꧁ 𝑵𝒐 𝑫𝒆𝒋𝒂𝒓𝒆 𝑸𝒖𝒆 𝑻𝒆 𝑳𝒂𝒔𝒕𝒊𝒎𝒆𝒏 ~ 𝑪. 𝑫. ꧂

Capitulo 23

Diferentes pensadores y religiones han tratado de explicar lo que pasa cuando uno muere, unos dicen que se va al cielo o al infierno dependiendo de sus acciones en el mundo terrenal, otros dicen que no se encuentra nada, otros que reencarnas en otro cuerpo empezando otra vida, pero las que la familia de Alice creía era en el inframundo, la creencia antigua de la mitología griega donde al momento de morir eras buscado en una balsa donde tenias que pagar peaje para seguir e camino hasta el inframundo, si no contabas con una moneda que tus familiares debieron haber puesto en tus ojos a la hora de morir, tu alma quedaría en el limbo hasta que consiguieras una. Algo dentro de si siempre le dijo a Alice que no moriría en una cama por vejez o enfermedad, su neceded y sus ganas de perseguir aventura le decían que moriría joven en algún travesía, pero nunca creyó que su final seria a los 17 años durante una prueba hecha por la escuela, agradeció que al menos antes de fallecer logro mandar su escrito a diferentes editoriales, al menos su nombre estaría en un libro.

Miro a su alrededor de donde se encontraba, todo contaba con un color extremadamente blanco, casi lastimoso para su vista, camino en la luz ocupada por neblina buscando la balsa que se suponía debía de encontrar para acabar su viaje, toco su pecho y sintió el collar que le había regalado Cedric, sabia que gracias a el tenia lo necesario para no quedarse penando. Logro ver a lo lejos de ella un pequeño rio rosado con una balsa blanca en este, un encapuchado se encontraba en esta conduciéndola, Alice en cuanto lo vio se acerco corriendo a este llamando su atención, en cuanto estanco la figura encapuchada libero un aroma que reconocía muy bien, las famosas margaritas Rosier, la capucha fue alejada de su cabeza liberando unos largos mechones dorados.

—Mama...— el rostro de la que era su madre era tranquilo y sereno mostrándole una gran sonrisa, la joven Black no espero y entro con rapidez a la balsa dándole un fuerte abrazo a la mujer que le había traído al mundo, lagrimas habían empezado a salir de manera desesperada por sus ojos —¿Cómo estas aquí?

—¿Dónde crees que estamos Alicia?— pregunto con su ronca voz que creyó que nunca volvería a escuchar

—¿Es el pasaje no? Para ir al inframundo— su madre le indico con la mirada que se sentara en la barca mientras ella empezaba a navegar con ayuda de un gran remo —Morí en el mundo terrenal.

—Vaya, lamento escuchar eso— le dijo con fingida pena mirando el lago rosado frente a ellas

—Con Cedric– recordó en ese instante poniéndose de pie rápidamente —Tenemos que regresar el debe de estar...

—Paciencia Alicia— con dos dedos impuso fuerza sobre ella haciendo que se volviera a sentar de golpe —Hace 14 años que no me vez, podemos dar un paseo tranquilo y hablar un rato.

—No lo entiendes, tengo que ir yo lo...

—Lo amas, lo se, los he visto— La morocha la miro confundida por sus palabras —¿En serio creíste que me iría tan fácil?

—Tu eras el espíritu oscuro del que Myrthle hablaba...— suspiro sorprendida mientras veía como la rubia chica frente a ella ponía una sonrisa culpable —¿Pero como es eso posible?

—Tuve una muerte trágica, cuando eso pasa muchos espíritus no pueden descansar, y yo tenia muchas cuentas pendientes en el plano mortal— tomo lo que parecía una ancla y la tiro dentro de agua, para luego tomar asiento frente a la chica —Yo no tengo mucho conocimientos del plano espiritual, pero al parecer nuestros espíritus quedaron atados a ti

—¿Nuestros?

—Tu hermano, Regulus, el creció como un espíritu, pero creo que alcanzo la paz hace muchos años, cuando conociste a los gemelos Weasley— suspiro mirando el rosada agua —Dijo que no lo necesitabas para cuidarte, los tenias a ellos.