Un lindo detalle.

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Dos meses después Clear vino a trabajar pero todavía dice que no es lo suyo aun que lo haga bien, creo que el quiere formar su propio camino aquí en Alemania no me preocupa del todo ya que el ha demostrado ser una persona fuerte en todos los sentidos de la palabra, aún así él viene a trabajar en los inicios de semana y los otros días va a buscar trabajo. La verdad no se muy bien a que quiere dedicarse...

- Noiz-san revise el reporte del día.

- Dime.

- Bueno hay bajas en... -siempre que explica las cosas o da su punto de vista se pone muy nervioso, sus manos tiemblan y a sus mejillas las invade un color rosado, no podría creer que es un robot si alguien me lo dijera. A pesar de que somos distintos el siempre pone de su parte para que esto fluya bien- y eso es todo, m-me entendiste Noiz-san.

- Claro que si Clear, lo revisare en un momento.

- Este... Yo... ¿Puedo retirarme por hoy?

- ¿Algún problema?

- Ah ninguno realmente, es solo que iré a ver otro trabajo.

- Esta bien ¿nos vemos en la casa?

Se acercó y beso mi mejilla, cosa que me sorprendió porque ya hacia un tiempo que no tenía ese tipo de gestos conmigo, por inercia antes de que se fuera lo tome de la mano y lo volví a atraer a mi pero esta vez dandole un beso en los labios y sentándolo en mí regazo.

- Noiz-san alguien podría entrar.

- Tu empezaste. Además ya te dije que nadie entra sin pedir permiso de hacerlo.

Rodeo mi cuello con sus brazos y me beso de nuevo.

- ¿Esto... Esto es lo que hacen los novios normales?

- ¿Novios normales?

- Aaahh, no, no, no, no dije nada -se levanto con la cara mas roja que antes- yo-yo tengo que irme jaja. Nos vemos Noiz-san.

¿Me pregunto de donde habrá sacado eso ahora? Novios normales... Yo nunca le pedí que fuéramos novios formales pero nunca lo había sacado a relucir... Horas más tarde después de revisar algunos reportes en los que Clear trabajo y estando solo el recinto tuve que hablarle.

- Hey Clear, ¿puedes venir a la oficina? Necesito verificar algunas cosas que hiciste.

- ¿A-ahora?

- Bueno puedes venir en 20 minutos.

- Ah si esta bien, llegare en ese tiempo.

Colgué y lo espere en la oficina, ¿seguirá en una entrevista de trabajo? Pero es muy tarde para eso... A la hora estimada tocaron la puerta de mi oficina.

- ¿Puedo pasar Noiz-san?

- Claro.

- No había nadie allá abajo.

- Ah si es que ya es muy tarde pero me tuve que quedar para revisar lo que hiciste.

- ¿Lo hice mal?

- No, solo hay unas cosas que no entiendo...

Clear se acercó y se paro junto a mi, mentí absolutamente todo lo entendía a todo menos a él. Luego de repasar las cosas que el hizo olvide por completo que ese día no había comido nada.

- Es muy tarde... ¿Ya comiste?

- N-no.

- Pediré algo para comer.

- Noiz-san... Yo te traje algo... -de la mochila que traía saco dos cajas y un termo, las puso en el escritorio y al verlo era una colorida cena para dos- Supuse que no habías comido nada y quise preparar algo para ti, es sopa de miso, pescado frito, ensalada y arroz espero que te guste y yo... Yo... Se que soy torpe en algunas cosas y no debí de haber dicho lo de la tarde, lamento también haberte hecho trabajar de más no es mi intención me estoy esforzando bastante en este empleo y...

- Clear... Cenemos.

Asentó con una pequeña sonrisa en los labios y el peculiar color rojo en sus mejillas, nos sentamos comimos todo lo que trajo, terminamos y nos fuimos a sentar en el sillón que estaba en la oficina estuvimos conversando por un rato.

- Realmente me gusta mucho tu voz Noiz-san.

- ¿A que viene eso?

- No lo se, antes casi no hablábamos y ahora lo hacemos demasiado que puedo decir que me encanta el sonido de tu voz.

- ¿En serio? Antes llamabas a Aoba maestro por su voz...

- Si, pero después de que la Oval Tower fuera destruida y mi chip cambiado ya no era necesario un reconocimiento de voz para mi, aprendí a escuchar todo lo que me rodea y tu voz es una de esas cosas.

Clear puso su cabeza en mi regazo y comenzó a tararear una melodía con sus ojos cerrados, supongo que las cosas van bien después de todo.

NocturneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora