𝙋𝙤𝙧 𝙚𝙡𝙡𝙖 - 18 - 𝙁𝙞𝙣𝙖𝙡 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙥𝙧𝙞𝙢𝙚𝙧𝙖 𝙥𝙖𝙧𝙩𝙚.

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ESTA HISTORIA ES ADAPTADA BAJO EL PERMISO DE LA AUTORA

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-Jungkook... ¿Podrías dejarme estudiar? –preguntó Lisa dándole a Jungkook con el boli para que se alejara de ella.

El pelinegro gruñó con molestia y finalmente deshizo su abrazo y se alejó de ella. Por fin había conseguido entretener a Suk por primera vez en toda la tarde y se encontraba a Lisa estudiando para el maldito examen de conducir. Y él solo quería un poco de mimos después de una larga semana de trabajo.

-Vale, pero después no vengas pidiéndome que te haga caso –respondió cruzándose de brazos de espaldas a ella.

-Oh, vamos, Jungkook no te comportes como un crío chico –dijo Lisa poniéndolos ojos en blanco.

-Hmp –utilizó su famoso monosílabo con gesto fruncido y se marchó de la habitación.

Lisa suspiró.

Desde que se apuntó a la academia para aprender a conducir pasaba bastante tiempo estudiando y Jungkook la perseguía en todo momento como si fuera Orus en busca de cariñitos y mimitos. La verdad es que él se había tomado bien la noticia de que ya no tendría que ser su chófer personal después de que se sacase el carnet y había asumido más tiempo del que le tocaba cuidar de Suk para que ella pudiese estudiar. Aunque "Los primeros días que conduzcas te acompañaré por si acaso. No quiero accidentes", eso dijo con voz autoritaria.

Volvió a suspirar.

Tendría que compensar de algún modo.

Cuando salió del estudio, Lisa se estiró para despejarse un poco después del duro estudio de marchas y señales de tráfico

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Cuando salió del estudio, Lisa se estiró para despejarse un poco después del duro estudio de marchas y señales de tráfico. Se percató de que el apartamento estaba en total silencio y se extrañó. Comenzó a andar por el pasillo y llegó al salón. El parque y los juguetes se encontraban en el mismo sitio de siempre pero de Suk no había rastro. Se acercó más al sofá y lo que vio allí la enterneció: Jungkook estaba tumbado a lo largo de todo el sofá boca arriba, abrazando a Suk que estaba echo una bolita arropado con su mantita amarilla; Orus se encontraba a los pies de Jungkook, utilizando sus pies como almohada. Los tres dormían profundamente. La peliplata no perdió el tiempo y les hizo una foto con su móvil. Se quedó observándolos embobada durante un rato más hasta que su móvil comenzó a vibrar. Miró la pantalla y abrió mucho los ojos al ver quien estaba llamándola. Se fue corriendo al pasillo y cuando llegó al final de este, descolgó rápidamente.

Un problemón muy llorón | LK ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora