Veintinueve

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Maggie
Hoy era el día, hoy Adrián se le propondría a Fernanda, todos estábamos emocionados y algo estresados eso último era un poco mi culpa, pero quería que todo estuviera perfecto ¡mis mejores amigos se comprometerán!

—Maggs, ¿dónde quieres la mesa?- preguntó Isaza quien cargaba la antes mencionada junto con Martín.
—Por allí, no tan cerca de la puerta- respondí, estábamos dejando todo listo, mientras Lau y Dana distraían a Fernanda, Simón y Villamil afinaban los intrumentos que en su mayoría eran guitarras, yo me encargaba de dirigir todo y un poco la decoración, Martín e Isaza acomodaban todo mientras que Raúl cuidaba que la comida no se quemara en mi departamento, era un buen cocinero y Adri estaba colgando unas bonitas luces, pronto lo mandaría a arreglarse a el apartamento que comparto con Juan.

—¿Nervioso?- pregunté a Adrián, mientras se acercaba a mi, todos estábamos bastante elegantes y algo abrigados pues nos encontrábamos en el techo o azotea del hotel y el frío de Bogotá realmente se hacía presente.
—Nervioso le queda corto a como me siento Mannie- respondió suspirando
—Veamos, las luces están bien puestas y funcionando, los chicos están bañados y cambiado, falta decorar la mesa y demás pero de eso me encargo yo, la comida está en mi cocina y en un momento iré por ella, solo falta que te cambies y ya está, todo saldrá bien- expliqué con una sonrisa pero mi amigo mantenía esa mirada preocupada
—¿Y si dice que no?- murmuró pensativo
—Eres un pendejo- le regañé dándole un sape en la cabeza
—¡Ay!- exclamó ante el golpe y me miró mal
—Ella te ama ¿si? Están juntos desde siempre, y claro que no son la pareja perfecta pero siempre saben resolver sus problemas, mírense más de diez años juntos, y yo, yo no podría estar más orgullosa de la persona en la que te convertiste, en la que ambos se convirtieron, se complementan y es el amor de tu vida y tu el de ella claro que dirá que si Adri- expliqué convenciendo a mi amigo intentando calmarlo, él respondió dándome un fuerte (pero no tanto) abrazo.
—Gracias por siempre saber que decir Mannie, y por todo en realidad, sabes que eres mi mejor amiga y sin duda no hubiera poder haber echo esto sin ti- dijo suavemente
—No es nada Adri, sabes que te quiero y espero que sean muy felices- sonreí -ahora vamos, que todavía nos faltan cosas por hacer, ve a cambiarte, de esto me encargo yo.

Adrián se fue a mi depa mientras terminaba de poner la mesa, había puesto unas velas y unas flores como centro de mesa y acomodar los cubiertos y platos, de repente sentí como alguien me abrazaba por la cintura y recargaba su cabeza en mi hombro, amaba cuando hacía eso.
—Te ha quedado hermoso, mi niña- murmuró Juan, lo cuál me hizo sonreír
—Lo sé- dije sonriendo victoriosa
—Tenías que decir algo cursi, como tu eres más hermoso Villa te amo- dijo intentando imitar mi voz
—En primera yo no hablo así, en segunda tu ya sabes todo eso- sonreí dándome la vuelta y envolviendo su cuello con mis brazos.
—Pero es bonito escucharlo- dijo haciendo un puchero y lo besé sonriendo, sin duda estaba más que enamorada de este hombre.
—Hey tortolos, falta la comida- interrumpió Martín, Villamil lo miró mal mientras que yo dejé un rápido beso en la mejilla de mi novio.

Me encaminé a mi departamento, rezando por que Fernanda no saliera del suyo y que Adrián estuviera listo, afortunadamente y desafortunadamente ninguna de las dos pasó.

—Oye ¿qué esperas? No falta nada para que las niñas suban a Fer, apúrate- le regañé mientras me llevaba la bandeja con comida y Raúl salía del departamento a ver en qué podía ayudar allá arriba.
—Ya voy, es que mi cabello agh no me gusta como queda- murmuró frustrado
—A ver, dame ese cepillo, me ayudarás a subir la comida ¿entendiste?- le ordené como toda una mamá, el asintió rápidamente y me dio el cepillo, como pude le acomodé su cabello rebelde y listo -¿mejor?
—Mucho, ¿que quieres que lleve?- preguntó yendo a la cocina
—La ensalada y los refrescos, yo me llevo la bandeja- indiqué y ambos tomamos las cosas y subimos con velocidad, ya faltaba poco y la noche empezaba a hacerse presente.

Les dije a todos donde iba cada uno y le llamé a Laura para que trajera a Fer.
—¿Lau? Ya es hora- dije en cuanto me contestó
—Ok, que bueno empezaba a sospechar- suspiró aliviada
—Créeme que jamás se imaginaría esto- reí -tráiganla con cuidado.
—Claro Maggs, ahorita nos vemos- dijo y colgó.
En pocos minutos vimos como Lau y Dana entraban para luego dar paso a Fer quien tenía los ojos vendados, le di una señal a mi mejor amigo para que fuera con ella, este estaba simplemente anonado viendo a su novia, camino hacía ella rápidamente y puso una mano en su cintura y con la otra le quitó la venda, ella examinó el lugar detalladamente y yo le dediqué una sonrisa, luego volteó a ver a su acompañante sorprendida, entonces Isaza comenzó a tocar el piano, tocaríamos y cantaríamos varias canciones entre todos, pero esta, esta era simplemente de Adri y Fer.

Te cuento que me encuentro enamorado- cantó Villamil con su voz tan característica y hermosa, que no pude evitar voltearle a ver con una sonrisa estúpida -y siento que esta vez es la correcta.
—Te cuento para mi ella es perfecta- siguió Dana viendo a los enamorados, yo seguía sin dejar de ver a mi novio mientras los otros dos enamorados bailaban al ritmo de la canción -con todos sus defectos y pecados.
—Sé que con otras yo me he equivocado, que me he dado contra el mundo y he perdido la esperanza- cantó Juan Pablo con aquella emoción, aquella pasión que sentía él por la música, sé que aquél era el momento de mi mejor amigo y su novia, pero no podía evitar mirar otra cosa que no fuera Juan, era simplemente perfecto.
Porque aunque llevo cargas del pasado, cuando él está a mi lado se equilibra la balanza y nada me cansa- siguió mi amiga, me topé con la mirada de Juan, me observaba atento y no pude hacer más que sonreír y perderme en sus bellos ojos, así pasó la canción entre miradas y sonrisas, hasta que terminó y mi mejor amigo se hincó tomando la mano de su novia y haciéndole aquella pregunta

—Fernanda Diaz, ¿me harías el honor de casarte conmigo?-
—Si.



Volví.

Golden (PAUSADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora