miraron por última vez el cuerpo casi inerte de la rubia y salieron dejándome solo con ella.

Bill abrazado a Beverly.
Stan y Eddie secándose las lágrimas.
Ben y Mike con la cabeza gacha.

Me tendí en la camilla abrazandola por la cintura y recostando con cuidado la cabeza en su pecho.

Sentía sus débiles latidos acompañar a los pitidos de la máquina.

-No me dejes, porfavor- supliqué -por favor Michelle- dejé caer las lágrimas contenidas.

Sostuve su mano besando sus nudillos.

Cada pitido tardaba más que el anterior.

-Por favor- un pitido prolongado me asustó.

Me abracé más a su cuerpo.

Los médicos entraron sacando e a la fuerza.

Me arrodillé en la puerta.
A

penas podía respirar, no podía procesar lo que estaba pasando.

Volvía a estar en medio de una tormenta desprotegido.

Volvía a estar en un apocalipsis pero esta vez sus labios no presionaba los míos.

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CURIOSIDADES:

-Cuando lo sacaron de la sala, el anillo de Claddagh dejó de sentirse cálido y se convirtió en un metal frío en el anular derecho de Richie.