Maya
Gris.
El día era gris.
Gris a punto de una tormenta.
El típico día en el que te permites sentirte melancólico a él igual que el cielo.
Las semanas transcurrían, la rutina era la misma.
Pero ahora un extraño vacío acompañaba mis días.
Después de ese beso que tantas veces fantaseé con tener, pensé que todo sería perfecto.
Pensé que podría ser feliz de nuevo después de mucho tiempo.
Pero no fue así.
El simplemente se esfumó.
No supe nada de él.
Ni a la mañana siguiente, ni en las siguientes semanas.
Parecía como si la tierra se lo hubiese tragado.
Hice algo mal?
No lo sabía, solo sabía que me sentía peor que antes de que me besara.
Duele.
Una persona no puede ilusionarte si no piensa corresponder tus sentimientos.
Cierto?
Pero tenía claro que no me podía estancar.
El me advirtió.
Y yo tenía que vivir, tenia cosas que enfrentar.
No niego que las intente intente evitar, por que estaría mintiendo.
No lo haría por El, tenía que investigar las suposiciones de Axel hacia mi familia, por mi bendita salud mental que no era muy buena que digamos.
Suelto un suspiro a él detener mis pasos
Mis nudillos tocan la puerta blanca de madera que se encuentra a el frente mío.
-Pase-
Escuché cómo respondieron de el otro lado de la puerta.
Sin pensarlo mucho, abrí la puerta y me adentré en la oficina.
-Maya qué gusto verte por aquí- dice mi tío poniéndose de pie para envolverme en un cálido abrazo
-Hola- le dije mientras recibía gustosa su abrazo
Papá solía abrasarme así.
Tan fuerte que apenas podía respirar.
-Que te trae por aquí? ¿Estás bien?- pregunto el mientras rompía el abrazo
-Estoy bien, solo que quiero hablar contigo sobre algo importante- le digo y asiente
-Toma asiento por favor- dice él mientras toma asiento detrás de su escritorio en su cómoda silla
Yo por mi parte me siento en un pequeño sofá que se encontraba frente a su escritorio
-Como has estado?- pregunto intentando ser amable
-Cansado, me estoy haciendo viejo cariño- dijo el riendo
Le di una sonrisa de boca cerrada
-Tonterías, te vez más joven cada vez que te veo- le dije riendo
-Los años no pasan en vano- dijo
-Se que no es fácil para ti hacerte cargo de todo esto, agradezco que me apoyes aquí - le dije sincera
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Decisión Culpable
RomansaToda familia tiene secretos eso tendría que ser normal, ¿no? Maya hereda todo el imperio de su padres tras su muerte, nunca se habría imaginado lo que este imperio escondía, solo tenía que seguir perfectamente las pistas, pues su padre tenía un prop...
