love me, please? [l.s] // traducción

ᴠᴇɪɴᴛɪꜱɪᴇᴛᴇ

El patinaje sobre hielo realmente no era el fuerte de Harry.

Tal vez era porque sus piernas eran demasiado largas o era por su torpeza en general, pero Harry realmente no era tan bueno patinando, razón por la cual se golpeaba la cabeza por pedirle a Louis que fuera a patinar sobre hielo con él. Podría haber elegido algo en lo que era bueno, o al menos algo en lo que no se vería como un completo tonto frente a Louis, pero no, había elegido el patinaje sobre hielo, una actividad que seguramente lo haría caer varias veces. .

No lo malinterpretes: le encantaba el patinaje sobre hielo y pensaba que era divertido, pero desafortunadamente el hecho de que le gustara no lo hacía bueno patinando. Y sí, podría haberle preguntado a Louis si podían hacer algo más, pero Louis había sonado tan emocionado por ir a patinar sobre hielo que Harry no pudo soportar decepcionarlo.

Harry estaba en la cama y volvieron a hacer videollamadas unos días después de su confesión, tratando de programar su primera cita. Harry se sintió mareado con solo pensar en ir a una cita con Louis y no pudo controlar la sonrisa en su rostro mientras hablaba con Louis a través de la pantalla de su teléfono.

"Nunca había ido a patinar sobre hielo", confeso Louis, como si estuviera revelando un gran secreto. "Sin embargo, siempre he querido intentarlo".

"¿Por qué nunca has patinado antes?"

Louis se encogió de hombros. "Creo que nunca llegué a hacerlo". Louis no estaba en su propia habitación esta vez - Harry podía distinguir su sala de estar al fondo, así como las voces de sus hermanas, su madre y lo que sonaba como ... ¿Niall?

"¡Hola, Harreh!" Una cabellera rubia de repente llenó la pantalla de Harry, sobresaltándolo un poco.

"Hola, Niall."

Niall se sentó en el sofá junto a Louis y comenzó a divagar, "Estoy tan emocionado ahora que ustedes dos se han confesado, no tienes idea—"

"¡Niall!" Louis chilló, mortificado, y trató de empujar a Niall del sofá con su mano libre. "¡Vete!"

Niall voluntariamente saltó del sofá y se escapó para escapar de la ira de Louis, pero Harry aún podía escucharlo reír en el fondo. Las mejillas de Louis estaban rojas en llamas y estaba escondiendo su rostro con las patas de su suéter, haciendo todo lo posible por no hacer contacto visual con Harry. El corazón de Harry se derritió, amado por este adorable angelito que parecía hacer de todo lo que hacía la cosa más dulce del mundo, y no pudo evitarlo. "Aww, eres lindo, amor."

Las mejillas de Louis se sonrojaron aún más ante eso y Harry luchó contra el impulso de correr a la casa de los Tomlinsons solo para pellizcar las mejillas de Louis. "Entonces, um." Louis se aclaró la garganta, los ojos aún no se encontraban con los de Harry. "¿C-cuándo estás libre?"

"Estoy libre casi toda la semana". Era cierto, Harry había despejado todo su horario para hacer espacio para su primera cita y la de Louis, y el resto de su tiempo libre estaba reservado para acostarse en su cama y enloquecer por Louis. Iba a ser una buena semana.

"Está bien, um ..." Louis jugueteó con el dobladillo de su suéter mientras pensaba. "¿Qué tal este viernes? Creo que estoy libre".

"Sí, por supuesto. El viernes está bien para mí." Harry se sentó un poco en su cama. "¿A dónde quieres ir? Hay una pista de patinaje sobre hielo cerca del centro comercial, a quince minutos de aquí".

"Eso suena genial." Louis seguía escondiendo su rostro con sus mangas. "¿A qué hora deberíamos encontrarnos? ¿A-y dónde?"

"Puedo recogerte en tu casa," ofreció Harry. "¿Y qué tal las cuatro de la tarde? Podemos ir a patinar y luego cenar juntos, solo si quieres, por supuesto", añadió apresuradamente, temiendo estar siendo demasiado atrevido.