¿Cómo conquistar a un adicto al trabajo?

Extra 3: WangXian

Extra 3: será complejo 

La vida de Lan Zhan era una rutina escrita sin margen de error.

A las 5 de la mañana se despertaba, tendía la cama, se bañaba, se afeitaba, se vestía, desayunaba algo simple e iba a la oficina.

Tendría un día de trabajo completamente normal, al llegar a casa llamaría a su tío, como siempre, la llamada no duraría más de dos minutos. Se prepararía la cena y comería solo.

Su vida era monótona, sin sobresaltos ni sorpresas, todo estaba manejado a la perfección. Él no veía eso como algo malo, o al menos así era antes.

Si le preguntaran hace un año ¿De qué color ves la vida? Diría blanco: una pacífica y hermosa vista blanca.

Reiteramos, esa era la respuesta hace un año.

En un día como esos, había roto su rutina para ir a visitar a su hermano a la casa de su representante, quería asegurarse de que se encontrara bien en medio de una nube de rumores. Lo que no esperaba era conocer a Wei Ying.

Wei Ying era bastante diferente, su contrario perfecto, por decirlo de algún modo.

No entendía que fue lo que sintió al verlo, pero había una fuerza en su interior que lo obligó a permanecer en ese departamento más tiempo del que había planeado. Y una fuerza aún mayor era la que lo arrastraba a volver con más frecuencia de la que le gustaría admitir.

Wei Ying era bastante hablador, amistoso con todos, su gusto por la comida era totalmente opuesto al suyo, su rutina de sueño era un desastre, también era impuntual, pero sobre todo eso, destaca que tenía la sonrisa más radiante que conocía.

Su hermano se marchó de ese departamento y con él, su excusa para ir a visitar a Wei Ying, pero se armó de valor y le preguntó si podía seguir visitándolo, a lo que el profesor de música sonrió y le dijo "por supuesto, somos amigos".

Amigos.

Que palabra más amarga.

...

..

.

Era martes por la tarde, había terminado la jornada escolar y, milagrosamente, ya tenía las planificaciones de sus clases para el resto del mes.

El milagro tenía nombre: Lan Zhan.

A veces sentía que su amigo exageraba con el tema de la organización, el orden y esas cosas, no obstante, no podía negar que todo eso se traducía después a mejores resultado. Lan Zhan era muy lindo y una bendición cuando se trataba de las planificaciones o las revisiones de pruebas.

Evidentemente, su amistad no se basaba solo en que el más joven de los Lan sufriera de esclavitud docente, también salían a ver películas, pasear por ahí, iban a beber... bueno, solo él bebía, Lan Zhan siempre pedía agua o té; una verdadera lástima a ojos de Wei Ying,quien después de descubrir como era su cuñado estando ebrio, le daba muchísima curiosidad saber si el hermano menor seguiría las mismas conductas.

Wei Ying no conocía el hogar de Lan Zhan, en primer lugar, porque los Lan le daban miedo, especialmente por la visión que le entregó Jiang Cheng de ellos. En segundo lugar, creía que le caía particularmente mal a Lan Qiren, se vieron solo una vez (en la boda de Jiang Cheng), pero algo le hacía pensar que cada vez que cruzaba miradas con ese señor, él lo estaba juzgando.

No es que Lan Zhan viviera con su familia, de hecho, vivía solo; pero su hogar era propiedad de la familia Lan, así que temía que cualquier integrante apareciera de un momento a otro sin previo aviso.