𝙏𝙚 𝙦𝙪𝙞𝙚𝙧𝙤 - 13.2

1.1K 127 34
                                    

ESTA HISTORIA ES ADAPTADA BAJO EL PERMISO DE LA AUTORA.

ESTA HISTORIA ES ADAPTADA BAJO EL PERMISO DE LA AUTORA

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Orus fue muy bien recibido por ambas familias. Tanto los Jeon como los Manoban habían tratado con cariño y amabilidad al cachorro desde el primer momento. Por otra parte, a Jennie y Yoongi le pareció bien que su hijo conviviera con un perro para que no tuviera problemas cuando creciera con los animales. Mingyu le propuso a Tzuyu que tuvieran un perro cuando se casaran, emocionado como un niño chico ante esa posibilidad. Hasta los medios de comunicación se volvieron locos al enterarse de que Jungkook Jeon tenía perro y no dejaban pasar la oportunidad de fotografiarlo con Orus, al igual que pasaba con Lisa. Y cuando aparecían ambos junto Suk y Orus dando un paseo, la gente enloquecía. Estaban en portadas de revistas, periódicos y hasta salían en la televisión. Jungkook y Lisa, cansados, sonreían ante la estúpidez de sacar a pasear un perro y que te siguiera todos los medios de comunicación del país. Por eso, decidieron ir a pasear al parque de los cerezos cada vez que pudieran. Orus ya se había recuperado de su herida y cada día que pasaba estaba más sano y feliz con su nueva familia. Incluso, aunque hubieran pasado solo unas semanas, se podía observar que estaba más grande.

Mientras todo esto pasaba, la ciudad de Tokio, así como todo el mundo, se estaba preparando para la Navidad. Se esperaba que nevara para aquellas fechas y, de hecho, nevó. Se respiraba un aire acogedor y cálido por toda la ciudad: la gente comprando regalos para sus seres queridos, se escuchaban canciones típicas navideñas, luces de colores por las calles...

-Una bonita época para declararse, ¿verdad, Mingyu? –dijo Jungkook mirando sonriente a un escaparate lleno de joyas y objetos preciosos.

-¡¿Qué?! –se sobresaltó el castaño al escucharle- ¿Qué vas a hacer? ¡No me lo puedo creer! ¡Sí, por fin! –gritó Mingyu lleno de alegría.

-¿Por fin, qué? –preguntó alzando una ceja el pelinegro.

-¡Que te vayas a declarar a Lili-ah! ¿Cuándo lo vas a hacer? –preguntó atrayéndolo hacia él rodeándolo por el cuello.

-Pensaba hacerlo en la casa rural de tus padres en Sapporo –dijo Jungkook en voz baja, avergonzado por afirmar sus intenciones para con Lisa.

-¡Buena idea! Estaremos todos allí y lo celebraremos, ¿qué te parece? –preguntó entusiasmado, teniendo como respuesta el ceño fruncido de Jungkook y su conocido monosílabo- Y bueno, ¿qué le vas a regalar?

-Para eso te he pedido que me acompañes, idiota. Tú ya te has visto en una situación parecida a ésta, por eso quiero que me aconsejes –pidió decidido Jungkook.

Mingyu sonrió contento. Por supuesto que iba a ayudar a su mejor amigo. Quería ver las caras de las cuatro familias (Jeon, Manoban, Kim e Chou) cuando Jungkook y Lisa anunciasen que estaban saliendo formalmente...

Los padres de Mingyu, Joon y Yoona, habían invitado a todas las familias amigas a que pasaran las Navidades todos juntos en la gran y hermosa casa rural que los Kim tenían para pasar las vacaciones de invierno allí. El padre del castaño había sido por varios años seguidos el alcalde de Tokio y un reconocido político en Japón, por eso eran una familia muy conocida y famosa en el país.

Un problemón muy llorón | LK ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora