Capítulo 59

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DANNA

Ya es lunes, ya falta poco para que sea el receso, aún me siento un poco de la fregada, pero bueno, estoy mejor. Pero aún así, Ronnie me lleva preguntando todo el fucking día lo mismo, y ya me haré, solo ha sido «¿Estás bien?» o «Estás segura que estás bien», sin duda estaría mejor si dejara de preguntarlo.
Y justo cuando suena el toque, y Giovanny grita lo de siempre, me levanto, ella me sigue y lo pregunta otra vez: -Danna, ¿estás segura que estás bien?- la diferencia es que ahora sí exploto.
-QUE SI- todos nos voltean a ver. Aparento lo mejor que puedo y sonrío. -Si, estoy bien, es más estoy tan bien que mira esto- me subo a una silla y les hablo a todos: -Oigan, si, todos, no se vayan, esperen, si, incluso tú narco Barbie- todos se acercan. -Este viernes hay una gran fiesta en un antro, espectacular, tengo muchísimas invitaciones, y adivinen que, los invito a todos- varios aplauden, pero Lupita me dice:
-¿Y estamos todos invitados?
-Of curse sweetheart, pero bueno..., es una red party, para los que no me entiendan, todos de rojo ¿vale?- me bajo de la silla, pongo una mano en su hombro (de Lupita) y le digo: -Y no te ofensas, pero yo creo que tú armario solo tiene dos colores, aburrido y aburridísimo- nos reímos muchos, no se exactamente quienes pero si lo hacemos, ella se suelta y se va. -Vaya, creo que es sensible.
En eso Mia se acerca y me dice: -Oye a ti que te pasa, está bien que te pelees con Roberto si quieres, pero ella no te ha hecho nada.
-Tranquila, que es sólo un poquito de humor Mia- le sonrío. -Pero lo de la fiesta va en serio, están todos invitados, en un ratito les mando la info. -tomo mi bolsa que la había dejado en la mesa, le hago una señal a Verónica y me sigue, y justo cuando íbamos a salir, Roberta me jala del brazo.
-Suéltame estúpida- le digo.
-Mira marquesita, te lo resumo, conmigo, está bien, porque yo si sé cómo lidiar con gente como tú, pero a Lupita, no le vuelvas a decir nada ¿me escuchaste?
-Back off- me suelto y seguimos caminando. Nos detenemos en el pasillo y nos sentamos.
-¿No crees que te has pasado?
-Ay no, tú también, que era solo un poco de humor.
-Bueno, si tú lo dices- en eso Archie se acerca hacia nosotros. No puede ser, lo último que necesito en este momento es que me venga a invitar a salir o algo, así que justo cuando se pone delante de nosotros le digo:
-Hoy no estoy de humor querido.
Se ríe -¿qué? Perdón, no vengo contigo- lo volteo a ver. -Vengo con Verónica.
Sonrío, tratando de fingir que si había sido un error mío. -No me digas que se conocen.
-Bueno- empieza ella. -Nos conocimos en la fiesta de Juanpa, y me invitó a salir.
-¿Y no me contaste?
-¿Cuándo?, ¿en el funeral?, ¿o en las llamadas que no contestabas?
-Claro- desvío la mirada. -Bueno, los dejó entonces- y disimuladamente me acerco a Archie y le digo lo más bajo que puedo. -Tú y yo vamos a hablar hijo de puta- me voltea a ver, asiente y se sienta junto a Verónica, en el lugar en el que yo estaba antes.
Me alejo de donde están y veo que Tomás se le queda viendo, así que me acerco a él y le digo: -No me digas que ahora también hay espías aquí.
Se voltea lo más rápido que puede y dice -No, no, no para nada, ay osea ¿cómo crees?
Me río -Como tú digas- doy dos pasos en otra dirección y en eso me habla: -Oye Danna.
Me volteo y le digo -Dime.
-Oye este..., bueno, ¿tú sabes si Verónica y Archie..., tienen onda?
-Que yo sepa no, pero igual, tampoco es que me sepa cada detalle de su vida amorosa.
-No pues si ¿verdad?- recarga la cabeza en el pilar y yo le digo.
-Pero ¿tú por qué quieres saber? No me digas que te interesa.
-¿Qué? No osea, no- es patético mintiendo.
-Ay querido, yo que tú, me daba prisa, porque en cualquier momento se le acerca un..., pelirrojo y bueno..., chao a cualquier oportunidad.
-Si..., tienes razón, muchas gracias- me dice y se va, justo a donde está Verónica con Archie.
-Patético- digo para mi misma.
Cuando Tomás se les acerca, Archie se despide de ella, se levanta y empieza a caminar hacia mi. Lo tuvo a un lugar en el que V no nos pueda ver y le digo:
-¿Le contaste? Lo que pasó entre nosotros.
-No, ¿por qué habría de hacerlo?
-¿Te la vas a tirar?
-Pues..., puede ser.
-Joder- me doy la media vuelta.
-¿Qué tiene de malo?
-Es mi mejor amiga animal.
-¿Y eso qué?
-¿Como carajo te vas a meter con ella, sin contarle que tú y yo estuvimos juntos?
-Pero es que lo que pasó entre nosotros no fue nada, tú misma lo dijiste.
-Eso no implica que no le tengas que contar. Mira Archie- lo tomó por el cuello y le digo: -Ella es muy importante para mí ¿está bien? Y no vale la pena que se meta con alguien como tú.
-Creo que eso no lo decides tú, sino ella- lo suelto y me alejo.
-Te lo digo en serio.
-Y yo también.
-¿Por qué estás haciendo esto?
-No lo sé, tal vez solo para estar cerca de ti, quien sabe- se acerca a mi, me pone contra la pared, pero yo lo empujo y le doy una cachetada, pero en seguida lo tomo de la cara y haga que me vea.
-Estás muerto hijo de puta- se ríe y yo me voy.

