- Gracias. - le dije fría a Dixie y ella solo me dio una sonrisa forzada. Fui a donde estaba avani, ignorando todas las miradas.
- Addison! ¡Viniste con Dixie! Hubieras visto la cara de Madison, casi muere de los celos. -dijo avani sonriente. Madison, antes solíamos ser amigas. Desafortunadamente le conté lo de mi beso con Dixie ¡maldita niña de trece años que le contaba todo a sus amigas! Por lo menos madure en ese aspecto. Desde el año pasado ella ha estado detrás de Dixie y digamos que odia a cada una de esas chicas que se acercan a ella... ¡Mierda! Madison sabe de ese beso y vernos llegar así... ¿En qué me he metido?
- solo se ofreció a traerme y ya avani.
- dije fría.- Si y por dentro estabas saltando de la emoción cuando te lo pidió. Al igual que yo cuando vi la cara de esa estúpida
-Dijo mi amiga y yo reí. Ella me conocía muy bien.Entramos a la escuela y como odiaba la maldita atención. Nos dirigimos al auditorio en donde teníamos una reunión toda la escuela. Me senté con mi amiga y hablamos mientras esperábamos que todos se sentaran y mantuvimos silencio. Hasta que el sueño pike empezó con su discurso.
Avani y yo nos encontramos sentadas en una de las mesas alejadas de todos. Sí, después de varias horas aburridas, ya era hora del almuerzo. Vimos entrar a Dixie, seguida por mi hermana, Chase y Bryce y unas que otras chicas. Mi hermana se acercó a mí, mierda, ahora toda la atención se centraba en nosotras.
- pequeña, no te puedo llevar a casa hoy. Es que tengo que hacer unas cosas hoy y...
- la interrumpí.- Como sea, Sofía. Iré caminando a casi si es eso lo que te preocupa. -Dije seca. Subí la mira y ahí estaba Dixie a su lado, mirándome fijamente, solo que Madison abrazándola- ah y no me vuelvas a llamar pequeña. -Odiaba recordar el pasado, mi madre fue la primera en ponerme ese apodo.
- Perdón y gracias hermanita. - Dijo y me dio un beso en la frente. Todo se alejaron y se sentaron en su mesa. Madison se sentó en las piernas de Dixie y no pude evitar sentir celos. No puedo creer que después de todo estos años sigo enamorada de ella. Ese beso. Ese maldito beso fue el causante de todo.
- Addison, te estoy hablando. -Dijo avani y yo quite la mirada de ellos.
- Oh, perdón...
- Dix, Dix, Dix... - Dijo avani y yo solo reí a carcajadas.
En la salida, guardé algunos libros en mi casillero mientas hablaba con avani. Me despedi de ella y empecé a caminar y vi a Sofía hablando con sus amigos y otros chicos. No me quería imaginar que harían hoy. Claro, viernes. Eso lo explica todo. Mi hermana me miró y me sonrió. Estúpida. Yo le doble los ojos y seguí caminado. Pasé por un café que quedaba cerca de casa y pensé ¿por qué no? Entre y pedí unas galletas de chocolate con café. Me senté en una
mesa alejada y empecé a comer, tenía bastante hambre. Un chico de cabello liso, rubio y ojos marrones se sentó en mi mesa. ¡Si, en la mía!- hola, pues como somos las dos únicas personas aquí y tu estas sola al igual que yo, pensé que podía sentarme aquí contigo -Dijo y yo sonrio. Su sonrisa era hermosa. Yo también sonreíy envidiaba tanto su seguridad en si mismo. Yo jamás habría hecho lo que él hizo.
- hola tranquilo. Pues para empezar me llamo Addison ¿tú?
- Me llamo Antony. ¿Y que hacías sola aquí?
-Pues probablemente lo mismo que tu
-Dije y el sonrio al instante.Y así duramos toda la tarde metidos en el café conociéndonos. Antony era
muy divertido, hace tiempo no tenía una conversación así con alguien al parecer teníamos el mismo gusto musical, a los dos nos encantaba simple plan.- muero por su último cd. -Dijo mirándome a lo que yo sonrei.
-¿sí? Pues yo a mi madre se lo pedi y pensó que a mi hermana también le gustaba, por eso compró dos. Los que me lleva a que obviamente uno no lo uso y... -El solo sonreía.
-Addison, ¿en verdad?
- ¡Sí! Ven, si quieres acompañame a casa y te lo doy. Aparte ya oscureció y la casa esta sola ya que mi hermana salió con sus amigos. -Dije y empezamos a caminar a casa. Reíamos por cualquier tontería en el camino en el camino. Debo admitir que el chico era genial.
Le agarre de la mano mientras corríamos hasta que por fin llegamos a casa entramos y... ¿Que hacían ellos aquí? ¿No se supone que estarían de fiesta o algo así?
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Eres mía, rubia (dixison)
RomanceDixie D'amelio y Addison Rae No tenían muchas cosas en común, sus edades eran distintas, sus maneras de caminar no coincidían y mucho menos la estatura. Nunca pensaban igual, tenían ideas muy diferentes y actitudes contrarias. Dixie era dueña de si...