La hija de Alaric Saltzman ~ Damon Salvatore [ Pausada ]

ℂ𝕒𝕡𝕚𝕥𝕦𝕝𝕠 𝟙 : 𝕄𝕪𝕤𝕥𝕚𝕔 𝔾𝕣𝕚𝕝𝕝

Narra Melissa:

Iba en el autobús en dirección a un pueblo nuevo, donde no conocía a nadie, a conocer al hombre que podría ser mi padre...

Pero yo lo preferí así, desde la muerte de mi madre no soporto estar en mi pueblo y menos entrar en mi casa. Así que, cualquier excusa era buena para salir de allí. Por supuesto no voy sola, no soy tan tonta, Susana ha hecho el favor de acompañarme, ella tiene su vida, sus hijo, etc. Pero conoce a Alaric, así se llama el hombre al que voy a ver en Mystic Falls y que podría ser mi padre.

Yo elegí quedar en un sitio con gente, ya que no lo conocía del todo y podría ser un mal hombre, aunque no lo parece, pero las apariencias a veces engañan, por eso hemos quedado en la cafetería del pueblo.

Narra Alaric:

Estaba en la barra del bar muy nervioso a la espera de que la joven apareciera tal y como habíamos quedado por mensaje. La puerta de la cafetería se abrió por quinta vez, pero ésta si era la persona a la que esperaba, junto con mi amiga Susan.

Ellas se acercaron a mí, Susana me saludó y se fue a otra mesa para que pudiéramos hablar tranquilos.

Narra Melissa:

Llegué a la barra donde Alaric estaba, no sabía que decir. En general suelo ser bastante antisocial, prefiero estar sola que con gente. Susan saludó a Alaric y se fue.

- Por favor, elige la mesa que más te guste.- Dijo Alaric.

Yo señalé una mesa al fondo y ambos nos sentamos allí. El camarero vino a tomarnos mesa y yo pedí una tila puesto que estaba muy nerviosa. Recuerdo que un par de horas antes anoté todo lo que le quería decir a Alaric en mi teléfono, pero estába tan nerviosa que se me olvidó mirarlo.

- Bueno Melissa, me alegro de que me llamaras, ¿Cómo estás? ¿Cómo lo estás llevando? - Preguntó él meditando cada frase que decía para intentar no herir mis sentimientos y para sacar tema de conversación.

- La verdad, es duro, desde lo que pasó no he vuelto a entrar mi casa. Ahora duermo en casa de Susana, pero sé que ella tiene su vida... ¿Por qué no cambiamos mejor de tema? No me apetece hablar de esto... - Dije lo último en voz baja. - ¿Y a qué te dedicas?. -Le pregunté.

- Soy profesor del instituto del pueblo, doy historia,¿Tú en qué curso estás? - Preguntó él.

- En 1º de bachillerato, pero seguramente repita curso... Mis notas están bajando. - Dije triste.

- Bueno... No pasa nada, lo importante es centrarse primero en estar bien y después los estudios. Además, seguro que tus profesores entienden la situación...- Intentó animarme.

Estuvimos hablando durante un rato más, la verdad es que él era muy bueno, ojalá hubiera sido mi padre... Entonces solté la bomba fuerte:

- Alaric... Sé que ésto es muy repentino, y supongo que Susana ya te habrá contado lo que pasa... Necesito saber si eres mi padre, si no lo averigüo pronto el Estado se hará cargo de mi custodia y a saber donde y con quien me mandarán. Yo me he criado sin padre, y no necesito uno, solo me hace falta que si eres mi verdadero padre biológico te hagas cargo de mi custodia durante los pocos meses que me quedan para ser adulta. Después, viviré mi vida y no te volveré a molestar nunca más. Solo necesito que te hagas una prueba de paternidad, lo mismo ni somos familia...- Dije nerviosa casi con lágrimas en los ojos, hasta que él me interrumpió.

- Tranquila... Estoy de acuerdo contigo, me haré esa prueba, no voy a dejar que te pase nada y aún menos sabiendo que puedes ser mi hija. En cuanto llegue el fin de semana, acudimos a la clínica, que nos hagan la prueba, y ya con lo que salga tomamos una decisión...- Dijo sincero apoyando sus manos en mi hombro como señal de apoyo, y al final nos dimos un abrazo...

- Ooo que emotivo... Pero ten cuidado Ric, podrían acusarte de favoritismo con los alumnos.- Dijo un chico de pelo moreno y ojos azules como el mar.

Yo intenté presentarme:

- Soy Meli...

- Pero si es la chica pirómana. - Dijo el ojiazul interrumpiendome.

- Damon, por favor comportate.- Dijo Alaric regañandole.

- Soy Melissa.- Dije al fin.- Y no soy pirómana, solo me defendía. - Dije excusandome.

- No te preocupes... Si estoy de acuerdo contigo... En éste mundo o muerdes o te dejas morder... Además fantástico lanzallamas improvisado, eres de las mías, soy Damon Salvatore, mejor amigo de tu futuro padre y puede que también tuyo si eres valiente.- Dijo él giñandome un ojo y besando mi mano.

Yo me quedé sin saber que decir, éste chico había llegado y en solo un momento tiró mi reputación por el suelo y lo convirtió en algo bueno...

- En mi opinión no necesitáis ninguna prueba, es tu hija sin duda, tiene la misma agresividad defensora que tú, es como una princesa guerrera. - Dijo Damon.

Os pongo en contexto, dos días después del funeral de mi madre fui a mi instituto a entregar el justificante de por que había faltado a clases, aunque todo el pueblo ya lo supiera, al salir me crucé con unos sinvergüenzas que me dijeron un montón de cosas horribles y se rieron de mi desgracia, así que yo agarré un mechero y un desodorante en spray y  causé una gran llamarada contra ellos, por suerte nadie salió herido, ellos se asustaron y me dejaron en paz llamándome loca huérfana.