Pasión entre las sombras

Aceptación e intercambio

Capítulo 19: Aceptación e intercambio

Mondrule resplandecía con la belleza de la Luna, mas su corazón se encontraba destrozado.

Dark Zelda estaba en sus aposentos en compañía de su amada rosa, la que le regalaba su perfume para tratar de animarla. No comprendía qué le ocurría, pero sabía perfectamente que se trataba de algo atroz.

Mientras aspiraba su esencia, la dama la miraba y acariciaba con mucha dulzura.

- Nunca olvides que siempre seremos una, mi perfumada y hermosa amiga. – dijo la dama, esbozando una débil sonrisa.

La joven besó los delicados pétalos de la apasionada flor, para después salir de su habitación y encaminarse a su misión; salvar a todo lo que amaba... por él.

Ante la ausencia de la dama la rosa comenzaba a cuartearse, mientras su brillo se vislumbraba intermitente.

...

La inesperada retirada de la Dama de la Luna dejó a Dark Link estupefacto, sobre todo por la especial manera en la que lo hizo. Pensó haber olvidado la sensación de sentir sus labios, pero se descubrió que, más que nunca, estaba presente. Sintió enormes deseos de alcanzarla, pero una turbia sensación lo detuvo, y no precisamente se trataba de Gehena.

Link, desde la distancia, observaba a su contraparte con extremo desagrado, recreándose una y otra vez en todo el suplicio que le hizo pasar en sus pesadillas, sobre todo en la agresión mayor, haber intentado asesinar a la mujer de su vida.

El héroe elegido, sin quitarle la mirada a su enemigo, dejó a su debilitada esposa de lado, pues estaba dispuesto a reclamar su revancha con todo el odio que lo dominaba.

- Es momento de que resolvamos esto como hombres. Jamás te perdonaré por haber atentado contra lo más valioso para mí.

Dark Link, dejando de lado a la Dama de la Luna, retornó a su rostro la máscara de la venganza, dispuesto a cumplir con su anhelada meta... la cabeza de su enemigo.

- Muy bien, no más palabrerías. Que nuestras espadas hablen por nosotros. – dijo asiendo la empuñadura de su arma.

Link lo imitó, y apretando los dientes comenzó a gritar con furia mientras se lanzaba corriendo al encuentro de su contraparte oscura, quien hizo lo mismo; el sonido del choque entre ambas hojas marcó el inicio de la contienda.

Tras el choque inicial ambos retrocedieron para tomar impulso nuevamente, y el héroe de Hyrule inició la contienda con una serie de ataques relámpago que su adversario contrarrestó de la misma manera, prediciendo cada uno de sus movimientos y reaccionando con un bloqueo cruzado para contrarrestar cada ataque. En cuanto vio una abertura Link le lanzó un tajo diagonal hacia las piernas, que Dark Link esquivó con un salto acrobático por encima de él.

Link logró girarse a tiempo para poner su escudo y bloquear el ataque subsiguiente, y los dos de inmediato se trabaron en un intercambio de estocadas y cortes a corta distancia. Dark Link puso el escudo al frente para embestir a su adversario con todo su cuerpo para derribarlo. En cuanto Link cayó hacia atrás, su contraparte oscura saltó sobre él cambiando el agarre de la espada para empalarlo, pero Link rodó hacia un lado y lo evitó, poniéndose de pie de un salto para reanudar la confrontación.

Acto seguido lanzó una estocada que Dark Link paró con el escudo, y al ser repelida el arma se descolocó momentáneamente. Al recobrar la compostura, Link se lanzó nuevamente a dar un tajo amplio... sólo para que su oponente de pronto se desvaneciera, como si fuese una simple sombra de humo en el aire.

- ¡No huyas, maldito! ¿Dónde estás? – exclamó el héroe, enfurecido.

En respuesta, la forma de Dark Link emergió desde la sombra de Link a sus espaldas, antes de asestarle un golpe detrás de la cabeza con la empuñadura, aturdiéndolo momentáneamente.