LUPITA

Estoy en mi cuarto, sé que no debería de estar llorando, y ni siquiera sé porque lo hago. No debería de afectarle lo que ella me diga, pero aquí estoy, llorando como siempre, es que es inevitable caray.
Pero en eso entran Roberta y Mis.
-¿Ves? Te dije que iba a estar aquí Barbie.
-Ay bueno ya Roberto, cállate- se sientan en mi cama.
-Ey ¿qué pasa mi Lupe?
Me limpio las lágrimas y les digo a las dos, aunque Roberta due la que preguntó -Nada, estoy bien.
-Lupita... -empieza Mia. -te afectó lo que dijo la marquesa esa de quinta ¿verdad?
Me suelto a llorar otra vez y las dos me abrazan.
-Ay mi Lupe, nunca cambias de veras- dice Roberta.
-Ya sé, perdón, soy una tonta.
-No, no, no, la tonta es ella, por estarse metiendo contigo, cuando su pelea es con Roberta.
-¿Perdón?
-Ay osea si Robert, es la verdad, ustedes desde el día uno se andan friegue y friegue.
-Bueno...
-Es verdad- le digo y se ríe.
-Es que es como un deporte para mí, o un hobbie, no sé.
-Ay no, que dar eres wey- dice Mia y nos reímos las tres.
-No, pero ya en serio mi Lupe ¿qué pasó?
-¿Cómo que que pasó Roberto? Osea wey, ofendió su estilo de la moda y eso es gravísimo. Neta, es uno de los motivos por los que es tan difícil ser yo.
-Barbie, en buena onda, Lupita no es como tú, caray entiende.
-De hecho- digo y las dos me voltean a ver. -Si fue eso, no tanto el estilo de la moda, sino que es verdad. Chavas, yo no tengo un armario del tamaño del cuarto en mi casa, y yo creo que a duras penas tengo una blusa roja, no como ustedes.
-Lupe, ¿y eso qué importa?
-Si osea, tú sabes que yo te puedo prestar ropa cuando quieras y Roberto también, y de hecho, creo que en mi casa tengo un vestido que te va a quedar, increíble.
-¿Ya ves? No tiene porque importarte lo que diga la marquesa esa, para eso nos tienes a nosotras mi Lupe, sino ¿para qué estamos?
-En eso si estoy de acuerdo con Roberto, y por lo del vestido, no te preocupes, si quieres hasta al rato voy por él.
-¿Harías eso?
-Claro que si tonta- me da un leve golpe en el brazo y después dice -Ven acá- me da un abrazo y juntas jalamos a Roberts para que se nos una, y lo hace.
-Bueno, ya, ya pues. Mucho abrazo por un día- dice después de un corto rato y Mia y yo nos reímos. Justo en eso alguien toca y la puerta se abre un poco, es Santos.
-¿Puedo pasar?
-Oh, pues ¿cómo no? Si ya te habías tardado- dice Roberta, toma a Mis del brazo y dice. -Igual ya nos íbamos.
-¿A si?- dice Mia, Roberts la voltea a ver y dice: - A si, claro, claro, ya nos íbamos.
Salen corriendo del cuarto y Santos entra.
-¿Está todo bien?
-Ahora si.
-Que bueno, cuando te ví salir, si pensé que algo iba mal, te estaba buscando y hasta ahorita te encontré, así que creo que me ganaron ellas.
-Un poco si- nos reímos. -Pero ya estás aquí. -me acerco a él y lo abrazo. -Y te agradezco por eso.
-No me tienes que agradecer, yo siempre voy a estar aquí, me puedo tardar en encontrarte, pero voy a estar ahí, te lo prometo Lupita.
Levanto la cabeza y le doy un beso -Te quiero Santos.
-Yo también te quiero Lupita- me abraza más fuerte, pero después me se para, me toma de los hombros y dice: -¿Qué te parece?, si para descargar tensiones y así, vamos a comer algo, es que me muero de hambre.
-Está bien, me agrada tú idea.
Abre la puerta y me dice -Después de ti señorita.
-Gracias caballero- salgo y él lo hace después de mi.
En el camino, le platico lo que pasó con Roberts y Mia, y él también piensa que son muy buenas amigas, casi tanto como yo lo hago.
Ya el llegar nos sentamos y ordenamos cada quien lo que queríamos.

Rebelde 4ta Temporada: El Último Año En El Elite ¿Todo Será Igual? (En Pausa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora