Narra Melissa:
- ¡No por favor papá para el coche! Vamos a hablar.- Dije desesperada.
- No hay nada de lo que hablar. Abrochaté el cinturón. - Me respondió él seco, mientras miraba la carretera.
Su móvil sonaba, pero él sólo lo agarró para colgar.
- Por favor, solo escúchanos.- Dije mirándole.
- No quiero escuchar nada. - Dijo Alaric.
- Sabía que no te lo tendría que haber contado. ¿Es que no confías en mí? ¿Prefieres haberte enterado por otros? ¿Acaso es eso? - Dije mordiendo las uñas.
- Sí confío en tí. Pero no en él. No en Damon. A los pocos días de conocerle ¿sabes lo que me hizo? Me mató. Suerte que llevaba el anillo, si no no hubiera vuelto a la vida.- Dijo esta vez mirándome.
- No me va a hacer daño. Todo este tiempo me ha salvado. ¿Para que iba a matarme? Además, yo confío en él. Dale una oportunidad, por mí. Es tú mejor amigo.
- No, una oportunidad es la que tienes tú. Si mueres no habrá marcha atrás, y no estoy dispuesto a que lo haga. Ni a que un día se enfade, apague el interruptor y te mate.
El teléfono volvió a sonar. Fui más rápida que mi padre y acepté la llamada, además de ponerla en manos libres:
- Vamos Ric. Sabes que no voy a hacerle daño. Me he pasado el último año protegiéndola, no he hecho otra cosa, y no me arrepiento. Deberías alegrarte de que seamos felices. - Dijo Damon al teléfono.
- No pienso aceptar lo vuestro. Yo no. Despedios ahora. No voy a dejar que la veas más. Te pedí que la protegieras, no que la engatusaras. Voy a colgar, podríamos tener un accidente de coche. - Dijo mi padre y colgó el teléfono.
- ¡No me lo puedo creer! ¡Para el coche! Soy mayor de edad y puedo tomar mis propias decisiones. Ya no soy una niña.
Sentí como aquello que le dije le dolió, pero a pesar de eso no frenó. Al cabo de unos segundos en medio de la carretera apareció una figura. Y fue cuando Alaric paró el coche.
Esa figura de la carretera era Damon evitando que mi padre nos separara. Rápido me bajé del coche y fui hacia Damon. Él me recogió en sus brazos y lloré en su pecho.
- ¡Podríamos habernos matado! Eres un inconsciente. Por estas cosas no quiero que salgas con mi hija. - Dijo Ric viniendo hacia nosotros, mientras salía de su coche.
- Aléjate de ella.- Añadió mi padre apuntando a Damon con una pistola de balas de madera. Yo me di la vuelta.
- No lo hagas. Sois amigos. Si no quieres que salga con él no lo haré, pero no le mates.- Dije suplicando a mi padre.
Damon me soltó y a velocidad vampírica se puso detrás de mi padre sujetándole del cuello por detrás. Un solo movimiento y lo mata. Alaric soltó su arma y yo la agarré. Ambos se mal decían.
- ¿¡Ya está bien no!? Me está dando un puto ataque de ansiedad y aquí vosotros peleando. ¿Se supone que ambos queréis que sea feliz? Pues así no me haceis feliz. Así lo único que haceis es que quiera morir. - Dije seria.
Ambos se callaron y me miraron. Yo lancé el arma hacia los pies de mi padre.
- Ahora vamos a ver si realmente queréis mi felicidad. Podéis mataros el uno al otro. O podéis evitar que llegue al puente y me tire. Lo que haga a continuación será cosa vuestra. Pero lo advierto, como uno muera, no me volveis a ver en la vida. Porque no os lo perdonaré. - Dicho eso empecé a correr en dirección hacia el puente.
Narra Damon:
Lo que dijo Melissa realmente me asustó. Tanto yo como Ric sabemos que es capaz de tirarse por aquel puente sin pensárselo ni un segundo.
- Te voy a soltar el cuello y voy a correr hacia ella. No se te ocurra hacer ninguna tontería. Como se mate empieza a correr porque serás hombre muerto. - Dicho eso lo solté y salí corriendo.
- Espera. Aceptaré lo vuestro. Solo quiero que sea feliz. Si no lo hago se que huireis y yo también quiero volverla a ver. Pero como le hagas daño te tomo la palabra " empieza a correr porque serás hombre muerto".
Al salir corriendo hacia el coche de Ric, también agarré el arma de éste para evitar tentaciones y lo lancé lejos. Sabía que en la parte trasera de su coche tenía más armas. Por eso lo de la advertencia.
- Sube, vamos a por ella.- Dije ya subido en el coche. Y a continuación él también.
Conducí rápido hasta llegar a donde estaba ella. Había conseguido llegar más lejos de lo que creía, pero no lo suficiente para llegar al puente.
- Baby sube al coche. Ha aceptado lo nuestro. - Le dije frenando al lado de ella.
- No te creo. ¿Esto va a ser siempre así? Discusiones entre vosotros. - Dijo ella parada y temblando.
- No cariño. Disculparme. Tienes razón, no tenía derecho a sacarte así de casa sin haberos escuchado. - Dijo Ric.
Narra Melissa:
Una hora después estábamos los tres en un bar de carretera. Eran las 3 de la madrugada y yo seguía temblando, a pesar de las dos manzanillas que me había tomado.
Mi padre me insistía en que se había equivocado y Damon le contaba como habíamos empezado a salir.
Yo me sentía mareada. Me levanté para ir al servicio, necesitaba refrescarme la cara. A mitad camino me desmayé.
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La hija de Alaric Saltzman ~ Damon Salvatore [ Pausada ]
VampireMelissa, una chica llena de secretos que desconoce; pero se verán desencadenados por muerte de su madre. Ella se tendrá que ir a vivir con su padre el cual nunca antes había conocido, y junto con él descubrirá el poder de los sobrenatural. Un mist...