Tras conocerse, Zee Pruk y Saint Suppapong sentirán un bonito e intenso amor que irá creciendo día a día. Este será uno de esos amores que son difíciles de encontrar y que duran para siempre, aunque antes de disfrutarlo, ambos deberán superar todos...
Durante toda la comida, Jimmy y Tommy y Krist y Singto no pararon de hablar de sus respectivos duetos y de las canciones que podían elegir.
Tony se había unido a otro chico para el trabajo pero este tenía su propio grupo por lo que durante la comida, este estaba igual que Saint.
Hartos de ser ignorados por sus amigos, ambos sr pusieron a contar chistes y hablar de cine.
Lo cierto era que el castaño estaba deseando que llegase la última hora del día para así poder ver y hablar con su guapo profesor y aunque no sabía cómo iba ha hacer para no desmayarse a cada rato, deseaba comenzar a ensayar con este cuanto antes.
...-Saint ....Hey Saint.. tierra llamando Saint... ¿en qué estás pensando?, seguro en algún noviete que has dejado atrás, ¿verdad?-habló el moreno tras verle sonreír si decir nada.
-Oh ¿si?, dime Tony.
Este rio.
-Te decía, que no pensé que no iba a echar tanto de menos a mi novia...la verdad, es que se me va a hacer el curso muy largo- dijo este seriamente, parando de hacer tonterías.
El castaño volvió a sonreír y asintió como dándole la razón pero en realidad no estaba pensando en ningún noviete para nada, sino que estaba pensando en su profesor y en lo mucho que le gustaría que estuviese en la mesa sentado con ellos pero no iba a decirle eso a su compañero, ya que era una locura.
Al terminar la comida, los chicos se fueron de nuevo a retomar las clases y al finalizar, el castaño se fue a la sala de profesores a buscar a Zee y así poder hablar con él.
Cuando llegó, este se lo encontró hablando con una joven profesora de pelo largo muy amigablemente, esta era la maestra de danza de segundo y no sabía porque pero no le gustó nada verlos juntos.
Este se puso en la puerta a esperar, mientras los profesores terminaron su conversación, comprobando con molestia, que el mayor ni se había dado cuenta de que estaba allí.
Finalmente, luego de unos minutos, este se despidió de la profesora con un beso en la mejilla y una sonrisa de oreja a oreja con cara de bobo y luego miró hacia la puerta encontrándose a su alumno, bastante mosqueado
-¿Vamos o qué?, tengo muchos deberes que hacer-le espetó este haciéndole un ademán con la mano.
-¿Estás bien, Saint?, ¿te ocurre algo?.
Este simplemente negó con la cabeza y manteniendo su cara seria, evitó mirar a la cara al profesor pues estaba bastante celoso y no sabía porqué.
En realidad, el mayor no era nada suyo, no era de su propiedad y ni siquiera sabía muy bien qué sentimientos tenía hacia él y según iba caminando, se sintió muy niñato aunque no había podido evitarlo.
-Venga, vayamos a la cafetería y mientras nos tomamos un café, hablaremos de cómo nos vamos a organizar para realizar el trabajo, ¿has pensado en alguna canción en concreto?- le preguntó el profesor muy sonriente.
El castaño volvió a negar con la cabeza, mientras siguió caminando a la par que su profesor, el cual fruncía el ceño ante la seriedad de su alumno, cuando desde que lo había visto por primera vez, siempre estaba mostrando su dulce y hermosa sonrisa.
Al llegar, se pidieron sus cafés y buscaron una mesa libre para sentaron uno frente al otro, mientras algunos de los alumnos y profesores que estaban allí, los miraban haciendo sentir algo incómodo al castaño.
-No te preocupes, venga vayamos a lo importante...hablemos de nuestra canción...emm, yo había pensado en esta-dijo mostrándole el vídeo musical.
Saint lo miró extrañado el cual se levantó y se sentó junto a él para ver juntos el video en Google.
-Oh pero esa es...
-si, es Tata Young, dijiste que era una de tus cantantes favoritas ¿no?-habló Zee -...bueno resulta que también lo es mía y esta es mi canción favorita de ella., venga escuchemosla y luego decidimos.
El profesor dio al play y el video musical dio comienzo.
Al termino de este, Zee volvió a sonreír y a mirar a Saint, el cual no sabía que pensar pues se sentía abrumado por el embriagador aroma de este.
-¿Que te parece?
Este se encogió de hombros.
-Oye, ¿te ocurre algo con la canción o es conmigo?-habló nuevamente el mayor-... pensé que te entusiasmado y sin embargo mírate, estás ahí tan serio... ¿Te molesta que yo sea tu compañero?, quizás quieres que te cambie con otro.
Saint sonrió con rapidez pues no podía permitir que este se cambiase pues no quería otro compañero, sino que lo quería a él, además había decidido algo en ese preciso instante.
Este no podía permitir que la profesora u otra persona se lo quitase, pues Zee iba a ser suyo sí o sí.
-No, no es nada, lo siento, es solo que estoy un poco agobiado y echo mucho de menos a mis padres.
El profesor entonces, hizo un gesto que dejó al más joven flotando en una nube pues este levantó su mano y le acarició la cabeza, siguiendo un impulso que había estado controlando, desde que lo había visto tan serio en la puerta de la sala de profesores.
-No te preocupes, pronto te adaptarás...todos te ayudaremos-le dijo dulcemente haciendo que el corazón de Saint latiera tan fuerte, que se le quería salir del pecho irremediable.
-Gra-Gracias.
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