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Decir que, Jimin había vuelto a dormir, sería mentira, porque la verdad, era que, el cansancio se retiró de su cuerpo ante ese simple "nos vemos mañana".

Estaba jodido, en toda la extensión de la palabra. Su burbuja la explotó él, al realizar tal pregunta, era obvio que, JungKook solo le veía como amigos con derecho, o quizás ni eso.

Limpiándose el rostro de esas lágrimas rebeldes, salió del baño, pero al abrir la puerta, un doble lo veía con nostalgia.

Intentó mantenerse firme, sin embargo, el escozor dentro de su pecho, no le dio prórroga para resguardar nuevamente las rebeldes gotas de agua.

JiHyun le abrazó y él se dejó cubrir, agradeciendo internamente a que, éste no preguntara nada más, realmente lo hizo.

A la mañana siguiente, ambos entregaron sus móviles, tal y como su progenitora se los había cantado. Desayunaron y luego fueron al auto, debían ir con su progenitora a sus preparatorias para aclarar lo de las escapadas...

La primera parada fue para el mayor de los Park. Minying, bajó junto Jimin para ir hacia rectoría, y tras estar enfrente del rector, la mujer se enteró de las demás fugas del castaño mayor.

El director no estaba con ninguna intención de seguir aceptando tales faltas, por lo que, Minying quería que la tierra se abriera, la tragara y la escupiera en la cúspide más alta del mundo.

— director Kim, mi hijo no volverá a faltar a sus clases, ni volverá a escaparse como vil malhechor de la academia — prometía con vergüenza.

Jimin, suspiró y en parte se sintió mal, lo menos que, quería era darle problemas a su madre.

— Lo prometo, director Kim — añadió a la promesa.

El hombre de cuarenta y dos años, cabellera negra algo grisácea, contó hasta tres antes de ponerse de pie.

Vestía un traje negro, sus orbes café oscuros primero vieron a la madre en preocupación, luego viajaron al menor que se encontraba con la cabeza inclinada hacia abajo.

— Tienes una última oportunidad, Park Jimin — dijo.

La sonrisa de Minying se amplió y estrechó su mano con el hombre.

— Muchas gracias — agradeció la mujer.

— Solo quiero re... —

El mayor no siguió cuando su puerta fue tocada.

— Adelante — dijo tras soltar la mano de Minying de Park.

Una mujer cabellera negra y de orbes negros, vistiendo un hermoso traje color crema, entró junto a un joven pelinegro.

— Buen día, director Kim — saludó la fémina al hombre, pero al percatarse de que había más personas dentro — buen día a todos — añadió.

JungKook, volteó a ver al pequeño castaño que se negaba a conectar vista con él, suspirando terminó de entrar a la oficina.

— Buen día, señora Jeon — devolvió cortésmente el saludo el director.

— Buen día — saludó Minying.

— Ya que, están las dos, señora Park y señora Jeon, debemos aclarar algunas cosas respecto a esta última oportunidad en esta distinguible preparatoria — dijo a las mujeres — ustedes jóvenes, intégrense a sus salones de clases — ordenó a los chicos.

— De acuerdo y gracias — murmuró Jimin antes de acercarse a su madre y besar su mejilla — no te preocupes, no lo volveré hacer — le susurró.

𝐘𝐨𝐮'𝐥𝐥 𝐀𝐥𝐰𝐚𝐲𝐬 𝐁𝐞 𝐘𝐨𝐮!~||❍︎𝐊𝐨𝐨𝐤𝐌𝐢𝐧 ||EN PAUSADonde viven las historias. Descúbrelo ahora