Capítulo 7.

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-Hola. -Dije muy fría.

-Hola mamá. ¿Como has estado? -Dijo Sofía dándole un abrazo.

-¿pasa algo, Pequeña? -Dijo acercandose a mí. ¿Porque me tiene que decir así? Solo me gusta que me diga así Dixie -pensé en mi mente

-Sí, tu. -Dije mirándola por primera vez a los ojos.

-No le prestes atención, mamá. Ya sabes, sigue siendo una niña grosera y malcriada. -Dijo Sofía. No sé qué sentía en ese momento. Algo como rabia y tristeza. Solo quería desaparecer.

-¿Alguna vez han escuchado eso de que tu familia te tiene que apoyar, estar ahí para ti y hacerte sentir querido? Pues con ustedes es todo lo contrario. Son una mierda, ¡las dos! Tu, Sofía, eres solo una imbecil que esta pendiente de chicas, sus amigos, sexo, alcohol. Tú sheri, no creo que te pueda llamar "mamá" otra vez. Nunca estás ahí. ¿Esto es a lo que ustedes llaman una familia? ¡Está muy lejos de serlo! A veces sólo quisiera desaparecer o irme lejos . Lejos de aquí, ¡alejarme de todas las personas que me rodean! En especial de "mi familia". Ahora no finjan que yo soy el problema, ni siquiera se atrevan a hacerlo. Las odio tanto. -Dije entre lágrimas. Por fin, por fin me había desahogado. Sabía que algún día explotaria.

Sofía tenía una mirada tristes y sólo miraba hacia abajo. No me atreví a mirar a Sheri. Subí a mi habitación y cerré la puerta de un portazo, me tiré en mi cama a llorar como hacia siempre. Empecé a gritar contra la almohada. Odiaba esto. Odiaba todo.

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Sofía.

Todo lo que dijo Addison era cierto. Nosotras estábamos muy lejos de ser una familia. Me dolio tanto lo que dijo, fue tan sincera. Toda esta familia se fue a la mierda desde que papá murió y Addison era la más cercana a él. Era su mejor amigo, era su todo. Tenía ganas de abrazarla, de decirle que la amaba más que nada, pero ella no me querrá ni ver. Todos estos años he sido una imbécil con ella.

¿Como era capaz de ni siquiera dejarla que se viniera sola de la escuela a la casa? ¿Solo porque tengo que hacer algo con mis amigos o con chicas? Eso es verdad. Siempre la pongo a ellos primero que a ella. Soy una puta decepción.

-Mamá, yo...

-creo que debería irme mejor. Dile que la amo. -Pronto cogio todas sus cosas y se fue. Todo empeoraba. Todo.

Me senté en el sofá y me puse a pensar muchas cosas. Suspiré. Mi teléfono comenzó a sonar.

-Hey sofia, no te imaginas. Probablemente esa fue la mejor follad...
-la interrumpí.

-No estoy de humor, Dixie.

-¿pasa algo? Sabes que me puedes contar.

-Sí, Addison...

-¿Qué? ¿Le paso algo a Addison? ¿Dónde está?

-sabes que vino mamá y todo se salió de control, ella solo dijo lo que ha sentido todos estos años. Ella empezó a llorar y nos dijo que nos odiaba. Fue horrible ver a mi hermana así.

-Espera, voy para allá. -Dijo y colgó.

Diez minutos después Dixie estaba aquí se sentó en un sillón y yo le explique mejor.

-Es horrible. He sido toda una imbécil con ella. Mamá y yo nunca hemos estado cuando ella más nos necesitaba ¡ella nos necesita! Y yo solo me preocupo por otras cosas. ¿Sabes cuantas veces la he escuchado llorar? ¡Todas las putas noches! Pero yo soy una cobarde como para preguntarle que le pasa o decirle que todo va a estar bien pase lo que pase.

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Dixie.

Quería tenerla en mis brazos. Abrazarla, protegerla, estar ahí para ella como nunca nadie lo ha estado. Decirle que todo iba a estar bien al final.

Pero eso era imposible.

Me sentí como una mierda sabiendo que ella estaba así, tan deprimida. Que yo no podía hacer nada para cambiar eso.

Maldita impotencia. Solo quería robarle una sonrisa, hacer que todo el dolor que sienta se fuera.

La quería tanto, me está volviendo loca. Solo la quería conmigo, a mi rubia.

Mía.

Estába tan perdida en mis pensamientos que no me di cuenta de que ella estaba bajando las escaleras. Ella... Tenía un suéter de barman con unas medias negras. Ella esquivo mi mirada, se nota que estaba llorando.

-¿Y Sheri? -Le preguntó a Sofía.

-Mamá se fue, Addison -Ella dobló los ojos.

-Maldita cobarde. -Dijo y subió hasta su habitación.

No aguantaba más. No podía. Tenía que hacer algo. Tenía que hablar con ella.

-¿A dónde vas? -Dijo Sofía muestras veía que subía las escaleras.

-Al baño. -Menti.

Toque la puerta

-No quiero verte, Sofía. -Abrí la puerta con cuidado y ahí estaba ella, sentada viendo por la ventana. Volteo y me miró.

-¡Y a ti mucho menos! -Dijo y se empezó a acercae a mi para sacarme de su habitación. Yo tenía más fuerza y cerré la puerta.

-Solo quiero hablar contigo, ¿te podrías calmar?.

-¿Que es lo que quieres? -Dijo y me senté en su cama.

-Yo se como te sientes, pero lo peor es encerrarse en su propio mundo y deprimirse.

-¿Tu que sabes? ¿Ya Sofía te lo contó, verdad? Es una imbécil.

-Créeme, yo se lo que sientes. Perder a la persona que mas quieres y sentir que nadie a tu alrededor te puede comprender como esa persona lo hacía. Sentirte sola.

-Tu no sabes nada.

-Sí, Addison. Yo perdí a mi hermana Charli hace muchos años y no sabes lo mucho que me deprimí. Incluso pensaba en quitarme la vida. -ella se sentó en la cama y me miró -pero después comprendí 1ie eso era lo peor que podría hacer, deprimirme. Hice muchas cosas que jamás pensé que haría... Todo fue un desastre. No me gustaria que pasaras por lo mismo, simplemente no quiero que estés así.

-¿qué cosas hiciste? Digo, si puedo saber.

-Un amigo me dijo que para olvidar todo por un momento mejor era drogarme. -Ella abrió la boca sorprendida -incluso me hacía daño a mi misma, golpeaba las paredes con fuerza e incluso rompí el espejo que tenía en mi cuarto. No quiero que nunca pienses en hacerte daño, pequeña, nunca.

-¿Por qué haces esto?

-Me importas, Addison. Aunque no lo creas. -Ella se acercó a mí y me abrazo y me di cuenta de que todo lo que quiero estaba ahí, conmigo. Todo lo que siempre he deseado.

-Creo que deberías de hablar con Sofía.

-No quiero. -Dijo ella escondiéndose en mi pecho -Hablando de ella ¿donde esta? Digo, si te viera aquí ya te hubiese matado. -Yo reí.

-Pues le dije que iría al baño. -Ella espezo a reír y me sentí completa. La había hecho reír.

-Dixie...

-¿Sí?

-No quiero que te vayas.

Eres mía, rubia (dixison) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora