Un nuevo comienzo y un nuevo secreto {Terminada}

Ruptura

Narra: Sabrina.

-Germán.

- No está-me dice de la nada Omar.

-Oh. ¿Será que le puedes decir que lo vine a buscar?- le pido.

-Por supuesto. ¿Por que no lo esperas?. No debe tardar en llegar.

- Es que ha voy muy retrasada, pero dile que su hermana Sabrina lo vino a ver.

Digamos que si no llego Marco me matara, tenia un trabajo y debía terminarlo, ya voy realmente tarde.

Sólo espero que el juego no alla terminado aún.

-¿Eres hermana de Germán?.

-Así es. Bueno, medio hermana realmente-le digo con una sonrisa.

-Ya sabía yo que el tenia un cierto parecido con alguien que avia visto, pero por más que intentaba no encontraba a quien se parecía-me dice con una sonrisa.

-Okay. Me tengo que ir, pero le dijo dicho eso con tigo.

-Okay. No hay problema, yo le digo.

Yo asiento.

-Okay. Chao.

-Chao.

Yo me marchó y bajo lo más rápido que puedo las escalera. Saco mi móvil y me percató de la hora.

Nueve en punto.

-Nos va hamatar.

Ya ni me lo recuerdes, ojalá y alla ganado el juego. Si no gana estará con un animo de perro, Marco obviamente no es la clase de chicos que deposita la culpa en mi, en contrario. Aunque este enojado trata de ser torneo y lindo con migo. Pero en este caso se pondrá muy enojado con migo por no haber estado hay viéndolo.

-Sabrina-escucho como me llaman por mi nombre.

Yo me doy la vuelta encontrándome con Omar.

-Espera un momento.

-Es que ya voy muy retrasada.

La lluvia se hace presente, fabuloso. Ahora solo falta que me caiga un rayo en sima.

-Hablamos luego.

-Es que no te quitaré mucho tiempo.

Omar se acerca a mi y de la nada junta nuestros labios en un beso. Intento alejarlo de mi, pero sus labios me capturan. Nos separamos.

- Yo...-las palabras seme atascan.

No podía creer lo que estaba sucedido. No podía creer lo que avia hecho, mis ojos se agrandan al ver aún Marco con el ceño frunjido y mojado.

-Marco-yo voy atrás de el.

-Sabrina-Omar me llama.

-Ahora no Omar. Debo que ir con Marco.

-Ahora si la cagamos. Marco jamas no perdonará esto.

Ya basta de torturarme de esta manera conciencia.

-Marco. Espera-intento deterlo.

-¿Que lo que quieres ahora?.

El se da la vuelta. Su rostro y cuerpo estaba todo empapado devido a la lluvia.

-Déjame explicartelo-le pido.

-¿Que me explicará?. ¿Como faltaste a mi juego para besarte con ese idiota?-pronuncia furiosa.

-Es que la cosa no sucedieron asi-pronuncio con desesperación.

-¿A no?. ¿Entonces como sucedieron?.

- El fue el que me beso.

- No me intentes ver la cara de idiota-escupe con hira.

-Marco. Fue el, debes creerme.

-YO TE VI. El fue el que te beso. Pero no te detuviste. ¿O Si?.

Las lágrimas comienzan a salir una tras otra.

- Lo lamento. No se por que lo hice, ni siquiera deseaba besarla. Debes creerme.

Yo me acerco a el. Pero Marco me toma con fuerza de los hombros y me aleja de el.

- No deseo tener nada que ver con tigo.

Su mirada me partió en corazón, pero sus palabras me destrozaron el alma. Quede petrificada, las lágrimas ya salían por si sola.

El desespero se apoderó completamente de mi. Es como un momento de lusides, estaba cometiendo tantas cosas malas y sin saber por qué.

Estaba hiriendo a personas. Y ahora lo avia perdido ah el por idiota.

Marco se da la vuelta. Y antes de que se marchará pronuncio las siguientes palabras.

-¿Y qué pasó con nuestro juramento?.

El de da la vuelta.

- No me culpes por eso. Fuiste tu la que lo rompió-una lágrima sale de sus ojos.

-Pero era tu el que está acabando esto.

- No me culpes por esto, ya que fuiste tu la que hiciste todo esto.

-Prometiste que siempre estarías con migo. Tu me dijiste que no sabias como vivir sin mi-prinucio con desespero.

- Al parecer tengo que aprender a vivir sin ti en mi vida. Lamento haberte amado más de lo necesario.

- No digas eso. Por favor-le pido.

-Sabía que esto no acabaría bien. Y aún así me ariegue.

-Marco. Yo te amo-le digo en llanto.

- No deseo escuchar más estupideces.

- Es que no son estupideces. Realmente te amo.

- No me arrepiento de haberte conocido. Pero si me arrepiento de haberte permitido dado tantas privilegios en tu vida.

- No me dejes por favor. Te necesito.

-Pues que lastima. Ya que yo no puedo estar con una mujer que me ha causado tanto dolor, me has destrozado el alma. Te e dicho que mi corazón es tuyo y tu lo has destrozado.

-Prometo ser la de antes. Ya no pasaré tanto tiempo con mi familia, y estaré más tiempo con tigo. Sólo no me dejes-le pido desesperada.

- Tu familia. De alguna cierta forma también me cambiaste por tu padre. Por ese padre que jamás estuvo para ti, y no fue por que no sabía adónde estabas. ¿Quien crees que pagaba tu colegiatura y la de tu hermano?.

-¿De qué hablas?-pregunto en estado de shock.

- Tu padre si te busco. Y te encontró, y si se calló fue para que su matrimonio no sé dañara. Y si no hable ante fue porque tu estabas feliz. Y su tu eras feliz yo también lo era. Pero tu solo te alejaste de mi. No te importo ni siquiera lo que yo sentía, solo pensaste en ti.

- Lo lamento tanto-digo entre lágrimas.

- Yo lo lamento mucho más.

Marco solo se da la vuelta y sin mas se marcha. Miles de lágrimas salen una tras otra sin parar.

-¡¡MARCOOO!!!-grito su nombre.

Caigo al suelo. Mis anatomía se encontraba helada por la lluvia.

- Te amo-digo en susurro.

Esa etapa de mi vida se llama. Ser una imbécil.

Prácticamente yo lo estropie todo, merezco con mucha razón todo lo que estoy sintiendo ahora mismo.

Siento un gran hueco en mi corazón, no puedo parar el dolor tan grande que siento en el alma y por más que lo intento no puedo detener mi llanto.

Me siento terrible, mi príncipe sobre protector de ojos azules se ha ido. Y a sido mi culpa.

Me concentre tanto en hacer feliz a mi nueva familia que deje de pensar en lo que Marco sentía. Mierda.

Fuy realmente una idiota, el fue el único que estaba hay para mi. Y ahora el no está.

Se a ido, y es por mi culpa. Se ha marchado, y se ha llevado mi corazón con sigo.