En el palacio de Naraku, Kagura se encontraba encerrada en su habitación, daba vueltas y vueltas, pensado en una forma de separar a esa azabache de Sesshomaru.
-Me comienzo a fastidiar. - Soltó la pelinegra, salió de la habitación cerrando la puerta fuertemente, bajo las escaleras encontrándose con su hermano sentado en el sofá.
-Alguien no está de humor hoy. - Soltó irónico el pelinegro.
- ¡Callate, tú eres el culpable de todo esto! - Reprochó la pelinegra.
-Ajá. - Respondió el pelinegro mirando un folleto que uno de sus sirvientes le había entregado.
En los tiempos de la edad antigua, es decir, los tiempos de realeza estructurado por Yokais de los cuatro puntos cardinales, no existían cosas modernas e innovadoras, por lo que los anuncios y folletos era realizados a mano con buena escritura japonesa. Así pues, los Yokais pertenecientes al clan se encargaban de regir a los pueblos que estuvieran en sus tierras.
- ¿Qué es eso? -Preguntó curiosa la pelinegra.
-Es sobre un festival de sakuras. - Dijo dándole en folleto a la pelinegra.
-Que absurdo, festividades humanas inútiles. - Bufó la pelinegra.
- El sirviente de Sesshomaru ha ido al pueblo a comprar lo que parece ser un kimono, ¿Crees que ellos irán a ese festival? -Pregunta este ganándose la mirada asesina de la pelinegra.
- ¡Tonterías! Sesshomaru asistiendo a celebraciones tan viles como esas ¡Qué estupidez! – Respondió.
-Kagura, sabes perfectamente lo que quiero, quiero a esa mujer. - Soltó este. - ¿No necesitas un nuevo kimono? - Preguntó dándole la espalda a Kagura.
- ¿Qué? - Pregunta esta.
•••
-Rin, te vez preciosa- Decía Kaede mirando a la chica, quien llevaba un kimono color escarlata, con detalles dorados, su cabello era sujetado con una horquilla de flor.
-Gracias. -Respondió con timidez la azabache.
La hora de partir al pueblo donde se llevaría a cabo el festival se acercaba, por su parte el peliplata se puso un haori blanco y una hakama color gris, el peliplata se encontraba en la entrada del palacio, alguien finalmente había llegado.
-Justo a tiempo Totasai. - Dijo al verlo.
-Este es un pedido que se puede cumplir, y no corre ningún riesgo mi vida. - Dijo este entregando una pequeña bolsa aterciopelada.
- ¿Sabes que puedo matarte si quiero? - Preguntó burlón, mientras que Totasai lo miraba con desagrado.
-Mejor me voy. - Dijo este elevándose por los cielos en su vaca Mo-Mo.
- ¡Hump! -Se giro para ir en busca de la azabache, camino hasta llegar a la habitación donde se la encontró riendo con Kaede, se quedó en silencio un momento para después hablar. - Rin, es hora de irnos. - La miró una vez más.
-Sí. - Bajo la mirada, en el fondo de su ser, quizá quería escuchar algún elogio por parte del peliplata, rápidamente negó y se despidió de Kaede para después irse con Sesshomaru.
•••
En el camino ninguno dijo nada, Rin iba montada en Ah- Un, mientras que el peliplata y Jaken iban a pie, pronto llegaron a Otsu.
- ¡Qué hermoso! -Exclamó la azabache mirando los arboles de sakura.
-Ven. -Dijo el peliplata ayudándola a bajar de Ah-Un. -Puedes ir a ver, pero no te alejes demasiado. - Dijo el peliplata.
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Cautiva 《Sesshomaru y Rin》
FanficEs vendida y llevada al frío y arrogante lord del Oeste, quien desprecia a los seres humanos, considerando que el "amor " es para seres débiles como ellos, mientras que ella es una chica valiente. ¿Acaso será la contraparte él? -¡Nunca amaré a un...