Cuando la paciencia lastima (Karmaland AU)

Capítulo 1

P.O.V Vegetta

Estaba descansado en la casa de Luzu después de haberle ayudado con su vino, desde hace unas semanas intentaba subirle el ánimo, pues Auron le había dejado de lado y Luzu ahora era Sad Luzu. Yo estaba frustrado con Auron por tratarlo como si no fueran nada, y no, no me estoy quejando por estar con Luzu, todo lo contrario él es uno de mis mejores amigos, siempre ha estado ahí para mí y por ende yo siempre estoy ahí para él, pero no me gusta verlo así, triste, destrozado, con ojeras por no haber dormido bien, cuando me habla con lágrimas en los ojos y con la voz rota, se me estruja el corazón verlo de esa forma, y aunque él muchas veces quiere parecer malo haciéndose llamar Evil Luzu yo sé que le cuesta más no ayudar a los demás.

   - ¿Borja? - le pregunté - ¿Quieres salir? Podemos ir a comprar ropa o simplemente a pasear.

   - No Samu, yo me quedo, pero tú ya deberías irte porque dentro de poco anochece y no quisiera que te pasase algo por mi culpa, como siempre - mientras más hablaba sus ojos se iban llenando de lágrimas y su voz sonaba entrecortada

   - No Luzu, para por favor, no me puedo ir dejándote así - le dije preocupado.

   - Ja, tranquila Vegatta, voy a estar bien, pero tú debes volver, tienes que ver a tus animales y has pasado en mi casa desde la mañana, también debes descansar - me dijo con su cabeza agachada.

   - Está bien, me iré, con una condición Borja, no harás ninguna estupidez mientras no esté - le dije de forma seria

   - Aw, mi Samuel preocupado por mí? - me dijo intentando bromear, pero con su voz, pareció más un lamento

   - Sabes que siempre lo haré, ahora, no harás nada, cierto?

   - Te lo prometo, ahora ve, ya está anocheciendo - me dijo abrazándome - con cuidado.

Me fuí de su casa dejándole solo, sabía que podía confiar en él, de camino a mi casa pasé por el pueblo y me pude percatar de que en el ayuntamiento había luces, extrañado me acerqué a ver qué pasaba, y pude notar que nuestros compañeros (los héroes de Karmaland) estaba ahí reunidos, me acerqué a ellos dispuesto a preguntar el porqué había una reunió en la cuál ni Luzu, ni Rubius ni yo estábamos presentes, sin embargo, cuando me acerqué escuché algo que me desanimó...

"Siempre molestando" dijo Willy "no entiende que ya no lo queremos aquí"

"Nunca nos deja hacer nada" le siguió Auron

"Ya sé, necesitamos que se vaya de aquí" comentó Fargan

"Por supuesto que sí, maldito triple 7" terminó Alexby

P.O.V Narradora

Era de noche y ninguno de los supuestos amigos del ojimorado se había dado cuenta de que este último los había escuchado como ya tantas veces atrás lo hizo, y es que sí, desde hace meses sus amigos hablaban mal de él a sus espaldas, y la mayoría de veces Vegetta los escuchaba, pero se negaba a creer que de verdad estuvieran hablando sobre él, siempre que los escuchaba regresaba a su casa con lágrimas en los ojos, a pesar de todas las palabras hirientes que oía, al día siguiente intentaba volver a hablar con sus amigos y seguirlos ayudando como siempre hacía. Él sabía desde hace tiempo que ya no lo querían ahí, y si fuera por él se hubiera ido desde hace mucho tiempo para que sus amigos se sintieran más cómodos, hubiera regresado a un lugar donde también lo necesitaban, un lugar que amaba sin importar que, pero no se iba porque Luzu lo necesitaba y no lo iba a dejar solo.

Mientras el castaño regresaba a su casa sintiéndose lamentable, un ojirojo con capucha estaba en la suya intentando dormir para poder cumplir la promesa que le había hecho a su amigo, había muchos conocidos suyos en las penumbras que lo estaban incitando a hacer dibujos permanentes, pero él no los quería escuchar, quería dormir, extrañaba descansar bien y poder dormir más de 2 horas cada noche y es que para muchos podría sonar exagerado, pero aquel chico de cabello pelinegro con un mechón naranja que lo había ayudado después de haber perdido las elecciones, el mismo chico que bromeaba y coqueteaba siempre con él sin descaro alguno, ese chico que se había convertido en su todo, que hacía poco habían empezado a salir por petición del que alguna vez solía parecer un pedazo de miel, esa misma persona lo había estado ignorando y tratando como si nunca hubiera existido y como si lo que él mismo hubiera hecho ahora resultaba ser el mayor error de toda su vida. Y para variar, era él quien se sentía como si su mera existencia consistiera en ser un error. Sus pensamientos continuaron así hasta que se durmió cerca de la 1 de la mañana, felicitándose a sí mismo por lograr dormir más temprano de lo que últimamente se había acostumbrado.

A eso de las 6 de la mañana se escuchó una gran explosión logrando despertar a Luzu quien preocupado salió de su casa para ver qué había sido aquello y lo más importante dónde.

   - Fuck, al menos sonó lejos - dijo en un vano intento de calmarse.

Cuando salió a la entrada de su casa pudo percatarse de que cierta isla flotante estaba en llamas y con todas las subidas posibles explotadas

   - VEGETTA!!!! - gritó el chico sad viendo la casa que su amigo había construido con ayuda de él en escombros, iba a salir corriendo, pero no se dió cuenta de que frente a él había una placa de presión y sin quererlo la pisó, escuchó la TNT entrar en acción y sin poder detenerlo, mientras él volaba por los aires vió como su casa entera explotaba llenándolo todo de lava.

Su vuelo se vio interrumpido cuando chocó con una montaña y antes de quedar inconsciente con un increíble dolor de cabeza lo último que alcanzó a ver fue la casa que le había tomado horas construirla, completamente destrozada mientras escuchaba como alguien le buscab