Capítulo 7: Golpe bajo.

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Antes de que el médico se acercará a nosotros sentí como mis piernas flaqueaban, mis manos temblaban, podía escuchar el sonido de mi corazón, estaba nervioso. Dios quiera que todo esté bien. Necesito buenas noticias.

"Familiares de la señorita Leticia Padilla Solís."

"Nosotros, yo soy su padre ¿cómo está mi hija?"

"La paciente llegó en un estado de gravedad."

Al escuchar eso sentí como mis lágrimas empezaban a descender por mis mejillas, una ola de flashazos inundó mi mente al recordar el momento de su atropellamiento.

"Lamentablemente tuvimos que reanimarla a la vida, afortunadamente logramos la estabilización."

Respire de alivio al escuchar eso, ella estaba viva, seguía conmigo, tenía una oportunidad de demostrarle que aunque me equivoqué,  la amo con toda mi alma.

"Debido a que el atropellamiento se trató de un impacto directo secundario, con esto quiero decir que, el tórax, el abdomen y las extremidades inferiores fueron las más afectadas. Leticia perdió mucha sangre lo que complicó el traumatismo torácico, la rotura de grandes vasos y afectación de la vía aérea. El traumatismo abdominal que afectó a los órganos internos principalmente al hígado y al bazo. Fracturando también dos costillas derechas. Tiene una lesión en cabeza, cuello y cara, afortunadamente solo fueron rasguños y abrasiones. Sin embargo, la operación más complicada fue en la pierna derecha que por el impacto se quebraron los tres huesos y tuvimos que hacer una reconstrucción de la misma colocando dispositivos de fijación interna como lo fue una placa y algunos tornillos. Esto aunado al latigazo cervical la recuperación será lenta ya que con la delicadeza de las vértebras necesitará de inmovilización."

Inmovilización, esa palabra rebotaba en mi mente que quería decir con eso, Mi Lety estaría bien ¿No? Sí debía estarlo, ella es fuerte, valiente y nada la hará desistir en la vida, su vida, nuestra vida juntos.

"¿Ella va a estar bien doctor?" Preguntó Doña Julieta con lágrimas en sus mejillas.

"Por ahora tenemos que tener paciencia y observar  la reacción de la paciente a las operaciones. No podemos decirle a ciencia cierta, lo único que si es que Leticia estará unos días en sedación."

"¿Qué quiere decir con esto?" Indagó Don Erasmo tomando la mano de su esposa.

"Tuvimos que hacer esto con la paciente ya que si ella está consciente no podrá soportar el dolor solamente con medicamento."

Dios mío ¿por qué? Ella es tan buena, no merece dolor, merece el cielo, ese que le daré aquí en la tierra si ella me lo permite.

"Pero ¿estará bien?, ¿ella se salvará?" Pregunté desesperado, el doctor no era tan claro decía mucho pero yo no entendía nada.

"No les voy a mentir, la señorita Padilla está grave, las siguientes horas serán vitales para su vida."

Escuchar aquellas palabras me rompía el corazón, había pocas esperanzas y posibilidades de que mi Lety se pusiera bien, pero como si las operaciones fueron un éxito, ella no podía rendirse y yo no me podía dar por vencido. Los dos necesitábamos luchar Lety para vivir y tu Mendiola para conseguir su amor.

Quería pensar y creer que ella estaría bien. Dios mío por favor no te la lleves, Lety es buena, ella debe estar bien.  Soy yo quien merece todo lo malo, solo yo y tu mi Dios lo sabes.

"Podemos pasar a verla." Preguntó Don Erasmo.

"Por el momento no es conveniente, alguna novedad inmediatamente nosotros les avisaremos."

El doctor se dio la vuelta y vi como desaparecía por el corredor, me sentía totalmente fuera de mí, no sabía qué hacer, quería gritar, llorar, realmente quería morirme, sí solo eso podía sanar mi dolor.

"¿Erasmo nuestra Lety estará bien verdad?" Dijo Doña Julieta abrazando a su esposo, veía la escena y quería desvanecerme ahí mismo "es tu culpa" decía una y otra vez en mi mente, estaba desesperado y desconsolado. Pero lo peor es que estaba solo y sin ella.

Esto nada más podía ser una maldita broma, mi Lety, la mujer que aprendí a querer con los días, a amar con el tiempo, ella no podía dejarme.

Estuve una hora más con ellos. Era ya tarde tenía que irme de ahí en contra de mi voluntad. No quería separarme de mi Lety, pero debía ir con Marcia y a conceptos, tenía que hacerlo por ella, de ahora en adelante todo lo que haga será por Leticia para demostrarle mi amor.  Y cuando ella esté bien, vea que soy un hombre que ahora sí merece estar a su lado. Me despedí de los Padilla diciéndoles que en la tarde regresaría al hospital que si pasaba algo con su hija me avisaran lo más pronto posible.

La Fea Más Bella: Fuí.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora