-Estaría dispuesta a Matar. - Dijo la pelinegra con una mirada llena de furia.
-No tan de prisa Kagura, quiero a la mujer para mí. - Dijo este acercándose para arrebatar de la mano de Kagura un pequeño jarrón de porcelana.
- ¿Qué dices Naraku? ¿Esa mujer es tan importante para ti? -Pregunto el ojo carmín recibiendo el silencio como respuesta. – Bien lo haremos a tu manera. - Dijo esta para después retirarse del lugar.
- ¿Esa mujer es importante para mí? - Se pregunto así mismo. - ¡Nah! Quiero todo lo que Sesshomaru ama, quiero ver a la familia del Gran Inu No Taisho destruida. -Sonrió para sí mismo.
•••
-Vamos InuYasha ¿Por qué eres tan necio? -Pregunto Kagome mientras trataba de jalar al peliplata.
-Kagome ¿Por qué debería de disculparme con la escoria de Sesshomaru? -Pregunta irritado.
-Porque es tu hermano mayor y tú lo lastimaste. -Explicó.
-No tiene sentido, por otro lado, no me interesa disculparme con él, así que déjalo ya. - Dijo este soltándose del agarre de su joven esposa.
- ¡Ay InuYasha! -Soltó frustrada.
- Ven vamos, déjalo ya, vamos a descansar. - Dijo el peliplata tomando de la mano a Kagome.
Kagome lo miro, observando cada detalle en su fino rostro, realmente lo amaba, pero existían veces en las cuales él la desconcertaba porque era tan inmaduro, y otra veces no era solo eso, ella era tan parecida con aquella chica a la cual él amaba, pero por azares de la vida ella había tenido una muerte muy trágica, recordó entonces que en aquel tiempo, ella era muy confundida con ella por la gente del pueblo, ellos aseguraban a verla visto en lugares a los cuales Kagome jamás había ido, una vez pudo verla desde lejos pero jamás cruzaron palabra, y algunos años después la pelinegra se entero de la muerte de aquella chica, fue entonces que conoció al peliplata, al principio no congeniaron pero como fue pasando el tiempo este se fue ganando el cariño de la pelinegra, y tiempo después conoció al padre de este, quien le resulto alguien muy agradable, en fin ellos terminaron por casarse, una boda a la cual los padres de la chica se negaron a asistir porque su ahora esposo es de un mundo diferente al de ella, es el hijo de un poderoso Yokai temido por los pobladores, entonces se centró en ella, era una chica insegura de su físico pero tenía una fuerte voluntad, salió de sus pensamientos al sentir un cálido beso.
-Inu. - Dijo abrazando al peliplata quien complacido acepto esa muestra de cariño.
Como muchas otras veces, tomo a la chica, la beso mientras ella soltaba algunas risitas le parecía tierna la manera en la cual el se sonrojaba cada vez que se entregaban, acaricio con suavidad a la chica causándole un suspiro, volvieron a besarse, ella quito el haori que este llevaba puesto y cuando estuvieron sin nada que les estorbaran se entregaron al placer que cada uno se brindaban, inundando la pequeña habitación de gemidos y suspiros.
-Te amo InuYasha. -Soltó la chica quien se encontraba en el pecho de este.
-Te amo Kagome. - Dijo acariciando la cabeza de la pelinegra. - Descansa. - Dijo para después cerrar sus ojos junto con la pelinegra.
•••
- ¿Te gustaría salir de este lugar? -Preguntó el ojos dorados. - De cualquier manera, tú te paseas por el palacio- Pensó.
- ¿Qué? -Pregunto la chica aún más asombrada. – Estas, estas diciendo que puedo ¿irme? - Dijo está mirando como la expresión del peliplata se volvió fría.
-No, quiero decir salir de la celda, has estado desobedeciendo mis ordenes ¿No crees que mereces un castigo? - Preguntó este mirando a la chica quien no se inmutaba ni en lo mas mínimo.
- ¿Por qué habría de merecerlo? -Preguntó esta con una mirada retadora.
- ¡Hump! - Soltó este, esta chica hacía que le salieran canas verdes. - ¿Y bien? - preguntó el peliplata.
- ¿Qué? -Preguntó está haciéndose la desentendida.
- Rin. -La llamó haciendo que esta dirigiera su mirada hacia él.
- Esta bien, de cualquier manera, aunque intente escapar siempre me encontraras. -Dijo soltando un suspiro cargado de resignación. - No entiendo para que quieres que me quede cuando tu y yo no soportamos. - Dijo saliendo de la celda sin mirar al peliplata.
-Rin. -La llamo nuevamente haciendo la girar y mirarlo de nueva cuenta. – No es eso. - Se excuso, porque le sucedía esto, él, él gran Sesshomaru, confundido por una simple chica a la cual primero detesto, pero ahora simplemente no entendía que pasaba, se apresuró y salió dejando a la chica atrás. – Vamos. - Dijo en voz alta para que la azabache lo siguiera.
Irasue caminaba por los pasillos del palacio, esta se dirigía a su habitación, pero se detuvo al ver que su hijo caminaba junto a Rin por lo que no pudo evitar acercase y sacarle canas verdes a al peliplata.
- ¡Vaya! Ustedes dos al fin se llevan bien. - Expresó está mirando a la azabache.
- ¿Qué dices? - Preguntó este fulminado con la mirada a su madre, tomo de la mano a Rin y empezaron a caminar.
-Nos vemos. - Rin se despidió de la ojos dorados.
- ¡Disfruten la noche chicos! ¡No hagan tanto ruido, porque los demás necesitan descansar! -Grito esta con malicia y segura de que Sesshomaru la escucharía.
- ¡Tonterías! -Pensó Sesshomaru mientras sujetaba la mano de Rin.
-Dormirás aquí, el palacio no esta condicionado para que los demás pasen la noche aquí. – Explicó - ¿Qué tonterías estoy diciendo? ¿Por qué miento? - Pensó
- Prefiero regresar a la celda, bueno descansa. - Dijo la azabache dispuesta a caminar.
-No. - Dijo este de una manera autoritaria. – Ya te he dado una orden. - Dijo este mirando a la chica, quien rápidamente lo miro mal.
- Y yo ya te dije que prefiero dormir en la celda. - Dijo molesta, aquí vamos de nuevo, el peliplata estaba fuera de sus casillas, realmente le molestaba que ella le llevará la contraria.
-He dicho que dormirás aquí. – La tomo bruscamente por los hombros y la llevo a la cama, donde por un paso en falso terminó cayendo encima de ella, quedando tan cerca uno del otro, regreso a la realidad al ver la posición en la que se encontraban, se separo de ella y la vio ruborizarse un poco.
-Está bien, dormiré aquí. - Dijo colocándose al otro extremo de la cama. -Descansa. - Dijo sin si quiera mirarlo para después darle la espalda.
- ¡Hump! - Soltó con cierta frustración, apago las velas por lo que quedaron en completa oscuridad, mas tarde la luna alcanzo su punto más alto por lo que se coló en la habitación iluminado solo la parte donde encontraba acostada la azabache.
- ¿Cómo alguien de tamaño tan pequeño como tú puede tener ese carácter? – Se preguntó a sí mismo.
Se quedo un poco más de tiempo observándola, ahora perecía moverse, se giro aun dormida por lo que pudo ver el delicado rostro femenino de la azabache.
- ¿Por qué me trasmite paz el verla dormida? – Pensó una vez más.
CONTINUARÁ...
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¡Hola! Que tengan un lindo día, por cierto, ya nos siguen en nuestras fans page's @sesshomarufrases y @moonlightwart. Espero que si jajaja, por otro lado, las invito a reportar o denunciar si ven mis historias en otras paginas o grupos que no patrocine, mis fics son exclusivamente del Sesshrin no otros shippeos, si lo llegaran a requerir puedo hacer comisiones sin costo alguno pero esto es solo para aclarar dudas.
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Cautiva 《Sesshomaru y Rin》
FanficEs vendida y llevada al frío y arrogante lord del Oeste, quien desprecia a los seres humanos, considerando que el "amor " es para seres débiles como ellos, mientras que ella es una chica valiente. ¿Acaso será la contraparte él? -¡Nunca amaré a un...