Cap 46. El amor de tu vida

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Era un viaje largo hacia donde Taehyung quería ir y Jungkook se estaba impacientando un poquito.

— ¿Acaso me estás secuestrado?

Taehyung soltó una risita.

— Tranquilo, diez minutos más y bajamos. Este lugar va a encantarte.

—  ¿Exactamente en dónde queda este lugar?

— Es un shopping, así que podremos ver más cosas, pero hay una tienda... Es un bar ¡Jungkook ese lugar es la maravilla!

Taehyung siguió andando en el auto y por fin, luego de los diez minutos prometidos, llegó al shopping. Era un lugar enorme y estaba todo decorado con luces de colores que por la luz del sol no se llegaban a apreciar muy bien. 

Ambos entraron y caminaron tomados de la mano (fue Jungkook quien se arriesgó a hacerlo, ahora estaba bastante satisfecho). Taehyung lo guío mientras miraban tiendas (en su mayoría de ropa, perfumerías y maquillaje). Llegaron a las escaleras mecánicas que bajaban al subsuelo y esperaron a bajar. Taehyung miró a Jungkook y le ofreció una sonrisa: los ojos le brillaban, ansioso porque él también conociera un lugar muy bonito. 

Al llegar abajo, Taehyung dobló en una esquina cerca de un local de dvd nuevos y se paró frente a la puerta de vidrio de una cafetería. 

— Bienvenido a mi cueva. — le dijo abriendo la puerta. 

Jungkook al entrar, se quedó impactado: Las paredes estaban tapizadas con papel en blanco y negro, llenas de dibujo de manga, tal como si hubiese arrancado las paginas de los tomos de millones de mangas para tapizar la pared. Las mesas estaban acorde con la decoración y en cada una de ellas había una figura de anime anclada a la mesa para que la gente no se la robara. Las mesas eran todas en color crema, al igual que las sillas (las cuales tenían almohadones mullidos de color negro) 

En los altavoces de la cafetería se escuchaba la canción "Unravel" de Tokyo Ghoul versión piano. 

— En la parte de atrás hay un mini jardín — comentó Taehyung mirando por encima de todo el local — pero al parecer está lleno de gente. Ven, vamos a una mesa. 

Ambos se sentaron en una mesita donde al lado había una estantería angosta llena de mangas. Eso era lo más impresionante del lugar: había mangas para leer por todos lados. 

— ¿Y qué tal? — preguntó Taehyung esperezando. 

— Si yo fuera mucho más otaku... creo que ya me hubiera desmayado al entrar aquí. — dijo admirando la decoración — ¿los mangas también están para comprar o solo se pueden agarrar y leer?

— Puedes pedirlo, estos son de muestras. Creo que tienen una bodega en la parte de abajo, allí tienen todo el material nuevo. — Taehyung puso una mano en la comisura de sus labios —hace como un año me escabullí a la bodega. ¡Es otro mundo!

— Este lugar es un paraíso. 

Una chica de dos coletas rubias se les acercó para tomarles el pedido. 

— Yo quería un batido de fresa. — dijo Jungkook con una sonrisa. 

— Lo de siempre, Wendy. 

Ella le tomó el pedido a ambos y se fue rápidamente a organizarlos. 

— Parece que vienes muchas veces aquí. — comentó Jungkook algo celoso de que Taehyung supiera el nombre de la chica. 

— Vengo cuando necesito estar aquí. Es relajante. Aparte puedo leer mangas gratis y me ahorro dinero en comprar colecciones de veinte o cuarenta tomos. Los leo gratis, estoy como dos horas aquí y aprovecho para adelantar lecturas. 

— Entonces sí lees. — Jungkook alzó una ceja — el otro día tu tía te dio gratis todos esos libros. ¿Por qué cuando apenas nos conocimos dijiste que no leías mucho?

Taehyung miró hacia abajo algo cohibido. 

— Supongo que tengo una apariencia ruda que mantener. 

— ¿Acaso los chicos rudos no leen? — preguntó gracioso Jungkook. 

— Es una pregunta muy tonta, Jeon. —lo llamó así a propósito — los chicos rudos no leen. 

— Tú no eres un chico rudo. — dijo Jungkook recordando lo mimoso que era Taehyung con él. 

Los batidos de fresa y chocolate llegaron y, cuando la mesera se fue, Taehyung le dijo a Jungkook:

— No soy un chico rudo. Soy el amor de tu vida. 

El club del beso [TK] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora